SISTERS } nacho scocco

veintitrés🌷

Germán y el resto se fueron a festejar por ahí, yo me quedé con mi familia y amigos así que le avisé que no sé si vuelvo a la noche al hotel.

Hace ya unos minutos que estaba cuidando a los hijos de Enzo mientras todos los jugadores se encontraban en el vestuario.

Mucho no se cambiaban porque los escuchaba festejar, así que me senté con los chicos y mientras esperabamos subí fotos a instagram.

Más tarde ya estabamos en un colectivo rumbo al hotel del plantel, Cielo iba con el Pity así que yo me senté con mi querido colombiano Rafael.

-¿Y cómo están las cosas por Italia? -pregunta.

-Bien, mejorando creería yo. Se supone que empecé de nuevo con mi ex -le comento. -Pero ahora hablé con Nacho y... ya no sé, Rafa. No sé qué hacer.

-¿Y qué es lo que te dice tu corazón, Mari?

Mi corazón dice tantas cosas.

Mi corazón, desde el primer momento en el que vi a Ignacio en el pasillo del Monumental, late de otra manera.

Su intensidad y sentir se deben a cada una de las cosas que hace y dice el santafesino.

-Dice muchas cosas éste corazón, pero ninguna de ellas es referida a un jugador de Italia.

○●○

Ya en el hotel, después de haber comido, todos tenían permiso de estar con su familia.

Pasé un rato con mis viejos y mi hermana pero estaba bastante cansada así que fui a la habitación de Cielo ya que ella iba a dormir en la del Pity seguramente.

Me bañé y salí solo con la toalla puesta hasta la habitación para buscar ropa de mi hermana pero me topé con una persona.

Grité del susto pero no fue mucho hasta que me di cuenta de que era Nacho.

El boludo se reía y yo solo agarraba el toallón más fuerte para que no se caiga.

-¿Qué haces acá? -pregunto nerviosa.

-Necesitaba verte y Cielo me dijo que ibas a estar acá -contesta mientras se acerca más a mí.

-Te pedí que me dieras un tiempo, Ignacio -digo intentando que parezca que estoy enojada pero, sinceramente, en el fondo esperaba que me busque.

-Es que ya esperé demasiado para estar con vos. No te puedo dar un segundo más, Marianella.

Seguidamente ninguno de los dos dice nada más porque nuestros labios unidos sellan todas aquellas palabras que queremos decir.

No es necesario hablar cuando nos entendemos tan bien así, simplemente con miradas o toques me tiene más enamorada que nunca.

Doy el primer paso y hago que retroceda hasta la cama matrimonial de la habitación pero él corta el beso y pone una mano entre los dos.

-¿Y Pezzella? -pregunta, está celoso y se le nota hasta en las cejas.

-Los dos sabíamos muy bien desde el principio que eso no iba a durar, lo va a entender -digo para seguir con lo nuestro.

Ya estoy cansada de no poder ser feliz, y si él me hace feliz ya nada nos va a impedir que estemos juntos.

○●○

En la mañana, al despertar, me levanté con cuidado de no despertar al delantero. Antes de volver a mis origenes tenía que arreglar algunos detalles.

Me vuelvo a Italia para aclarar bien las cosas con Germán y después puede que me vaya para Arabia, si es que me da el bolsillo.

-¿Te vas? -escucho que dice Nacho medio dormido todavía.

-Me vas a ver en menos de lo que esperas, te lo juro -digo y le doy un pico.

Y me voy lo más rápido que puedo antes de que el 32 interfiera en mis planes.

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asaa se la creyeron