Una Gran Genio (Terminada)

El día acabó mal

Nar. Peter

Hoy me he levantado corriendo, cosa que nunca hago cuando voy con tiempo. Pero es que hay una novedad que la tía May no sabe todavía... ¡¡¡QUE TENGO UNA AMIGA!!! Estoy muy contento, nunca supuse que Keith fuera una nerd; aunque por fuera pareciera una chica popular, por dentro es muy lista y friki, como yo. Me vestí con lo primero que cogí y me lavé la cara. Salí de mi habitación y me senté en la mesa del comedor, a lo que la tía May se sobresaltó.
- ¿Qué haces tan pronto despierto? ¿Y vestido?-
- No sé, hoy tenía ganas de madrugar.-
- Eso nunca lo has hecho y no pensé que empezarías ahora, oye, ¿por qué nunca te peinas? Siempre vas lleno de enredos.-
Se acerca a mí y empieza a pasar sus dedos por mi cabello, desenredándolo un poco. Aparto la cabeza despacio y sonriente, siempre me hace lo mismo.
- Hoy sonríes mucho, y ayer después de clase también. ¿Qué ha pasado?-
- Nada...-
- Oh, Pitt, no me digas que es una chica...-
Sonríe pícara y se sienta a mi lado, esperando que le de detalles.
- Bueno, puede ser.-
Noto que empiezo a enrojecer y la tía May se acerca más a mí, indicando que quiere que le cuente.
- Ayer llegó una chica nueva a clase, y...-
- ¿Y?-
- Pues, es una nerd, como yo y nos hemos hecho amigos, eso es todo...-
- AAAAAAYYYY, NO ME PUEDO CREER QUE MI PETTE HAYA HECHO UNA AMIGUITAAAAA.-
Empieza a gritar como loca y a dar vueltas alrededor de la mesa. Yo río y la digo que pare, porque me iba a dar un ataque. Por fin se queda quieta y se sienta a mi lado otra vez. Mientras desayuno empieza hacerme preguntas.
- ¿Cómo se llama? ¿Tiene tu edad? ¿Cómo es? ¿Es guapa? Seguro que es lista... ¿Le has preguntado por su superhéroe favorito? ¿Dónde se sienta en clase?...-
Y así se tiró hasta que salí por la puerta. Salí fuera y me subí al autobús, que acababa de llegar.

Al llegar a clase vi que Keith ya había llegado, y estaba hablando con la profesora que nos tocaba ahora. Llevaba una coleta alta que hacía que su pelo ondulado botara a cada movimiento que hiciera, sus gafas brillaban con la luz de los fluorescentes y bajo ellas estaban sus grandes ojos verdes. Sus pecas marrones adornaban su cara y no le hacía falta maquillaje para estar bonita. Su ropa era moderna y un poco hipster.
Dejé mi mochila en mi sitio y fui hacia ella.

Nar. Keith

Hoy me he levantado feliz. Nunca pensé que en mi primer día de clase en un nuevo colegio haría un amigo.
Me levanté sin hacer caso de los gritos de mi madre y me preparé. Me puse mi ropa hipster, que tanto me gustaba, me lavé y me hice una coleta alta. Me miré en el espejo y me vi estupenda. No necesitaba un kilo de maquillaje para estar guapa, como algunas chicas.
Bajé al piso de abajo, cogí una magdalena y me fui corriendo. Odiaba entrar en la cocina, era el peor sitio para estar de toda la casa y cuanto más tiempo pasara fuera de allí, mejor. Mejor dicho, prefiero no estar en casa en todo el día, lo odio, allí me siento oprimida.
Me fui en mi skate a clase y cuando llegué me presenté a mi nueva profesora.
Mientras hablaba con ella de cualquier cosa, de repente alguien me tapa los ojos con las manos y lo último que veo es la cara de la profesora riéndose y mirando a alguien detrás de mí.
- ¿Quién soy?-
Dice la persona poniendo una voz falsa. Yo sabía perfectamente quién era. El único que me conocía allí, y que iba a mi clase.
- No tengo ni idea.-
Digo con un sarcasmo notable.
- Te doy una pista, es con quien estás haciendo unas botas geniales que podrán volar...-
- Vale... creo que es... ¿Mi amigo y vecino Pitt?-
Me quita las manos de los ojos y me giro. Estaba sonriente, se le notaba muy feliz.
- ¿Cómo lo has sabido?-
- Intuición.-
Nos reímos mientras vamos a nuestro sitio y nos sentamos, ya que iba a empezar la clase.

Tras un par de clases, tocaba descanso. Fuimos lo dos a la cafetería y tras coger nuestros almuerzos nos sentamos en una mesa que estaba vacía. Nos pusimos a hablar de cualquier cosa, después noto que a Pitt se le ensombrece la cara y alguien habló detrás de mí.
- Bueno, bueno, bueno... nunca pensé que nuestro nerd favorito haría una amiguita...-
Me giro, y veo un tío rubio de pelo al rape, grande y con cuerpo musculoso. Mira a Pitt con cara de querer fastidiar y luego me mira a mí con interés y curiosidad. Le miro de reojo y veo que ante esta frase Peter le mira molesto y cansado.
- Déjanos, Flash...-
Veo que ya se conocen de hace tiempo y que a Peter no le cae muy bien.
- Oh, vamos Pette, preséntame a tu amiga nueva...-
Veo que Peter suspira cansado y decido entrar en acción.
- Me llamo A Tí No Te Importa y vengo de la escuela Déjanos En Paz. Encantada, y ahora si nos disculpas, estábamos en medio de una conversación antes de que tú interrumpieras. Adiós.-
Los dos me miran asombrados, el tal Flash un poco molesto y Peter alucinado de que le haya contestado con tanta brusquedad y sequedad. Me he portado así porque he visto que él es uno de esos abusones creídos que lo único que quieren es chinchar y hacer de rabiar a su presa para poder armar un escándalo. Peter, no es que no me parezca bien pero, le veo como el listo que no se defiende ante los comentarios de los idiotas como Flash. Y eso iba a cambiar. Yo tengo el defecto de ser muy orgullosa y si alguien se metía conmigo o con mi amigo, pasaba directamente a mi lista negra.
- A mi no me hables así, no te he hecho nada.-
- Aún no, pero has de saber que no me gusta relacionarme con gente como tú.-
- ¡Pero si ni me conoces!-
Dice alzando un poco la voz y atrayendo las miradas de unos pocos curiosos.
- No me hace falta, la cara de Peter lo dice todo.-
- Yo no he dicho nada...-
Dice Pitt por lo bajo y con cara asustada.
- Te estás pasando de la raya, pequeñaja...-
Dice inflando el pecho con intención amenazante. Yo me levanto molesta y le miro a los ojos en actitud desafiante. Odio que me llamen pequeñaja, lo odio con toda mi alma.
- No me llames pequeñaja.-
Digo enfadada.
- O si no, qué.-
Estábamos tan cerca mirándonos con tanta furia que la gente que había al rededor empezaba a inquietarse, probablemente por la posibilidad de que hubiera una pelea. Antes de que pudiera decir nada, Peter me coge del brazo y me dice por lo bajo, "por favor, ahora no, aquí no". Parecía asustado, y su voz tenía un ligero temblor. Al final me separo de Flash, cojo mi mochila y me dirijo a la salida con Peter a mi lado.
- Eso, huye cobarde, ¡¡¡y no te vuelvas a enfrentar a mi si sabes lo que te conviene, pequeñaja!!!-
Dice gritando para que todos lo oyeran solo cuando habíamos dado unos pasos. Entonces exploté. Esa última palabra fue la que prendió la llama al principio de la discusión y ahora se había hecho tan grande como un incendio forestal.
Me giré hacia él, decidida a darle en el punto bajo de todo abusón; su orgullo.
- Sabes, la verdad es que me das pena, Flash.-
Le dije con cara compasiva y a la vez cruel.
- Siempre me dieron pena los abusones por todo lo que hacen. Se creen más fuertes y guays que nadie, pero en el fondo son desconfiados y blandos.-
Flash me mira con furia en sus ojos.
- Bueno...-
Suspiro.
- Espero no haberte molestado antes, ¡¡lo siento!!-
Digo bien alto para que todos me oyeran. Peter me seguía tirando del brazo para que nos fuéramos, pero yo quería ver la reacción de mi contrincante. Creía que era más listo, pero en vez de eso, solo me dijo:
- Te voy a matar...-
Lo dijo muy bajito, pero lo suficiente para que yo lo oyera. Le dirigí una sonrisa cruel y pícara y me giré para salir de la cafetería e irme a la siguiente clase con Pitt.