Capítulo 10.

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La cocina comedor estaba sumergida en un extraño silencio.

Nadie parecía querer romperlo y es que todos estaban bien absortos en sus pensamientos.

Gemma pensaba en una forma de ayudar a  Harry para que él y  Louis acabarán juntos. Louis pensaba en sus confundidos sentimientos sobre Harry, mientras intentaba averiguar de donde iba a sacar el valor para enfrentarse a todos los que aterrorizaban a menudo al pobre chico.

Él siempre había sido un cobarde y era un tanto imposible cambiar de un día  a otro, pero sabía que tenía que hacerlo, se lo debía al verdadero Harry.

Este, por su lado, era consciente del silencio, pero no se atrevía a romperlo, quería saber  quien era el chico de ojos verdes, por que, Dios; era como una especie de semidios y no sabía su nombre, además  parecía tener todas sus intenciónes de quedarse, aún así, no quería hablar, por que si lo hacía, Louis le miraría y no sabía por que, eso le hacía sonrojarse, pensar en que Louis lo miraría le hacía comportarse como un niño. Jota, pensaba en Gemma y básicamente en todo, el mundo humano no era muy nuevo para él, pero lo era, después de todo, ¿Cómo llegaría a ser realmente persona? ¿A figurar  como tal?

En todo esto, pensaban los cuatro comensales de aquella cena silenciosa.

Gemma.

Iba a matar a esos dos, en serio, lo iba a hacer. Harry estaba sentado en frente de Louis y no dejaba de mirar hacia su trozo de pizza, en cambio Louis lo miraba fijamente y bajaba la vista, así sucesivamente, queria alguien me matara, ¿Acaso era eso una telenovela?

Aquel silencio me estaba matando, yo odiaba los silencios incómodos y aquel, lo era.

-¿Jajá, esta buena la pizza?.-Dije desesperada por romper el maldito silencio. Jajá me miró, me sonrió y asintió. Dios, esa sonrisa, me estaba matando. <<¡GEMMA STOP!  coño,tienes novio, ¿¡Quieres dejar de pensar en cosas raras?!>> La verdad era que querer comerme a ese chico no era nada raro,puede parecer superficial, pero, no eran esos ojos verdes color oscuro tan deseables los que me hacían enloquecer, era esa sonrisa, tan bella, tan inocente, tan sincera. En ese momento, Harry se atragantó mientras bebía y nos miró con los ojos abiertos.

Ups, mierda, la había cagado.

Harry.

Casi me muero por culpa de Gemma y del agua, abrí los ojos  como platos ¿QUE QUEEE? ¿Había escuchado Jajá o era mi imaginación?

En ese momento tuve miedo de ese chico, Jajá era el peluche de mi hermana, y ese chico, había aparecido de la nada, sólo llevaba unos pantalones, que obvio eran míos y sabía mi nombre aún que yo no lo conocía a él.

Lo entendí todo en ese mismo momento.

Deje de comer, me levanté de mi silla  y corrí hacia mi cuarto. Me acosté en mi cama,

sentía nauseas, y escalofríos sin sentidos, me cubrí con la manta y espere a que mi cabeza asimilara todo aquello.

Mi hermana había dado vida a un peluche, mi madre consegía el viaje anelado...

¿Nosotros provocamos todo eso en un pasado?

Que ese chico estuviera en mi casa no me aterrorizada tanto como pensar que todo lo deseado,podría hacerse realidad.

Por que yo no recordaba todo lo que había deseado y sólo tenía diez años, podría pasar algo horrible en cualquier momento y podría ser mi culpa.

Estaba atemorizado.

Louis.

Y entonces me di cuenta.

Mi peluche. (Larry Stylinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora