capítulo 7

67 6 2
                                    

Bella's pov

12:00 am del día siguiente

Despierta, que ya ha amanecido hace un buen rato.— Siento como alguien me zarandea con fuerza.

Abro los ojos. Taylor está al lado mío, todavía con el pijama puesto. Me doy la vuelta.

Pienso quedarme aquí hasta las 10:00 de la noche.— Respondo.

Taylor ríe.

Veo que aún sigues borracha. Tengo comida familiar en unas horas así que esa opción no es viable. Lo siento pequeña.— Dice, revolviéndome el pelo.

Suspiro y me incorporo.

Iré a hacer el desayuno, ¿te apetecen cereales? Ayudan a reducir los efectos de la resaca.— Sonríe

Yo asiento.
Tras comprobar que Taylor está en la cocina, empiezo a darle vueltas a lo que vi anoche. No me puedo quitar la imagen de esa chica besando a Harry. También me acuerdo de verles subir al piso de arriba. Dios sabe lo que pasó en esa habitación porque desde luego que yo no quiero saberlo. También recuerdo algunos fragmentos de mi conversación con él anoche. Recuerdo que me dijo por qué se había peleado con Niall, pero la verdad es que ya no me acuerdo del motivo principal de la pelea. Suena demasiado contradictorio, pero es lo que hace el alcohol.
Lo último que tengo en la memoria antes de verle con esa rubia de bote soy yo, saliendo de la habitación tras decirle que me deje en paz. ¿Por qué mierdas le diría eso?
Tantos interrogantes y espacios en blanco me están volviendo loca, por lo que decido ir a la cocina con Taylor para distraerme un poco.

Al llegar ya está sirviendo los cereales en leche fría, como a mi me gusta. También ha llenado la mesa con zumo de naranja, galletas y un bizcocho. No me doy cuenta del hambre que tengo hasta que me siento en la mesa con toda esa comida delante. 

Empiezo a comer, con Taylor empezando a hacer lo mismo en frente de mi.

¿Recuerdas algo de anoche?— Me pregunta.

Algunas cosas, pero se me ha olvidado la mayor parte, ¿por qué?— Pregunto, llevándome una galleta a la boca.

Ayer viniste muy enfadada. No parabas de decir que no podías creer que Harry hubiese besado a una tía delante de ti. Ah, y que le darías su merecido en el ring hoy.— Responde.

Abro los ojos. No me acuerdo de nada de eso. Al ver que no respondo, Taylor continua hablando.

¿Hay algo que no sepa Bella? Sabes que puedes contarme lo que sea.— Dice, dejando su taza en la mesa.

Niego con la cabeza.

Harry y yo hemos tenido varios encuentros, amistosos más o menos. Primero vino a la cafetería y me preguntó si era la novia de Niall. Después, cuando le di la patada en los huevos, me llamó mocosa y me dijo que me alejase de él. Y para terminar me le encontré ayer en la fiesta. Recuerdo que estuvimos hablando en una de las habitaciones de arriba pero la mitad de la conversación se ha borrado de mi mente. El último recuerdo que tengo es de él besándose con una tía rubia — hago una pausa para quitarme una lagrima que me resbalaba por la mejilla. No sé en que momento había empezado a llorar — Taylor de verdad que no sé que me pasa. Desde que conozco a Harry no estoy centrada en nada, no paro de pensar en cuando me le volveré a encontrar o si le veré alguna vez más. Sé que no me conviene y que tiene mala fama, pero la verdad es que siento algo por él que no había sentido por nadie más.

Tras mi confesión, Taylor está procesando mis palabras. Ella no tenía ni idea de nada, así que debe de ser difícil asimilar tanta información de golpe.

La verdad es que no sé que decirte Bella...como amiga tuya te digo que Harry no es bueno para nadie, su vida está rodeada de violencia y de drogas por lo que no me gustaría verte perjudicada por ello. Además lo que ha hecho no ha estado nada bien. Está en todo su derecho pero aún así podía haber tenido un poco más de cuidado con sus acciones. Tomes la decisión que tomes, yo te apoyaré, pero también quiero que sepas mi punto de vista. — Taylor habla del tirón.

Decido no comentar nada más sobre el tema.

Estamos ordenando un poco la casa antes de que los familiares de Taylor lleguen. Cuando terminamos, mi amiga se gira hacia mi.

Bella, sabes que te adoro, pero ahora de verdad que necesito que me abandones, estarán a punto
de llegar. —

Asiento mientras me río ante la elección de sus palabras para echarme de su casa.

Te veo mañana. — Le doy un beso en la mejilla.

Estoy saliendo por la puerta principal cuando Taylor me llama. Me giro.

Piensa sobre lo que te he dicho.—
Dice, desde las escaleras.

Asiento con una pequeña sonrisa, antes de cerrar la puerta.

Hace cuatro horas que estoy en casa. Desde entonces he hecho algunos trabajos y he estudiado para algunos examenes que tengo la semana que viene.
Me dispongo a ver una película para descansar un poco cuando recibo un mensaje. Es de mi profesor de matemáticas, va dirigido para toda la clase.

Hoy es el último día para entregar el trabajo de la teoría del caos. Os recuerdo que es un 40% de la nota. El instituto cierra a las 8 de la tarde. Yo no estaré pero me lo podéis dejar en el departamento.

El trabajo. Mierda.

Lo quería haber entregado ayer pero la verdad es que se me olvidó. Lo bueno es que lo tengo parcialmente acabado, solo me falta la conclusión.

Una vez terminado el trabajo, me puse unos pantalones pitillo con unas adidas negras y un jersey granate con el cuello en forma de v. Le dejo una nota a mi hermano (el cual está trabajando) informándole sobre la situación. Después, cojo las llaves de casa y salgo, camino al instituto.

Buenas tardes. Quiero entregarle este trabajo al señor Frederic. Nos ha dicho que lo podemos dejar en el departamento de matemáticas. — Digo, nada más llegar a recepción.

La mujer me mira a través de sus gafas cuadradas.

Está bien. Ahora mismo se lo dejo en su mesa. — Responde, fingiendo una sonrisa.

Genial, muchísimas gracias. —

Le entrego el sobre con mi trabajo, poniendo una gran sonrisa en mi rostro. Ella lo coje y se va por el pasillo que conduce al departamento de matemáticas.
Por mi parte, me doy la vuelta, dispuesta a irme a casa a descansar antes de volver a clase mañana, cuando alguien se cruza en mi camino.

Bella? Te he estado buscando por todas partes. —

Antes de poder darme cuenta, tengo a Niall rodeandome con sus brazos en un fuerte abrazo.





boxingDonde viven las historias. Descúbrelo ahora