CAPITULO 9

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No se cuanto tiempo pase semi-sentada en el pizo duro y frio de la ducha, para cuando abri los ojos el agua ya no salia caliente, torpemente me endereze y me dispuse a terminar de hacearme. Trate de terminar lo mas rapido posible pues ya habia desperdiciado demasiada agua, estaba por terminar cuando escuche un par de golpes a la puerta...

-Mina, estas ahi?- era mi papa- te traje ropa limpia entrare a dejartela junto con toallas- no conteste solo espere a que entrara y cerre la ducha- date prisa el medico ya esta aqui para examinarte.

En cuanto escuche que cerro la puerta corri la cortina y sali, pude ver lo que me trajo, una playera negra, pantalones negros con demasiadas bolsas para mi gusto, ropa interior limpia y... toallitas femeninas. Gracias papa.

Al salir completamente vestida, en la habitacion estaba mi padre sentado en la camilla sin camisa y una mujer frente a el comiendoselo con la vista, bueno ok no, lo estaba curando, tenia un par de raspones, moretones y uno que otro golpe, nada grave a mi parecer. Ella terminaba de vendarle el torso, se percato de mi precensia y de inmediato le dijo a la mujer que ya era suficiente. Se bajo de la camilla y me levanto en peso para subirme a ella, me recordo a mi infancia cuando lo hacia para subirme a algun lugar en el que yo no alcanzara, inmediatamete se hizo a un lado para que la mujer se acercara. Ni tarda ni perezosa se dispuso a levantarme el dobladillo de la playera, pero la detuve en el acto...

-Mina, permite que la señorita te examine y cure, necesitamos valorar que tan graves son los daños en tu cuerpo...

-Noo!!!, ya yo me he chequeado en el baño y no tengo absolutamente nada solo moretones- pfff! que les hacia pensar que queria estar semidesnuda frente a ellos, estan mal de su cabeza si creen por un momento que lo hare

-Cariño por favor no...- la puerta fue abierta interrumpiendo a mi padre, entro un hombre con una enorme sonrisa y traia puesta una batilla blanca, me observaba y no dejaba de lado esa espelusnante sonrisa de dientes perfectos, me incomodaba demasiado que lo hiciera.

-Aaaa!! que bien, veo que ya te estan rebizando- lo mire con el seño fruncido, y este , quien es??. Por alguna extraña razon se me hacia familiar...

-No doctor Thomas, ella no lo permite- le lance una mirada envenenada a la que supongo era una enfermera y ella solo me volteo los ojos y resoplo.

Por otro lado su apellido "Thomas", mi mejor amiga Darla se apellida asi, pero ella no tiene papa, lleva el apellido de su madre, sera acaso familiar de ella.

-Es solo que Mina a veces es muy timida Thomas- dijo mi padre en mi defensa- tal vez si salemos tu y yo por un momento para darle mas privasidad, ella deje que Mariam la examine- dijo encaminandose a la puerta, lo mire mal, aunque el no me vio, de ninguna manera iba a dejar que la tal Mariam me pusiera una mano encima.

-Bien, creo que les daremos un par de minutos, de todas formas necesito hablar contigo Alen

Ambos salieron de la habitacion, la mujer se giro hacia mi y se cruzo de brazos a la espera de que empezara a desnudarme, ja!!! pues que espere sentada... me cruce de brazos y voltee el rostro hacia a un lado.

-Mira... Nina, cierto?...

-Minaaaa!!!...- claro que lo hizo a proposito, solo para jorobarme la existencia

-Como sea!!!, mira mocosa no soy una persona muy pasciente, tampoco soy tu maldita enfermera asi que o me dejas revisarte por las buenas o lo hare por las malas...- arqueo una ceja como señal de victoria a la espera de que yo me doblegara y cediera a sus mandatos, mmh, pobre ilusa. Al ver que no me movia se hacerco un par de pasos tratando de intimidarme. Ni de chiste dejaria que ella me pusiera ni una sola mano encima, vamos a ver hasta donde llega su "inexsistente pasciencia"...-  asi que con que esas tenemos he?- dio la vuelta y se dirijio a una mesita, que no habia notado, tomo un frasco y una jeringuilla-  tendra que ser por las malas entonces nenita-  hooo noo... no se atrevera a hacerlo...

Lleno rapidamente la jeringuilla del contenido del frasco y creo empezar a sospechar cual es su contenido, pero esta chiflada si cree que me dejare inyectar, tal vez si debi haber accedido a que me chequearan de buena manera. De un momento a otro me tomo del brazo, empece a retorcerme como gusano para tratar de safarme de su agarre, me doblo el brazo hacia atras de una forma muy dolorosa...

-Ahora quietesita mocosa yo no queria hacer esto pero tu cabezoneria me ha obligado- pero que demonios... ella fue la que empezo a comportarse como una perra conmigo, yo solo respondi, como me trates te trato querida y obviamente que no permitire que me inyecte nada.

Tome inpulso hacia enfrente para regresar hacia atras y asi poder propinarle un cabezaso, gracias clases de defensa...

-Agggrr!!! maldita mocosa me rompiste el labio- chillo mientras se cubria la boca

-Que lastima falle, lo que queria era romperte esa fea nariz de tucan- se descubrio y pude ver como le salia sangre del labio inferior, se lo merece por tratar de mangonearme.

Me mira con una muy evidente furia y yo con una sonrisa socarrona..

PROYECTO MINADonde viven las historias. Descúbrelo ahora