12.

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Jimin no suele almorzar en el comedor porque las mesas se llenan rápidamente, además que el bullicio es mucho y el rubio le gusta un lugar tranquilo para poder leer sus libros. Es por eso que siempre opta quedarse en el salón o sentarse en el pasto bajo la sombra de un árbol. Taehyung está a su lado con una bandeja y caminan hacia la única mesa en donde la maestra Shin los saluda.

Se sorprende de ver a otros alumnos. Como Kim Namjoon, Min Yoongi y Kim Seokjin. Sabe que dos de ellos cursan en su mismo grado, pero diferente salón, aunque no está muy seguro del primero. Su hermano está sentado junto a Hoseok, cosa que le confunde pues sabe que este no obtuvo una inscripción.

—Llegan a tiempo, —la maestra les sonríe. Taehyung deja caer su bandeja sobre la mesa, y todos lo miran. —eh... iré a la sala de profesores, si tienen una duda ya saben dónde buscarme.

Todos asienten.

—Bien, entonces me retiro. —toma algunos trabajos de la mesa y antes de irse, agrega. —No sean tan duros con Jungkook, él en verdad ha demostrado tener una gran habilidad para la escritura. Así que, como el presidente de este nuevo club, espero que hagan caso a sus comandos.

Jungkook ya no siente vergüenza alguna. Yugyeom y Hoseok se habían pasado molestándolo durante las clases, algunos se burlaron diciendo que Jimin lo había contagiado como si el tener talento para relatar fuera como la peste. Los ignoró pues es la única forma de hacerlos enojar sin usar la violencia, y se dedicó a prestar atención.

No pensó que tendría a seis chicos en su mesa, todos esperando a que dijera algo como líder del grupo. Pero, Jungkook sabía que aquello no iba a pasar. Se sentía algo tímido con respecto a este cambio, agregando que su "talento" ni siquiera le pertenecía. Tendría que darle los créditos a Jimin, pero por ahora se conformaría con asumir la responsabilidad de sus actos.

— ¿Todos están aquí verdad? —pregunta mirando a cada uno.

Min Yoongi asiente. Cabe decirse que le sorprendió verlo alzar la mano en clase de Educación Física, él es el capitán del equipo de básquetbol y no esperaba que un amante del deporte esconda un amor por las letras. Cruzaron pocas palabras, como cuáles eran las reglas y si se era necesario asistir todos los días. Jungkook le dijo que esperara hasta el almuerzo, allí sus preguntas serían respondidas.

Luego estaba Kim Namjoon. Es un grado mayor que él, y por lo que sabe tiene un talento innato por los números; siempre se rumoreaba que rapeaba en algunos bares y que había pruebas de aquello, aunque nunca nadie las publicó, Jungkook cree que puede ser verdad. Su facha de nerd podría servirle para esconder todas las rimas y versos que practicaba a diario.

Había visto en varias ocasiones a Kim Seokjin. Es compañero de Yoongi, y por lo que sabía, son pareja. Jungkook no tiene ni la menor idea si aquello es verdad, pues los rumores corren sin un fundamento, y no tendría problema en aquello. Su hermano parece estar a punto de formalizar con Taehyung, cosa que odia, pero estaba comenzando a aceptar sus gustos. Después de todo nadie ganaba nada criticando a los demás.

Y por último estaba Hoseok, que si admitía sólo había rellenado la inscripción pues no dejaría a su mejor amigo solo. Había rogado a Yugyeom para que siga sus pasos, pero este se rehusó cuando vio que Yoongi también estaba allí, por alguna razón todos parecen verlo con aires de malo, pero Hoseok cree que es tierno, sobre todo cuando celebra cada vez que encesta en los partidos.

—Bien, q-quiero... uhm, sí, quiero agradecerles por haberse inscrito en este club. —muestra su mejor sonrisa, pero nadie parece interesado en aquello. Suspira. —Les leeré las reglas, algunas pautas y luego responderé sus preguntas.

Jimin le roba una patata frita a Taehyung, y espera a que su hermano comienza hablar. Se sentía incómodo pues no había visto a Yoongi ni Seokjin desde la escuela primaria, y si tenía conocimiento que estaban en la misma escuela, pero los horarios se cruzaban y era casi imposible verlos. No habían cruzado palabra alguna desde la graduación de sexto, pero todos parecen haber cambiado tanto, que el rubio se siente un cero al lado de ellos.

—Las reuniones serán los martes y viernes hasta las seis y media. —puede escuchar uno que otros bufidos, pero sigue leyendo. —No se permitirá el uso del celular, y las llamadas tendrán que ser contestadas fuera de aula; llevar siempre un cuaderno o libreta para los apuntes, y.... oh, no se olviden de asistir, es importante.

Namjoon sigue cruzado de brazos mientras que Seokjin tiene una mano apoyada en la mesa, y juega con la gelatina en su bandeja. Taehyung sigue comiendo su almuerzo, Yoongi tiene la mirada pérdida y Jimin junto a Hoseok parecen ser el únicos que han escuchado sus palabras. Le da una sonrisa tímida, y el mayor desvía la mirada.

—Saben, yo... yo no pedí que este grupo se creara. Pero tengo una responsabilidad a cargo, y no voy a decepcionar a la señorita Shin. —todos fijan la mirada en su persona. —Necesito saber si cada uno de ustedes podrá poner de su parte, quiero que lo que sea que hagamos, funcione. Sé que si se han inscrito es porque les apasiona escribir, o bueno, saben cómo. No pido que traigamos un Premio Nobel de Literatura cuando se den las presentaciones, pero al menos me gustaría intentarlo.

Yoongi sonríe.

—Cuenta conmigo.

Namjoon deja la postura indiferente.

—Estoy dentro, Jungkook.

Seokjin suelta la cuchara ante las palabras.

—Nunca he hablado contigo, pero wao, es el mejor discurso que he podido escuchar. —todos asienten en la mesa, Jungkook se siente avergonzado. —Lo mío no es precisamente escribir, pero haré hasta lo imposible por ser de utilidad.

Hoseok pasa su brazo sobre sus hombros.

—Debo aceptarlo, Kook...—dice y agrega—Me siento orgulloso de ser tu mejor amigo.

Taehyung no tiene una expresión clara en su rostro, pero parece de acuerdo con lo que ha dicho.

—Al parecer golpear y dar ánimos son tus fuertes.

Jimin siente una mezcla de emociones dentro. Era la primera vez que veía a Jungkook tan comprometido con algo, la manera en que dejó ver su capacidad de madurez temprana. Al parecer si tiene por talento el escribir, y no puede creerlo.

— ¿Jimin?

El nombrado levanta la mirada, encontrándose con la mirada de su hermano. Jungkook está nervioso por lo que sea que el rubio vaya a decir, pero, aun así, cuál sea su opinión, no podrá detenerlo.

—Siempre juntos, ¿recuerdas, Kookie?

Pecando al amar ┼ KOOKMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora