¿Enamorada de él?

Capitulo 61. Voy a ser tía?

Narra Izan.

Había pasado una semana desde que habíamos llegado a Madrid desde el viaje a París. Estaba sentado en las gradas viendo el partido de Boleybol en el que jugaba Lia. Había pasado media hora y todos habíamos decidido ir juntos a verla y a animarla.

-Vamos, Lia!- dice Valen que estaba a mi lado.

Lia lanza la pelota hasta el otro campo marcando un puto a favor de su equipo, hiban ganando.

Habían pasado un par de minutos, el otro equipo lanza la pelota hasta el lado contrario en el que está Lia pero en segundos la chica se desploma cayendo en el suelo.

-Lia!- dice Valen bajando de la grada corriendo. Alex, Katty, Wendy, Dani y yo la seguimos.

Una hora después...

Narra Izan.

Lia estaba en el hospital ya que una ambulancia la había llevado. Katty, Alex, Dani, Wendy y Valen estaban sentados en los sillones de la sala de espera mientras yo daba vueltas desde una esquina del pasillo hasta la otra. No llevaban mucho tiempo haciéndole pruebas?

-Izan, por qué no te sientas?- dice Valen.

-No quiero.- digo apollando mi espalda en la pared.

-Vale.- dice la chica volviendo a sentarse en el sillón libre.

Pocos minutos después un hombre no muy mayor sale de la habitación de Lia.

-Familiares de Lia?- dice el hombre con una voz fuerte.

-Soy su novio.- digo acercándome al médico.- Está bien?- digo después de alejarnos unos pasos de la sala de espera.

El hombre asiente.- Felicidades, van a ser padres.- dice sonriente.

Felicidades, van a ser padres. Esas palabras suenan un par de veces en mi mente.

-Ella...Ella lo sabe?- digo apollándome en la pared de la habitación de Lia.

-No. Quiere darle la noticia usted?

-Si, claro.

-En media hora se podrán ir, ya le he dado el alta.

-Está bien. Gracias.- digo con media sonrísa.

-De nada.

Paso las manos por mi cara y entro en la habitación.

Narra Lia.

La puerta de la habitación de hospital se abre dejando ver a Izan, está como ausente.

-Hola, pequeña.- dice cerrando la puerta.

Sonrío y estiro mi brazo. Izan se acerca a la camilla y le beso.

-Que me ha pasado?- digo confusa.

-Te desmayaste en medio del partido.- dice acariciando mi mano.- Te duele algo?

-Solo un poco la cabeza, nada más. Pasa algo? Estás como ausente.

-Lia... estás embarazada. Me lo ha dicho hace unos minutos el médico.

Aprieto la mano de Izan y suspiro.

-Nos lo esperabamos, no?- digo después de unos minutos en los que en mi mente sonaban Lia, estás embarazada.- Seremos padres.

-He estropeado todos tus planes.- dice Izan con los ojos húmedos, realmente nunca le había visto así.

-Ei, no has estropeado nada.- digo acariciando su mejilla con una dulce sonrísa.- Solo han cambiado nuestros planes, vale?

-Te quiero.

-Y yo.

Rodeo su cuello con mi brazo acercándolo más a mi y nos besamos.

-Vamos a ser padres.- digo sonriente y tapando mis ojos.

-Si.

Izan me abraza y besa mi mejilla.

-Se lo decimos a los demás?- dice Izan.

-Claro. Son nuestros amigos y no creo que cuando estea de ocho meses piensen que son gases...

Izan suelta una carcajada.

-El médico ha dicho que en media hora te puedes ir.

-Vale.

Media hora después...

Narra Lia.

-Te encuentras mejor?- dice Valen abrazándome.

-Sip.- digo remarcando la p.

-Ya te puedes ir?- dice esta vez Katty.

-Si, ya me han dado el alta.

-No sabes por qué te desmayaste?- dice Wendy.

Izan y yo nos miramos y sonreimos nerviosos. Asiento con la cabeza mientras Izan coloca uno de sus brazos detrás de mi espalda y besa mi mejilla.

-Os tenemos que contar algo.- dice Izan.

Valen nos mira abriendo los ojos como platos y Izan y yo reimos.

-Estoy... embarazada. Por eso llevaba estas semanas mareándome y con naúseas.- después de pasar tres semanas pensando en que sí que lo estaba, no me había acostumbrado a decirlo.

Todos quedan durante unos segundos en silencio hasta que...

-Voy a ser tía?- dice Valen. La chica tenía la misma cara que una niña pequeña cuando le enseñas una bolsa con sus gominolas favoritas.

Izan y yo asentimos y Valen nos abraza. El resto hace lo mismo felicitándonos aunque había unas personas a quien también se lo tendríamos que decir, nuestros padres, lo que menos me gustaba. Seguramente mis padres o al menos mi madre se lo esperaban pero me daba miedo decírselo justamente a ellos.

Durante media hora Izan conduce hasta mi casa, abre la puerta del copiloto para que salga del coche y cuando llegamos a la puerta me da mi bolso.

-Estás bien?- dice a ver como me apollo en la pared junto la puerta de la casa.

-Si. Se lo diré a mi madre ahora.

-Creo que se huele algo.- dice sonriente.- Yo también se lo diré a mis padres.

-Hablamos después, vale?

-Vale.

El chico se acerca a mi y tras depositar un beso en mis labios entro en la casa.

-Hija, que tal? Izan me llamó pero ya sabes, Austin está malo y tu estabas en buenas manos...- dice saliendo de la cocina.

Sonrío.- No te preocupes, he estado en buenas manos.- Cada una se sienta en un sillón diferente.

-Y que te ha dicho el médico? Ya sabes el por qué de los mareos?

Asiento nerviosa.

-Estás embarazada, verdad?

Mi madre se levanta de su sillón y se arrodilla delante del sillón sobre el que estoy sentada.

Asiento aún más nerviosa de lo que estaba. Mi madre acaricia mi mano y sonríe dulcemente.

-Tu tía y yo lo suponíamos. Tendrás toda nuestra ayuda, cariño.

Me acerco a mi madre y durante unos minutos permanecemos abrazadas. Esas palabras eran las que necesitaba escuchar de mi madre en ese mismo instante.