Stronger

Capitulo 21.

Ahora mismo tenía esa misma  sensación de una persona cuando va cayendo hacia el vacío en una pesadilla mientras aún no puedes despertar y sabes que no es real pero de todas las maneras posibles te asusta porque jamás sabes perfectamente cuando vas a caer  y quedarás  estrellado, en el suelo.

A veces las personas sienten cosas por otras y es completamente normal pero en mi caso para nada que lo es. ¿Cómo te enamoras de alguien quien nisiquiera ha tocado tu piel?. 

Y el no tocaba mi piel pero tocaba mi alma y eso lo hacía especial, no le llamaría a esto amor, pero tal vez si cariño ya que  llevamos tiempo ya hablando, saliendo, jugando y hemos compartido muchas cosas más.

Hoy el viento era frío por invierno, así que tenía que llevarme algo abrigado sin verme tan mal. A todo esto Tiffany ya no molesta mucho, siento que algo se trae entre manos pero bueno así son las cosas. Es otro día normal.

— Buenos días, Dan como has estado. - vamos toma asiento, Mateo palmeo el asiento a su lado el asiento que Tiffany ocupaba a diario. Si él me había pedido eso significa sola una cosa o tal vez dos. La primera era que Tiffany estaba durmiendo y yo me levante antes o la segunda que también era lo más probable.

Ella no había dormido aquí.

— Daen, ¿Estas bien?. - Me miraba con cierta preocupación, pero de forma sutil intentando que yo no lo notará.

— Estoy bien, calma.- suspiré y me senté a desayunar en un silencio incómodo Mateo siempre hablaba con su hija de su vida y quería hacer lo mismo conmigo pero no se podía.

Sentía como quería preguntar a cada bocado que entraba en mi boca, a la pausa donde vas del desayuno al café o al jugo. Podía sentirlo entonces le hablé.

— ¿Qué quieres?.- Lo miré tomando de mi taza llena de café caliente.- Anda solo dime.

— ¿Cómo te sientes? Eso quiero saber. - Suspiró un poco y luego me miro a los ojos.- ¿Sabias que tienes pesadillas?.

¿Pesadillas?, Claro que tenía pesadillas pero sólo hay pocas veces que recuerdo que pasan en ellas así que las anotó las demás son como pequeñas manchas en mi memoria y no puedo recordar. Pero tenía que negarme  delante de él y como a mi no me importa en lo más mínimo ser grosera.

— No.- Corte de un tajo y seguí comiendo.- ¿Porqué preguntas algo tan tonto?.

— Porque es verdad gritas y te quejas.- Me miró fijamente.- He notado que te haces daño dormida varias veces a pasado, más en estas fecha.

— Bueno en realidad no se de que me estas hablando.- Tuve que mentir.- porqué estoy dormida cuando pasa usualmente no se que estoy soñando.

— Bueno siento que como se acerca la fecha del accidente tu sabes.- Genial tenía que recordármelo.- Posiblemente eso tenga que ver con el que tengas pesadillas haré que un psicólogo te revise.

¿Acaba de decir lo que creo que acabo de oír? 

— No voy a ir a ningún lado para ser examinada y metida en una jaula como un animal no soy un criminal soy una persona.- Tuve que golpear la mesa estaba indignada.- No estoy loca ni mucho menos.

No iba a ir a ese hospital lleno de gente rara  que se ríe y se golpea sola y que me encierren ¡Jamás! No voy a dejar que nadie me encierre nunca.

— Es por tu bien si te revisa te dará algo para que puedas dormir mejor.- Tuve que interrumpir.

— No.. No voy a ir a un doctor para que me tenga como ratón de laboratorio me haga análisis y me meta al hospital psiquiátrico más cercano.- Lo mire fijamente.- No es no entendido y punto.

Entonces el timbre sonó y salí disparada a atender a pesar de que la señora de limpieza había abierto yo solo me limite a observar el paquete del cartero y una nota que traía pegada.

— ¿Evan me trajo flores? Y son ¿mis favoritas?. - No recordaba haberle dicho a Evan mis flores favoritas pero traía mi nombre la targeta de la caja misteriosa y el ramo.- ya te firmó.

Firme de recibido y ahora sonreía de vuelta era emocionante quien se había tomado la molestia de la darme flores y tres notas una en un sobre tan perfectamente decorado, junto con mis flores preferidas y una caja con una sorpresa.

Este era un día fantástico, sin duda había mejorado lo que Mateo había arruinado.

— Siento mucho decirte lo del médico yo creo que podría compensar algo de.- Negué mire a todos lados y lo abrace.

— Yo lo resuelvo gracias.- Me separe y subí con la caja y las notas arriba.- Ojala lo entiendas!.

Me encerré nerviosa a mirar que había adentro. Porque era una sorpresa una hermosa sorpresa me había comprado ropa de mi estilo aunque era un vestido era yo la que se veía ahí adentro, tenia unas botas de invierno y con un abrigo se vería precioso. 

Leí las notas pero me quedé confundida, primera vez que me sentía de esta forma y las notas decían cosas tan raras. Y aunque eso no fue alarmante para mi; la última nota si que lo fue.

"Estas lista para lo que se viene, los demonios del pasado van a alcanzarte y con ello surgirán unos nuevos. Cariño, ¿Estás realmente preparada para la verdad?."

Entonces fue donde empecé a preocuparme porque si la persona que había mandado eso conocía lo que hacía todo se vendría abajo.

" Usa esto el día de la verdad, nuestra cita es el 29 después de las 6 de la tarde"

Estos son grabes problemas, tendré que solucionarlos tendré que asistir a esa cita. Ahora estaba realmente en problemas.