Hospital Militar, Honolulu.
Danny había sido ingresado al hospital hace algunas horas, le habían suministrado suero y la fiebre la tenía controlada, Steve había llegado y no se había apartado de su lado.
La HPD se había quedado investigando y obteniendo pruebas en aquél búnker, Chin y Kono obtuvieron mucha más información de la que ya habían obtenido.
—Steve, ya han identificado los cuerpos.– anunció Chin una vez que entró al cuarto de hospital.
—¿Quienes eran?.
—La omega era Shona y Karen Ivanova, tenían nexos con los que traficaban en la isla, pero no directamente con la Bratva, al parecer era la muchacha de la limpieza y la otra la mamá.– explicó mientras le mostraba una imagen.
—Pero según información habían nueve personas, solo encontramos siente, ¿quienes eran los otros?.– preguntó él alfa.
—Los seis alfas que encontramos eran los que ya habíamos perfilado, habían tres omega pero solo encontramos a Shona, había un rastro de sangre, tomamos muestra y esta siendo analizada.– explicó él isleño.
Steve iba a responderle pero en ese instante Danny comenzó a despertar.
—¿D..Donde estoy?.– susurró el omega un poco desorientado. Este se estaba moviendo demasiado así que él moreno se acercó a detener sus manos para que no se quitara la sonda del suero.
—Tranquilo, estas en el hospital, todo término, vas a estar bien.– susurró el alfa intentando mantenerlo tranquilo.
Chin salió de la habitación para dejarlos solo, necesitaban hablar cin Danny de lo que pasó en aquel búnker pero ya lo haría luego.
—Steve.– masculló él omega.
—¡Al fin despiertas, dormilón!, yo ya iba a recrear la escena de la bella durmiente para que despertaras mas rápido.– bromeo el alfa.
—¿Que te detenía?.– Susurró él detective aun medio somnoliento.
—Nada, no me detenía nada.– confesó Steve. Él alfa iba a acercarse y besar a Danny pero fue interrumpido Dominik.
—Danny, ¡Dios!, me tenías angustiado.– musitó Dominik adentrándose en la habitación.– Me permites unos momentos con él.– pidió como arrogancia.
Steve tensó su mandíbula ante la presencia de ese alfa en la habitación de su Danno, pero no quería discutir, así que salir era la mejor opción, por ahora.
—Estaré afuera.– avisó Steve, no sin antes colocar un casto beso en la frente de Danny, tal gesto hizo que él omega cerrara sus ojos por cortos segundos.
Cuando Steve salió, Dominik se acercó a abrazar efusivamente al detective, ese solo se removió muy incomodo.
—¿Te sientes mejor?.
—Si, estoy mejor.– respondió el rubio con simplicidad.
—Me tenías muy preocupado, creí que no te volvería a ver.– expresó el alfa.
—Confiaba en mi equipo, sabía que me encontrarían.– en parte si lo hacía, pero no se iba a mentir, aquél omega le había ayudado a salir con vida, sabía que se trataba del omega del mafioso más buscado pero gracias Louis, su bebé y él estaban vivos.
Espera un momento...
"¡Bebé!, ¡Steve!, ¡Catherine!"– pensó él omega en lo que ahora era su realidad.
La máquina que medía los latidos de su corazón comenzó a sonar en un constante, estaba a punto de hiper ventilarse pero Steve entró a ver que sucedía y calmarlo.
—Tranquilo, respira conmigo, todo va a estar bien, Danno.– llegó Steve y tomó ambas manos del omega, trataba de que volviera a respirar con normalidad.
—Llamaré a una enfermera.– anunció Dominik desde algún lugar en la habitación.
—No es necesario, ya esta mas tranquilo.– comunicó McGarrett.– ¿Que sucedió para se pusiera así?.– cuestionó.
—Solo le dije que me tenía preocupado y pensé que no lo volvería a ver.– contestó de mala gana.
—Podrías dejarme un momento a solas.– pidió él Seal.
—No lo creo, necesitó estar con él y hab....
—Dominik, solo sera un instante.– fue Danny quien habló esta vez.
Él alfa comenzaba a sentirse furioso, había viajado desde Jersey solo para pasar mas tiempo con Danny, había dejado toda su vida a tras solo por Danny, había comprado el costosos anillo de compromiso solo para que Danny dijera que no estaba listo para recibir un alfa en su vida, mucho menos para ser marcado, ¿pero que es lo primero que ve en 'Danny' cuando recién llegaba a Hawaii?, ¡si!, una una jodida marca de algún estúpido alfa.
No sabía cómo sentirse, estaba siendo un simple juguete para aquél omega que amó desde su adolescencia, por el que daría todo a cambio de recibir un poco de afecto, pero no estaba ganando 'NADA', porque toda su atención se la robaba ese tal Steven McGarrett.
No le quedó mas remedio que salir al pasillo y dejarlos solo, no sin antes pretender cerrar la puerta.
—Ya estoy mejor, solo recordé algo.– comentó él omega cuando se quedaron a solas.
Steve se sentó en un espacio en la camilla junto al omega, llevó una de sus manos hasta acariciar la cálida mejilla del rubio.
—No sabes lo mucho que te extrañé, creí te perdería y me rehusaba a que fuera así.– confesó él alfa mientras seguía acariciando el rostro de Danny.
—Fueron las peores semanas de mi vida, c...creí que no saldría vivo de ese lugar.
—Ssshh, no recuerdes eso por ahora.– susurró Steve mientras ponía su dedo índice en los labios del omega.
—También te extrañé, animal.– murmuró cuando el moreno quitó su dedo.
—¿Con todo y mis arranques de ninja loco?.– sonrió él moreno.
—Con todo y tus arranques de ninja loco, neandertal, troglodita y animal.– bromeó Danny.– Aunque ahora que lo pienso, espero que mi auto esté en una sola pieza y sin abolladuras, si me llego a enterar de que.....
Danny no termino de decir nada puesto a que fue callado por Steve, y no de cualquier manera, sino con un suave, cálido y tierno beso. Ese beso que tanto ansiaban por fin era correspondido, ambos disfrutaban de ese exquisito tacto que tanto habían deseado, era un simple beso que demostraba todo ese sentimiento que habían reprimido y callado por muchos años. Sus labios eran esa tentación de la que estaban dispuesto a seguir cayendo.
Prometí dedicar capítulo pero será hasta en las siguientes actualizaciones. Envíen un mensaje al imbox para agregarte sus USER a las dedicatorias.
All The Love H× 💚💙
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TEMPTATION. >><< McDanno
FanfictionSinopsis. Cada mañana era un sacrificio para Steve contener las terribles ganas de besar los finos labios de su compañero, el poder acariciar la suave y tersa piel de ese hermosos rubio, era demasiada tentación el solo hecho de sentir su respiración...