TEMPTATION. >><< McDanno

Epílogo.

"Un matrimonio exitoso es la suma de pequeños esfuerzos, centrados en demostrar amor y apreciación todos los días".

Y eso lo tenían muy en claro el matrimonio McGarrett Williams, tan solo hace unos días habían celebrado su octavo aniversario de ser esposo y esposo, meses después del nacimiento de Grace, un jueves catorce de febrero, Steve decidió dar ese gran paso a un futuro en él que Danny y el estuvieran  juntos, no sólo por toda la vida, sino también hasta él día de su muerte.

Así fue como dio paso a los preparativos de una peculiar e inolvidable boda, se habían unido en matrimonio justo seis meses después de aquella hermosa propuesta bajo la luz de la luna en Kualoa Ranch. Toda la familia y amigos asistieron en aquél evento del que todos en la isla hablaban, pues, no era cualquier  boda, sino era la boda del jefe y el segundo a cargo de las fuerzas especiales 5-0.

Sin dudas esa fecha iba al álbum de los recuerdos mas hermosos en la vida de ambos, eran momentos que marcarían sus vidas en un manera mas que positiva.

Alfa y omega seguían trabajando en la unidad 5-0, pues, habían pensado en retirarse e iniciar un negocio familiar, uno del que pudieran permanecer mas tiempo juntos y disfrutando de los momentos con Grace, pero esto nunca sucedió, no porque no tuvieran un capital suficiente si no que les daba mucha nostalgia dejar aquél trabajo que ha formado parte de sus vidas.

(Tiempo actual).

Eran las siete de la mañana Danny se mantenía en su cama, no quería si quiera intentar ir a duchara para ir a trabajar, pues, se sentía muy cómodo siendo acurrucado por lo fuertes brazos de Steven al rededor de su cintura.

Amaba y no se cansaba amanecer todos los días de esa manera, sentir el calido cuerpo desnudo de Steve junto al suyo, era simplemente mágico. Ambos estábamos muy cansados, pero como no han de estarlo, puesto a que era raro cuando los celos de ambos coincidían, pero cuando lo hacían no había fuerza humana que evitara que su lado animal predominara aun mas.

—Danno.– llamó Steve una vez que estuvo despierto.

—¿Mmhm?.– murmuró él rubio.

—Iremos por Grace luego de ducharnos.– él alfa apretujó a Danny mas a su cuerpo.

—Solo cinco minutos más.– pidió él omega.

—Sé que estas exhausto, también lo estoy, cariño, pero Kono ya a hecho mucho en cuidarla por casi cuatro días.

—Me duele todo, Steven, dejame ver si puedo caminar o sino vas tu solo.– argumentó Danny para después levantarse lentamente pero acostándose de inmediato al sentir el horrible dolor en sus caderas, glúteos y cuello.– No podré caminar en días, animal.– refutó él omega al no poder levantarse sin que el dolor apareciera nuevamente, a eso le agregaba el escozor en su cuello.

—Al parecer fui demasiado brusco, lo siento.– se disculpó mientras colocaba cortos besos en la espalda del omega.

—No, tu lo sentiste.– bromeó Danny.

—Claro que sentí lo apretado que....

Él alfa no término de musitar palabra alguna gracias a que Danny lo había golpeado con una almohada.

—Calla y ve a ducharte, hoy es él día libre de Grace y por lo que veo no seré de mucha utilidad en éste estado.– objetó él rubio en medio de un quejido.

Steve por inercia y sus instintos de alfa se acercó al cuello de Danny y colocó un corto beso sobre aquella marca que había sido reabierta nuevamente. Dio pequeñas lamidas sobre aquella área y poco a poco el ardor y el dolor fue disminuyendo.