Noah

367 24 6
                                    

Capítulo 8

Nick
9 años atrás


Era divertido jugar con mi hermano Nathaniel, siempre que mi papá no estaba jugábamos a las guerras con pistolas de agua, incluso fingíamos ser astronautas y que íbamos al espacio. Aunque siempre que llegaba mi padre la diversión siempre terminaba, ya que mi padre me regañaba y no entendía el porqué.

Mi padre aun me seguía causando el mismo temor, que me provocaba desde que se había ido Nathaniel. Cuando escuchaba la puerta principal abrirse sabía que papi me iba a golpear nuevamente.
Aunque ahora que estaba Nathaniel conmigo él siempre se interponía entre mi padre y yo, por lo que el recibía los golpes.

Admiraba a mi hermano porque sin importar lo duro que lo golpeara mi padre el no lloraba y me decía que todo estaría bien, que él siempre me cuidaría.

Hoy estaba en el partió y estábamos jugando a ser policías, Nathaniel era el policía y yo era el ladrón. Todo era tan divertido y genial. Hasta que escuche como mi padre me llamaba de lejos diciéndome que me acercara a él. Tenía miedo de que si no le hacía caso me iría peor de lo que normalmente me iba con mi padre siempre, así que decidí hacer caso.

-¿Qué demonios estás haciendo haya en el patio?- dijo mi padre molesto agarrándome fuerte de mi brazo, tanto que dolía.

-Estoy jugando papi.

-Aja si eso lo sé, pero ¿porque demonios estás hablando solo?

-No estoy hablando solo papi.

-Aa... ¿Si? Entonces con quién demonios estabas hablando Nick, no veo a nadie aquí - dijo mi padre acercándome más a él y yo voltee a ver a Nathaniel quien me hizo una señal de que no le dijera nada a mi padre con respecto a él. Así que recordé una caricatura que veía que se llamaba Mansión Foster para amigos imaginarios.

-Estaba hablando con mi amigo blue, está al lado de mi- mentí esperando que mi padre creyera que estaba hablando con un amigo imaginario.

-De pilón de que eres un niño inútil y problemático, ahora me tenías salir loco. Te me vas ahora mismo a tu habitación, y no quiero que vuelvas a decir esa estupidez de que estas hablando con tu supuesto amigo blue- dijo por último mi padre antes de aventarme a las escaleras para que subiera a mi habitación.

Me acosté en mi cama esperando que llegara Nathaniel de un momento a otro. Para mi suerte no tardo mucho.

-Nathaniel- dije con felicidad levantando me de mi cama y corriendo hacia mi hermano dándole un abrazo - ¿porque te escondiste esta vez de papá?

-Bueno... Digamos que esta vez me dio miedo y no quería que le hablaras de mí.

-Tu eres muy valiente Nathaniel, eso lo que admiro de ti. En cambio yo soy un cobarde que lo único que hace es llorar en su habitación.

-Oye...- sentí como la mano de Nathaniel se posaba en mi hombro- Tú no eres un cobarde. Tú eres más valiente y más fuerte que yo Nick, tenlo por seguro chaparro- dijo por último Nathaniel alborotándome el cabello.

Siempre Nathaniel aparecía en el momento indicado, siempre cuando yo lo necesitaba. Pero había momentos en el que el desaparecía y no lo veía por buen rato.

Nathaniel se fue y me quedé completamente solo en mi habitación. Vi el reloj el cual marcaban las 7:00 de la noche, decidí dormirme.

Cuando estuve a punto de quedarme completamente dormido. Escuché como la puerta de mi cuarto se abría. Sabía quién era y por ello mi piel estaba chinita y me recorrió un escalofrío por todo el cuerpo.

NoahDonde viven las historias. Descúbrelo ahora