Aclaración antes de leer el capitulo antes de que se pregunten porque estoy chingando.
Las letras= Así Son pensamientos si esta corto si esta largo serán recuerdos en este caso serán recuerdos.
Sin más disfruten.
Hacia frío, sientía como mis extremidades se contraían por el miedo, ese día, mi padre salió desesperado buscando a mamá.
Me había dejado sola en casa, pero no me preocupaba estar sola, me daba miedo que le pasará algo a mi madre porque ella no pudo dejarnos a nosotros. Tal vez la secuestraron personas, los enemigos de papá.
Ella nunca iba a dejarme sola. Ella prometió siempre quedarse conmigo, no tenía porque irse, estabamos papá y yo. Eso debería ser suficiente.
- Ella se fue con otro hombre.- Escuché la voz de papá mientras se atormentaba así mismo y golpeaba la pared desesperado.
Habia vuelto hace horas atras desde que volvio empezó a beber sin parar.
- ¡Porque lo hiciste Lucrecia!.- otro grito desesperado no quería dejarlo solo así que dudando un poco baje.
- ¿Papá?.- Nunca desee tanto nunca haber bajado esas malditas escaleras.- ¿Mama vino a festejar mi cumpleaños?.- Esa sonrisa inocente, mis ojos esperanzados, mi joven cuerpo puro.
- Lucrecia..- Tenía que tener el mismo tono de voz que ella, su misma forma de hablar, caminar, comportarme.
Todo en mi gritaba a ella. Pero papá no se conformo con mirarme o confundirme, dió un trago a su botella. No sabía que era esa cosa la cual estaba bebiendo.
Recuerdo que mamá me habia dicho que esa cosa era mala, tambien me habia dicho que cuando tuviera 18 podría probar esa cosa. Aún tenía 15 años que estaba cumpliendo.
- Papi eso es malo para ti.- Me acerque a quitarle la botella, siempre tuve la mala costumbre, como no teníamos aún mucho dinero y papa a penas empezaba a trabajar tenía que usar las pijamas que ya no le quedaban a mamá.
- Lucrecia.- Su mirada deseosa recorrió mi cuerpo una y otra vez se levanto de manera dominante siempre asustaba esa mirada.
Nisiquiera sabia como mamá podía sostenerle la mirada sin temor alguno ese día lo aprendí.
- Papi..- sus labios se posaron en mi cuello succiono con fuerza mi blanca piel no sabia lo que estaba haciendo el y mamá jamás me hablaron de esto.- P-papi.
Un gemido ahogado salió de mis labios el seguía succionando mientras yo trataba de detenerlo, usos sus manos para someterme, parecía todo un experto y lo era.
- Lucrecia quedate quieta.- trate de resistirlo, pero fue tarde tomo todo de mi con ferocidad, aún recuerdo ese sonido que salía de mi boca.
- ¡Auxilio, mamá!.- Sonaba un golpe en la habitación.- ¡Ayuda!..- otro golpe y otra estocada.
- ¡Callate!.- y seguía atacando mas ferozmente, tal vez esa era su manera de expresar su dolor, pero me estaba lastimando y yo no quería ser lastimada.
- ¡Ya sueltame por favor!.- Lagrimas se deslizaban por mis mejillas, mis plegarias calladas por besos feroces, hambrientos, dolorosas estocadas.
- Callate, ahora eres mía, me haras caso en todo.- Nunca pense que esto pasaría asi pero no le importo y culpe al alcohol por ello.- Eres mia princesa.
Mamá siempre dijo que este momento sería magico, donde entregabas todo a la persona que amas más en el mundo, pero esto no era precisamente magico. Menos cuando sentí algo caliente en mi interior solo pude chillar con horror.
Mi mirada siempre estuvo en la puerta esperando que entrara, pero la primera igual como las otras veces ella no aparecio.
Y por más que lo pidiera a las estrellas jamás lo haria.
Desperté de golpe en un lugar oscuro, al menos para mi lo era, al enfocar más mi vista me di cuenta de la situación. Era un hospital.
Tenía que salir de ahí ahora mismo.
Busque mis pertenencias en el lugar necesitaba irme de inmediato no soportaba el olor a medicina otra cosa llego de la nada a mi mente un recuerdo fugas.Papa estaba sentado preocupado por mi, esta vez si me habia metido en problemas serios todo por querer aprender a patinar yo solo el hielo se habia roto y habia caido por suerte me salve.
Podía ver en sus ojos el amor que sentía por mi el mismo ser que me hacia daño. Pero así como el infierno tenía nombre en este caso el diablo tenia por nombre Lucrecia y el sufrimiento Maximiliano.
Que tal guys!..
¿Que les parecieron los recuerdos de Daen? Lamento si no actualizo rapido es que tengo que editarlo si no me gusta lo borro y así sucesivamente.
Además estoy en etapa de examenes pero ya voy a actualizar dare fechas, sabados o domingos si tengo mucha tarea los lunes.
Sin mas nos vemos en el siguiente capitulo.
- Mag♡.
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Stronger
Teen Fiction- ¿Quien dijo que las mujeres no pueden ser el "Chico malo"? Soy Daen Smirnov. Sí quieres saber más de mi tienes que averiguarlo.