Fake Boyfriend

Tres

Los días pasaron con naturalidad para la "pareja", por lo menos Tyrone ya no se incomodaba o se ponía nervioso con cada pequeña acción de Phill, se acostumbró rápidamente.

Como se había vuelto algo rutinario, el castaño bajó del auto acompañado del pelirrojo, atrajeron más de una mirada pero eso ya era común para ellos, principalmente para el menor.

-Te llevaré a tu clase.

Phill cargó la mochila del más bajo y lo tomó de la mano, entrelazando sus dedos. Tyrone se ruborizó un poco mientras asentía con la mirada baja, si el mayor estaba haciendo eso significaba que su ex o alguno de sus amigos los miraban. 

Lastimosamente, por llevar la mirada en el suelo y no mirar con atención a su alrededor, no pudo percatarse de que en realidad su suposición era incorrecta, nadie con esa "importancia" los miraba.

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-¿Sabes que fecha es mañana?

Phill se encontraba en su clase de ciencias física, resolviendo algunos ejercicios de una manera concentrada, hasta que la voz de su amigo lo sacó de su pequeña burbuja.

-No me hables, estoy ocupado. ¿Acaso no ves?

-Mañana es catorce de Febrero.

-Felicidades, ¿Te hago fiesta o que?

-¿No estabas saliendo con uno de primer año? Se supone que mañana es una fecha donde se regala algo a la pareja o amigos. Dios, ¿Cómo es que no sabes algo tan simple?

Antes de poder responder algo, el par fue repentinamente silenciado por el profesor. Ya que con su conversación había llamado la atención de más de uno.

El pelirrojo intentó seguir con su trabajo, sin embargo se le dificultó mucho más concentrarse ya que las palabras del contrario resonaban en su cabeza. Nunca se había preocupado por cosas como esa y no sabía que regalarle al castaño, claramente debía ser algo especial. 

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Durante todo el camino a casa, Tyrone pudo notar a Phill más irritado de lo normal. Pudo darse cuenta ya que si preguntaba algo o sacaba tema de conversación el mayor respondía o intentaba seguir el hilo incluso si eran respuestas muy cortas, pero en ese momento se limitaba a cosas aún más vagas.

-¿Crees que debería unirme al equipo de básquet?

-No lo sé.

El menor suspiró y decidió guardar silencio el resto del camino, no le hallaba sentido a esa "conversación". Se sintió aliviado y libre de cualquier tensión al notar como el coche se detenía frente a su casa.

-Hasta mañana.

-Nos vemos.

Tyrone bajó del auto y sin mirar atrás o despedirse del chofer, entró a su casa y arrojó la mochila al primer sofá que vio en su sala y sin más, se dejó caer en el sofá junto a ella.

-Siempre parece de mal humor, pero no es tan estresante como en un inicio.

Cerró por un momento los ojos, sin embargo no contaba con quedarse dormido en menos de cinco minutos.

Al abrir los ojos, se encontraba en exactamente la misma posición. Sacó su móvil del bolsillo y lo revisó, apenas había pasado una hora y media. 

Cuando miró la hora pudo percatarse de la fecha; trece de Febrero. Mierda, no había prestado atención y no tenía nada preparado para el pelirrojo.

Un par de horas después, se encontraba en un centro comercial mirando todo con atención. Gracias a que era un día antes todo estaba al doble o triple de su precio original. Chocolates, rosas, peluches.

Trataba de imaginar a Phill sosteniendo algunos de esos regalos y simplemente no podía hacerlo correctamente, lo imaginaba agradeciendo con una expresión de asco o desprecio y obviamente esa no era la reacción que esperaba.

Sus ojos finalmente brillaron después de varios recorridos, había visto el regalo perfecto.

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A la mañana siguiente, Tyrone se encontraba camino a la escuela con una caja algo pequeña en las manos, la noche anterior le había escrito al mayor para que no fuera a buscarlo, quería guardar la sorpresita hasta entregarla en la escuela frente a los demás. No era fan de dar "espectáculos" pero ese día iba a dar uno pequeño.

Al llegar, miró al pelirrojo esperando en la entrada con lo que a simple vista parecía un ramo de rosas en una de sus manos. No pudo evitar ruborizarse un poco, no solía recibir esa clase de regalos "delicados".

Mientras más se acercaba podía apreciar mejor como más de una persona lo miraba con atención, algunas mas descaradas que otras.

-Buen día, Phill.

Como era costumbre, respondió al saludo asintiendo con la cabeza.

-Aquí.

El castaño tomó el ramo en cuanto el de ojos carmín se lo ofreció, al mismo tiempo le extendió la pequeña caja que había preparado el día anterior. Pudo apreciar como las manos del mayor tenían pequeñas marcas de quemaduras, eran recientes.

-Gracias, Tyrone.

Mientras sostenía la caja con la mano izquierda, con su mano derecha tomó la mano izquierda del menor y entrelazó sus dedos, acto seguido llevó la mano del menor a sus labios y besó suavemente sus nudillos provocando un enorme rubor en las mejillas del contrario.

Al no escuchar ninguna otra palabra suya, comenzó a caminar dentro de la escuela siendo seguido por el menor.

Mientras caminaban, Tyrone pudo apreciar mejor las rosas. Eran artificiales, parecían ser algún tipo de dulce ya que los pétalos y tallos venían cubiertos con papel aluminio de color rojo y verde respectivamente. Se sorprendió ya que a simple vista parecían naturales si se ignoraban los colores brillantes.

-¿Dónde conseguiste esto? Las rosas de dulce suelen ser menos detalladas, estas incluso tienen espinas.

-Costco.

-¿Venden algo así en un Costco? He ido varias veces y nunca las he visto.

-Algo por el estilo, dejémoslo como un secreto.