A la mañana siguiente, Maya y Riley se prepararon para ir a clase.
Tocaba Historia con el señor Matthew's, el padre de Riley.
Corey- "Muy bien, chicos, hoy hablaremos sobre un tema que todos conocéis muy bien, el amor".
En ese momento, Riley miró a Maya rápidamente, y como se imaginó, no se encontraba bien.
Comenzó a llorar y su padre le dio permiso para que saliera.
Riley levantó la mano y su padre supo exactamente la situación, así que le dijo que podía salir.
Riley fue a buscar a Maya al baño.
Y allí estaba.
Riley se acercó y le dio un fuerte abrazo.
Riley- "Maya, escúchame" dijo Riley, tomando las manos de su amiga.
Riley- "Puedes con todo, y sé que podrás superar ésto.
Yo me voy a encargar de hablar con él, pero tú me vas a prometer que vas a quererte más y a superar ésto, sí?".
Maya- "Está bien, Riley, gracias de nuevo, no sé qué haría sin ti".
Se abrazaron de nuevo.
Cuando Maya se tranquilizó, volvieron a clase.
El resto de las horas se pasaron rápidas.
Las dos volvieron a casa.
Riley llegó a su casa, almorzó y fue a hablar con Josh.
Estaba en el parque.
Se acercó y nada más girarse, le dio una bofetada a él.
Riley- "Eres un idiota.
Cómo pudiste engañar a Maya?
Debería darte vergüenza, ojalá nunca la hubieras conocido.
Nunca te atrevas a volver a hablarle, sino te las verás conmigo".
Josh- "Eh eh, a mí me dejas, hago lo que me dé la gana, y si la quise dejar fue por que me cansé, así que no me vengas con ésto".
Riley- "Idiota".
Dijo Riley y se fue de allí.
Hizo su rutina de cada día, y se hizo de noche.
Por la noche se puso a pensar en muchas cosas, pero una de ellas la dejó sorprendida.
Le dolía ver a Maya así, pero no era el típico dolor de una amiga, era como algo más, como si sintiera cosas diferentes hacia ella.
Dejó de pensar y se fue a dormir.
Mañana sería un nuevo día.
