Al cabo de unos minutos, Luke y yo ya estamos vestidos, por si acaso mis padres se presentan de golpe. Mi móvil vibra y me avisa de un mensaje nuevo:
Hola, Nikki. Jake me ha dicho que tengo que vestir de azul o turquesa. ¿No es adorable? Tenemos que ir de compra, ¡YA!
Sophy, xx.
Luke ríe al ver el mensaje de Sophia y me dice:
- O sea que es Sophia la chica misteriosa de Jake Jones. Interesante descubrimiento.
- ¿La chica misteriosa? – Pregunto sorprendida a la vez interesada.
- Si. Hace unos días, Jake nos dijo que iría al baile con una chica que le había robado el corazón con no sé qué paranoia. Y des de entonces, que los chicos y yo estamos intentando cual de las seiscientas chicas de la Universidad es su chica. – Me explica mientras se aguanta la risa.
- Pues la verdad, me alegro mucho por ellos. – Sonrío.
Segundos después, mi gran amiga rubia me envía un mensaje:
¡Nicole Jane Adams! Nos vamos de compras, ahora. Sal por la puerta de tu casa y sube al coche. Tienes cinco minutos.
PD: Bill ha apostado por el rojo. ;)
Caro, xoxo.
¿Están de broma, no? Luke rompe a carcajadas y de tanto hacer el idiota y reírse, cae al suelo. Luego me dicen que la patosa soy yo. Me río al verlo en el suelo y le digo:
- Ya has visto, ¿no? Tengo planes y tú deberes.
- ¿Quieres ser mi acompañante en el baile de invierno, Nicole? – Suelta de golpe.
- ¿Qué? – Pregunto como si no hubiera entendido la proposición.
- ¿Qué si quieres venir conmigo al baile? Sorda. – Dice riendo.
Me bajo de la cama muy delicadamente y me pongo encima de él. Uno nuestros labios en un tierno beso y digo:
- Encantada, Luke.
Sonríe y me besa de nuevo mientras me coge de la nuca para profundizarlo. El móvil vibra de nuevo y leo, des del suelo:
Tres minutos, Nikki.
Caro, xoxo.
¡Qué mujer! Me levanto del suelo y ayudo a Luke. Salimos de mi habitación y de la casa. Veo como mis tres amigos me saludan y me giro hacia Luke:
- Nos vemos mañana en clase o… - Pero no termino la oración y lo hace él.
- O por la noche mediante mensajes, ¿no, amor? – Me dice guiñándome un ojo.
- Si, cariño.
Me acerco más a él y le beso. Nos alejamos y yo entro en el coche de las preguntas.
ESTÁS LEYENDO
Entre la madurez y la rebeldía
Romance18 años sin movidas en mi vida. 18 años de tranquilidad y felicidad. 18 años sin chicos ni relaciones. Cumplo del 19 y todo esto cambia. ¿Pero qué pasa con estos hombres? Luke, Nash, Jake, Bill, Anthony y paro, porque a este ritmo llegamos a Navidad...