En Trazos De Pincel (Ace Y Tú) [FINALIZADA]

45- Confesión

Se paró en seco al oir el sonido del agua mezclándose con las risas de las chicas.

Tan sólo las separaba de él una hilera de árboles y matojos, se agachó un poco sintiendo su corazón latirle con fuerza y se asomó con cuidado a aquel claro en el bosque nevado.

Había una gran terma llena de agua que soltaba vapor, en cuyo interior se encontraban las tres chicas riendo mientras hablaban.

No se fijó ni en Nami ni en Robin, su mirada se clavó en (Tn), en su cuerpo y rostro mojados, su pelo recogido en un moño desordenado, en su piel brillante y en su sonrisa alegre. Se notaba que lo estaba pasando bien.

Una diversión que estaba en todos por aquellas vacaciones y que él no quería arruinar.

Y aquel mensaje que recibió aquella mañana sólo lograría eso, arruinar aquellas vacaciones tan esperadas por todos.

Retrocedió lentamente sin hacer ruido y se alejó de aquel lugar sumergido nuevamente en sus pensamientos.

Mientras tanto...

Robin- Y bien (Tn), ¿No hay ningún chico que te llame la atención?

La chica la miró un poco sorprendida por el giro de la conversación.

(Tn)- ¿Por qué dices eso...?

Nami- Quizás porque entre que toda tu clientela son chicos con la excusa de ir a verte también hay alguien muy cercano a ti que te tiene puesto el ojo.

La chica se puso un poco nerviosa.

(Tn)- ¿Cercano a mi...?

Robin rió divertida.

Robin- Creo que aún no se ha dado cuenta, Nami.

Nami suspiró dramática.

Nami- Amiga, no se donde tienes los ojos... está más claro que el agua.

(Tn) las miró un poco confusa pensando.

(Tn)- ... ¿Coby...?

Nami- mmm.... bueno si él también pero no nos referimos a ese.

La chica volvió a pensar sin éxito.

Robin la observaba divertida mientras que Nami no veía resultado en su meditación.

Nami- Zoro, (Tn), el espadachin.

(Tn) abrió los ojos sorprendida y la miró.

(Tn)- ¿Qué...? No, eso es imposible... Zoro no puede estar enamorado de mi.

Robin- ¿Por qué no?

Nami- Se nota muchísimo amiga mía, en como te mira por ejemplo.

Robin- Pero ese sentimiento viene ya desde hace tiempo... me sorprende que aún no se haya declarado.

La chica bajo su mirada hacia él agua pensando en aquello. Si era cierto que Zoro sentía algo por ella no podría corresponderle y aquello podría dificultar su relación de amistad aunque una parte de ella le seguía diciendo que eso era imposible.

¿Porqué un chico como Zoro, atletico, atractivo con ese toque tan masculino y con un séquito de admiradoras se fijaría en ella?

Nami y Robin se miraron al ver a la chica.

Nami- Ya va siendo hora de salir, o si no pareceremos viejas arrugadas.

Robin- O que nos arrugemos tanto que nuestra piel se desprenda de nuestro cuerpo y que deje de haber riego de sangre y...

(Tn) salió de la bañera ajustándose la toalla.

(Tn)- Ya ya ya ya... vamos.

Robin rió y las tres chicas se secaron y se pusieron la bata y regresaron lo más rápido posible hasta el hotel.

Al llegar a su habitación (Tn) se puso un jersey blanco y un pantalón oscuro y salió de la habitación dejando a las dos chicas peinandose diciéndoles que iría a caminar por el hotel.

Pasaron varios minutos mientras ella caminaba en silencio por los pasillos de piedra y alfombras, donde el único sonido que oía eran sus propios pasos.

Llegó a la sala común del hotel, un lugar con varios sofares, alfombras, ventanas al exterior y una gran chimenea que caldeaba toda la estancia.

La chica observó la chimenea y se acercó a ella para entrar en calor pero a medida que iba acercándose se percató de una presencia delante de ella sentado en el suelo.

Una presencia que reconoció.

(Tn)- ¿Qué haces aquí sólo? -dijo amablemente sentándose a su lado en la alfombra delante de la chimenea-

Ace la miró y esbozó una pequeña sonrisa.

Ace- Necesitaba estar solo.

(Tn)- ¿Estás bien...? -dijo un poco preocupada.

Ace no supo que decir y apartó su mirada nuevamente hacía el fuego.

La chica se acercó un poco más y le puso una mano en la espalda acariciandola un poco.

(Tn)- Ace... -dijo amablemente inclinandose hacia él.

Ace sonrió un poco y la miró percatándose que la chica estaba más cerca.
Miró sus ojos iluminados por el fuego de la chimenea provocando destellos en ellos, unos ojos que lo miraban preocupados.

Suspiró un poco y bajó su mirada.

Ace- A veces las cosas no salen como uno espera...

(Tn)- ¿Que quieres decir...?

Ace ceró los ojos por unos segundos y los abrió mirando la alfombra bajo sus pies.

Ace- Hacia mucho tiempo que no era tan feliz... Nunca había luchado tan seguido contra mi enfermedad... -susurró- Hacia tiempo que no me iba a dormir satisfecho de mis progresos...

(Tn)- Pero eso es bueno... Luchar contra tu enfermedad es una buena señal...¿Por qué estás mal...?

Ace- Porque todo siempre termina... nada dura para siempre... -habló con voz baja.

(Tn)- Ace, no logró comprender...

El chico la miró y por su mirada la chica supo que lo que iba a decirle a continuación le quitaría el aliento.

Ace- Me voy.

(Tn)- ¿Qué...?

Ace- Me marcho nuevamente a Italia...