Entre la madurez y la rebeldía

Capitulo 15: Celos

HOLA HOLA! Que tal las lectuuras? jajaja Espero que la esteis disfrurandoo. Hoy sale AMNESIA DE 5SOS! sjdflcvjm MUERO

Laters, baby 

En ese momento pienso tierra trágame, pero como de costumbre no me traga. Ahora te jodes y bailas. Enfréntate a él. Levanto mi mirada y sonrío inocentemente. Luke me mira seriamente, sin una pizca de ilusión o diversión en sus ojos. Voy a hablar pero él me interrumpe, sin saber que yo lo iba hacer:

-          Nicole, ¿Por qué ese hombre te estaba cogiendo de la cintura?

-          Primero, es Anthony no ese hombre. Segundo, me ha ayudado a levantarme cosa que tú no has hecho cuando ha sido tu novia la que me ha tirado al suelo. Y tercero, me voy.

Suerte, que íbamos a firmar la pipa de la paz, que si no os matáis a ostias. No sé porque sigo escuchándote. Me doy la vuelta y salgo del comedor. Voy a salir del instituto cuando mi móvil recibe un mensaje:

De: Mamá                              Para: Nicole

Hola cariño, tu coche rojo está aparcado fuera del instituto. Espero que lleves las llaves encima, un beso.

Mamá

Las llaves. Espera. Han de estar en la mochila y esta está en la taquilla. Corro por todo el pasillo hasta mi casillero y lo abro. La mochila está y las llaves… también. Me acabo de librar de una larga y tediosa caminata. Salgo del instituto pero me paro al ver a Luke apoyado en mi coche a un par de metros. Lleva unas gafas de sol, que para que mentir, le quedan bien. Le dan un aire de chico rebelde y problemático. ¿Rebelde y problemático? Nikki, ¿tienes fiebre? Me acerco a él con pocas ganas de hablar, pero él parece no entender mi cara de pocos amigos:

-          Nikki, perdóname no quería ser así de frío contigo, pero los… - y se calla.

-          ¿Los que, Luke? – Intento que me lo diga.

-          Los celos. Me gustas y cuando he entrado a buscarte y te he visto entre sus brazos, la furia y los celos me han cegado por completo. Lo siento, no tendría que…

Lo interrumpo y lo beso. Me agarro a su cuello para profundizarlo y él me rodea la cintura con sus brazos. En mi vida, me había pasado algo parecido a esto pero ya os he comentado que al cumplir los 19 me llueven los hombres. Seguimos besándonos hasta que el aire se nos acaba y me separo con una tonta sonrisa. Lo miro a los ojos y sonreímos los dos. Idiotas. Sonreís como idiotas los dos. ¡Pero sois adorables juntos!