Show me • [ P.JM ]

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La cena con Jimin transcurrió de manera tranquila y agradable. Hablamos de cosas triviales y hacíamos uno que otro comentario respecto a nuestras vidas personales y me di cuenta que es más agradable de lo que me había parecido aquella primera vez que nos vimos.

Su compañía me resulto más que agradable y aunque había muchas cosas que me daban curiosidad respecto a su persona había algo que seguía dándome vueltas en la cabeza y es el pensamiento de lo que pudo haber sucedido con la madre de los pequeños. Sabía que no era un tema que se pudiera hablar con cualquiera así que me mordí la lengua muchas veces antes de preguntar.

–muchas gracias por la cena, Jimin–comenté mientras lo ayudaba a limpiar la mesa después de que el retirara los platos–no sabía que pudieras cocinar tan bien–admití observando cómo una sonrisa se formaba en su rostro haciendo aún mas encantador y de cualquier manera los rasgos de Jimin eran bastante cautivadores.

–¿la opinión que tenías sobre el Bulgogi cambio?–preguntó girando en mi dirección y poyando su espalda baja en el sink–Porque si es así logre lo que pretendía sin demasiado esfuerzo–lo decía en broma pero podía notar cierta curiosidad detrás de aquel tono de voz

–no te mentiré, realmente estaba delicioso

–Te dije que la receta familiar te iba hacer cambiar de opinión–se escuchaba orgulloso de su logro–aunque tengo más trucos bajo la manga

–Me gustaría saberlos–dije sin pensar provocando que mis mejillas se calentaran un poco–me vendrían bien a la hora de cocinar

–En ese caso tendrías que quedarte a cenar más seguido. Dime cuándo y me tendrás como chef personal

Aquella propuesta era tentadora.

–No suena mal–miré el reloj que estaba sobre la pared detrás de él y me alarmé un poco al ver la hora. Era casi media noche, sin duda el tiempo se va volando cuando se comparte con Jimin–me tengo que ir, es tarde.

–Si quieres te llevo a tu casa–ofreció enderezando su cuerpo con intención de salir de la cocina

–No gracias, tengo mi auto y no podría dejarlo aquí, mañana no tendría como venir –aclaré retrocediendo sin ser capaz de darle la espalda, no cuando se había comenzado a subir las mangas de su playera– Me encantó la cena y te agradezco mucho

–No hay de que. Es agradable pasar tiempo contigo–comenzó a caminar en mi dirección–al menos déjame acompañarte a tu auto

Asentí y salí de la cocina con el pisándome los talones. Fui a la sala para tomar mi bolsa que descansaba en uno de los sofás. Junto cuando la acomodé sobre mi hombro mi celular comenzó a sonar. Me preocupe un poco al ver el número de mi hermana así que respondí rápidamente, no era muy común que ella me hablara. Normalmente me enviaba mensajes.

–¿qué sucede?–Fue lo primero que dije

-–¿en dónde estás?

–En casa de Jimin. Me quede a cenar–escuché como mi hermana suspiró profundamente, se estaba preparando para hacerme una cantidad impresionante de preguntas, pero la detuve antes de que comenzara con el interrogatorio–luego te explico

–Bueno–respondió resignada– te hablaba para decirte que no vayas a casa–su tono de voz cambio rápidamente a uno más serio y algo preocupada

–¿por qué? ¿dónde estas?–dije algo alarmada y deteniéndome frente a la puerta antes de salir de la casa y esto llamó la atención de Jimin quien se detuvo a mi lado

–Estoy con Namjoon y bueno no puedes regresar porque Jacob está fuera del departamento y al parecer está borracho o eso me dijo nuestra vecina. No le entendí muy bien, pero fue clara en expresar su preocupación y molestia por el ruidoso de tu ex

Tomé aire y trate de contar hasta diez para tranquilizar los latidos de mi corazón.

Se supone que el tema de mi ex novio ya no me resultaría tan doloroso, pero en ese momento me di cuenta que no era del todo así.

Jacob nunca había sido alguien imprudente o agresivo, no mientras estuviera sobrio, esa fue una de las razones por las cuales cuando el me pidió que me fuera a vivir con él me negué. No estaba segura de querer estar con alguien que se volvía completamente diferente, para mal, con algunas copas de más, pero fuera de eso él era un hombre tranquilo, aunque eso no fue suficiente. Cuando estaba ebrio elevaba demasiado la voz y llegó un punto en el que tenía miedo de estar frente de él porque cualquier cosa le molestaba y lo creía capaz de hacer lo que fuera con tal de calmar su enojo.

–la vecina dijo que estaba como loco tocando a la puerta y llamándote pero que eso comenzó a molestar a los demás y están pensando en llamar a la policía, así que si tienes un poco de sentido común quédate donde estas– ME dijo mi hermana con autoridad

–No me puedo quedar aquí –susurré para que Jimin no me escuchara–Y no te preocupes, me iré a algún hotel. No pienso volver ahí.

–Mientras no regreses a casa todo está bien. También te podrías venir conmigo y con Namjoon–Comentó emocionada

–No gracias–respondí rápidamente–no se qué cosas harán estando solos y no me interesa saberlo aunque me doy muchas pistas al respecto con todo lo que me cuentas. Te enviaré mensaje cuando llegue al hotel–le asegure antes de terminar la llamada

Suspire y guarde el teléfono en mi bolsa, estire la mano y la coloque sobre el picaporte.

–¿Por qué Irás a un hotel?–pregunto Jimin al mismo tiempo que colocaba su mano sobre la puerta evitando que la abriera

–Bueno...–no estaba muy segura de contarle lo que estaba ocurriendo, sobre todo porque habíamos pasado una bonita noche, pero la preocupación que reflejaban sus ojos me convenció–digamos qué hay algunos problemas en mi departamento así que tendré que quedarme en otra parte. Me es difícil regresar ahí esta noche

–No es necesario que hagas eso. Te puedes quedar aquí, hay una habitación extra–me ofreció con tranquilidad

–No quiero molestarte, solo es por una noche y...

–Por eso mismo, solo es una noche así que no tendrías por qué gastar tu dinero y no veo el problema en que te quedes aquí. Si no te sientes segura te puedo dar las llaves de la habitación para asegurarte de que nadie entrara–Ofreció Jimin con total honestidad

–No desconfío de ti–le asegure–es solo que no quiero molestar

–No lo haces, créeme. Cuidas a mis hijos, es lo menos que podría hacer por ti así que vamos, te mostraré donde está la habitación–comenzó a caminar hacia las escaleras. Estaba un poco sorprendida por su amabilidad pero rápidamente me recuperé y lo seguí

–La habitación de invitados está al final de pasillo–me indico cuando llegamos al segundo piso–yo me quedaré despierto un poco más, tengo que revisar unos cuantos casos antes de irme a dormir si necesitas algo dime, estaré en la sala

–Muchas gracias– agradecí con una sonrisa que el me devolvió

–Descansa–Dio media vuelta para bajar las escaleras con una fluides que endivia al verlo bajar los escalones de dos en dos.

[...]

Cuando entré a la habitación un olor a vainilla fue lo primero que noté.
El cuarto estaba en perfecto estado, limpio y la cama estaba perfectamente hecha, parecía que no la usaban mucho ya que había un poco de polvo sobre la lámpara de noche, en ese momento me sentía más que agradecida con Jimin por haberme dejado quedar  aquí. La cama se veía muy cómoda y no pude evitar dejarme caer en ella, esa habitación era más grande que la de mi departamento.

No tarde mucho en quedarme dormida sobre aquella suave superficie.

•••

ya quisiera yo que Jimin me invitara a dormir en su casa.

Espero que tengan un lindo día y gracias por leer.
❤️