No me odien aquí está, gracias por la espera.
En el capítulo anterior:
- ¿Eres filoso? –Bromeó –¿Dónde está el rebelde que conozco?
- No siempre soy un rebelde.
- ¿Ah sí? –preguntó sarcásticamente rodando los ojos –¿Cuándo no eres rebelde?
- ¡Cuando tú me lo pides!
Había perdido a noción del tiempo estando a su lado y con ello olvidaba ciertas cosas, olvidé cada una de las promesas absurdas que me obligaba a mantener, olvidé las peleas con mi madre, a Annie y empezaba a olvidarme a mí misma, por raro que parezca, me agradaba porque así, por un instante, olvidaba todo lo que me llevó a tener un presente, aquello que hice cuando no quería hacerlo, mi conformismo y habilidad para complacer a todos menos a mí. Entre todo ello, tenía algo nuevo, algo que quería para mí solo por el hecho de sentirlo, algo diferente, hermoso y único; Él, sin necesidad de obligaciones, promesas y juramentos; sin nada más que los sentimientos de ambos, sin preocupaciones por expresar o decir lo que sentimos porque con el motivo de vernos ya todo se sabe, sin conexiones. Estaba segura de que él era el indicado y eso me bastaba, no quería “Click’s” al tocar su mano, ni tampoco presentimientos que me indicaran su estado de ánimo cada 5 segundos, mucho menos “Flash” que me restregaran una vida eterna junto a él; quería algo simple, que me permitiera disfrutar de él cuanto tiempo sea posible, le quería, lo quiero.
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- ¿Puedo pedirte algo más? –dije tratando de aprovecharme de la situación.
- ¿Qué?
- No me dejes –susurré –Si quieres arrepentirte hazlo ahora, justo en este instante pero no lo hagas aún cuando todo se venga abajo.
- ¿Temes que no sea fácil? –Preguntó y pude notar como su mirada buscaba un toque de decepción en mí.
- Temó que no sea posible.
- No te dejaré –responde –No es un intento de promesa, es una afirmación. Soy un adolescente __(TN) pero no me importaría madurar mentalmente a un viejito de 85 años solo para demostrarte que soy lo suficientemente capaz de mantener en secreto esta relación.
- ¿Qué relación?
- No empieces con tus juegos ahora –dijo antes de que pudiera burlarme.
- Sé que eres capaz Zayn –sonreí –No estoy segura de que yo lo sea.
- ¡Lo eres!
- ¿Cómo lo sabes? –pregunté –¿Tienes poderes divinos?
- No, solo pienso en ti de la manera en que tú misma deberías de hacerlo.
- ¡Me enredas!
- Solo ve tu pasado –exclamó –Si yo estuviese en tu lugar nunca hubiese prometido y cumplido tantas cosas…
- Suena más estúpido cuando alguien lo dice –interrumpí.
- Suena heroico –dijo –Lo hiciste por tu familia, una persona que piensa en la felicidad de los demás antes que en la suya es un héroe.
- Oh… una estúpida.
- Debes de creer más en ti Smith –sonrió.
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Domadora de Rebeldes. CANCELADA TEMPORALMENTE
Fanfic¿Qué sucede cuando domas rebeldes? ¿Qué sientes? – No lo sé, el mundo podría derrumbarse aquí, justo ahora y estaría feliz de estar muriendo a tu lado– Ya no me amas. Nunca ame a nadie –sonrió – La vida es así querido rebelde, ahora sal de mi vista...