No me dejes sola. ||Terminada||

Capítulo VII

Iba llegando algo cansada, esta semana apenas había podido venir 2 veces porque tuve exámenes finales y eran muy pesados.

En cuanto llegue fui recibida por las enfermeras que ya se sabían mi nombre, las salude y después fui a tu habitación como de costumbre.

Cuando llegue te volví a ver en esa camilla, había olvidado lo que sentía al verte ahí, sonreí ligeramente mientras recordaba los momento que habíamos pasado juntas, en serio esperaba que despertaras ya, para poder pasar más momentos felices contigo.

Ese día no paso nada, bueno, a excepción de que fueron tus amigos pues les habían dicho que yo no estaba yendo regularmente por mis exámenes, eso me lo dijo el único chico que me caía bien, a él tampoco le agradaban los demás pero parece que se aguantaba por no quedarse solo.

Sinceramente no me agradaba que estuvieran ahí pero al final estaba platicando un poco con el chico mientras vigilaba a los otros y eso me mantenía un poco tranquila.

Cuando el chico se fue los demás no lo hicieron así que para no empezar a maldecirlos empecé a hacer mi tarea como siempre, yo en una orilla del sillón con las piernas cruzadas y papeles en el resto del espacio.

Sinceramente casi se me escapa una risa bastante estruendosa cuando vi a tus amigos verme sorprendidos, parece que ellos aún no escogen qué quieren hacer y como yo estoy en una preparatoria técnica ya me enseñan unas cosas de mi carrera y por ello tengo más tareas y trabajos.

—¿Cómo por qué me miran así?— Logre mantenerme seria mientras me veían y después de preguntar devolví mis ojos a mis apuntes y seguí haciendo cuentas y escribiendo, sinceramente pensé que no me responderían.

—¿Tú no tenías 17 años?— Me seguían mirando y eso era incomodo para mi, no me gustaba que me miraran tanto y menos personas que no me caían ni un poco bien.

—Dentro de poco los cumplo, ¿por qué?— El que me miraran me daba poca paciencia y yo respondí cortante.

—Si tienes 16 años ... ¿Cómo es qué sabes cosas de contaduría?, se supone que eso es complicado y lo que estas haciendo es lo mismo que ahora hace mi papá— Eso lo dijo la chica que más me caía mal, enserio la odio.

Yo reí un poco burlonamente y los mire —Lo sé gracias a que yo escogí mi carrera desde temprano y me metí a una preparatoria técnica ah, por cierto, una cosa es que a tu papá se le haga difícil, esto es de segundo semestre y es demasiado básico— Después de decir aquello empecé a hacer cuentas de nuevo con una pequeña sonrisa.

—¡Hija de p— Fue interrumpida, habían abierto la puerta y cuando volteé a ver era una enfermera, más bien mi enfermera favorita.

—¿Qué pasa aquí?— Preguntó con el seño fruncido, supongo que escuchó la grosería y entró a ver qué sucedía.

—Señora Luz, pues no pasa nada, que aquí estos chicos están de imprudentes— Le hable con el mismo respeto que le tenia.

—Esto es un hospital, no es para que estén diciendo vulgaridades, les voy a pedir que se vayan de aquí— Eso de venir a diario y conocer a las enfermeras tiene puntos a mi favor.

Tus amigos me miraron de mala manera y después voltearon a ver a la enfermera, parecía que le iban a decir algo pero yo hablé antes.

—¿Por qué me miran así? ... Yo sólo dije la verdad— Lo dije con una voz un tanto inocente.

—Si no salen ahora mismo mandare a llamar a seguridad para que los saquen— Ante eso tus amigos empezaron a caminar a la salida mientras la enfermera los miraba, yo sonreí victoriosa y cuando uno de ellos me volteo a ver le dije "bai bai" con los labios y con un gesto de despedida en la mano.

Cuando salieron la enfermera me miró —Sigue con tu tarea, yo me encargo de que no entren de nuevo cuando tú estes aquí— Eso no me lo esperé pero enserio me alegró puesto que a partir de ahora a menos de que estuviera en la escuela iba a estar siempre ahí junto a ti, más aún cuando se acercaban vacaciones.

—Muchas gracias, señora Luz— Dije mientras le sonreía y después ella salió dejandome contigo y con mucha tarea por hacer.