Capítulo IX

17 4 0
                                    

No podía parar de llorar, había salido de la habitación en la que estabas hace aproximadamente media hora, o al menos eso creo, ya oí tres veces que me llamaban por los altavoces o que personas pasaban por fuera del cuarto gritando mi nombre mientras corrían o trotaban.

¿Dónde estaba? La verdad no lo sé, sólo sé que empecé a correr por los pasillos hasta que me metí a una habitación y me quede en un rincón abrazando mis piernas mientras lloraba tratando de no hacer mucho ruido con mis sollozos.

Creo que era un cuarto prohibido o algo así por que no habían venido a buscarme y no era una puerta que estuviera escondida o eso creo recordar, al final me quedé dormida mientras lloraba y me atormentaba yo sola con los recuerdos y tus palabras.

.....................

Desperté en el sillón en el que dormía los días que no me separaba para nada de ti, era de noche y de inmediato me senté para ver si no había alguien además de ti.

Estaba tu madre dormida en un sillón para uno, tú también estabas dormida, sinceramente no tendría el valor para verte así que de inmediato salí del cuarto tratando de no hacer ningún ruido.

Al final lo logre y cuando estaba caminando escuche tu voz.

Te quiero—  Fue lo que escuche, de inmediato voltee a ver hacia tu habitación y no vi a nadie, había sido un producto de mi imaginación. Estaba de paranoica.

¿Te irás? — Fue el doctor que te atendía el que me dijo eso cuando doble un pasillo y me lo encontré de frente.

¿Por qué me olvido?— Lo dije con voz temblorosa mientras bajaba la mirada.

... Nosotros no sabemos lo que le pasó, me refiero a su accidente, sólo la encontraron con daños físicos y la trajeron de inmediato aquí— Eso es cierto, nunca supimos que fue lo que te pasó exactamanete para que terminaras tan mal.

—¿Eso qué tiene que ver? — En ese momento sólo pensé que pudiste haber recibido un golpe en la cabeza y eso hizo que te olvidarás de muchas cosas.

... Cuando te estábamos buscando y mientras estuviste dormida vinieron a visitarla sus amigos— El que los mencionara me enojo y lo demostré cuando lo volví a ver —... Ella recuerda a sus amigos—  En ese momento supe por qué me había dicho sobre tus amigos.

—¿Qué? .... ¿Pero entonces cómo es que no me recuerda a mi? ... A mi me conoce desde antes que a ellos ..  ¿P-por qu— Me interrumpió, me estaba alterando muy rápido.

Tranquila, te volverá a dar un ataque, no sabemos exactamente qué paso, puede que aquello que le ocurrió haya tenido que ver contigo y por ello su cerebro te bloqueó

Escuche eso y por un momento me quede analizándolo ... Tu cerebro me había bloqueado a mi y por ello también había bloqueado todos los recuerdos que teníamos juntas.

Para mi eres mi mejor amiga pero yo para ti no soy nadie, soy una desconocida, tal vez ahora mismo tu mejor amiga es esa chica que me cae mal o cualquier otra conocida tuya.

No esperé a que el doctor me dijera más cuando salí del hospital corriendo a toda prisa, no quería saber más

Cuando salí me encontré con una fuerte lluvia, probablemente me daría una pulmonía pues no tenia ningún suéter pero yo seguí corriendo y seguiría así pues a la 1 de la mañana ya no hay transporte alguno.

.......................

Llegue a las 11 y media de la mañana a mi casa, estaba empapada, cansada, llorando y posiblemente con fiebre.

Cuando entre me encontré con mi madre y mi padre preocupados, los dos de inmediato me abrazaron y me vieron atacandome con reclamos y preguntas las cuales nunca contesté gracias a mi respiración agitada y entre cortada.

Tu abuela había llamado para ver si yo no estaba en mi casa y al no encontrarme por ningún lado habían llamado a mi padre pues él estaba viviendo en otro lado, a dos horas y media para ser exacta, vivía así de lejos por cuestiones de trabajo.

En cuanto me abrazaron yo perdí todas mis fuerzas y mis piernas se doblaron haciendo que mis padres también calleran pero sin dejar de abrazarme, después de unos segundos, entre varios llantos de parte mía y caricias de parte de mi madre y padre, por fin logre pronunciar algo.

—¡Me olvido! ... ¡N-No se acuerda de nada sobre mi!— Me di cuenta de que mi voz estaba ronca y más que nada rota —¡Soy una desconocida para ella!— Estaba destrozada.

Minutos después mis padres se separaron de mi, me trataron de dar algo de comer aunque poco fue lo que ingeri, me dieron ropa y después de cambiarme me acostaron pues yo tenia fiebre y una muy alta, ... Yo nunca pare de llorar en ningún momento.

Cmo cuando te vi por primera vez en la camilla, quería que todo eso fuera una jodida broma, una pesadilla o algo parecido para verme sufrir a propósito.

No me dejes sola. ||Terminada||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora