La cita

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—Así que Jeon. ¿Eh?

Min Yoongi estaba tirado sobre el sofá. Cinco segundos antes estaba con el móvil, buscando algún tipo de trabajo que pudiera servir para ganar el dinero que desperadamente necesitaba, sin embargo no pudo evitar detenerse para observar a la chica que no paraba de moverse de un lado al otro del pequeño piso.

—La verdad es que eso no me lo esperaba.— siguió hablando tratando de mostrar que no le importaba demasiado.

El sabía que dai aún no le consideraría como un amigo, y quería ganarse ese titulo con el tiempo. A demás, no podía admitir que le gustara ese chico, por que no era así. De hecho yoongi siempre vió a Jeon como uno de los muchísimos capullos de ese centro escolar, por eso le sorprendía que alguien como Dai estuviera manteniendo cualquier tipo de relación con alguien tan... Insuficiente para ella.

—¿Por qué?

La joven terminó de calzarse con sus deportivas para tirarse en el sofá con el. Se hizo un pequeño hueco a su lado mientras que revisaba la hora del movil, dándose cuenta de que aún tenía 10 minutos antes de salir de casa.

—No se. Supongo que no esperaba que fueras a sustituir a Tae tan rápido.

Dai miró seria al chico, con la expresión de siempre, salvo que esta vez había un brillo que mostraba que sus palabras no le habían gustado.

—Yo no lo estoy sustituyendo...— mustió.

—¿A no?— sonrrió sarcásticamente el mayor. —¿Y por que estas con Jungkook?

—Por que el se acercó a mi primero.— dijo mirando al peliberde.

Sus palabras sonaron casi orgullosas. Es verdad que Dai en el fondo le gusta aquello. No había muchas personas que se la acercaran por que quisieran, por que realmente se interesaran en ella. Siempre pasaba desapercibido, y cuando no lo hacía era para recibir algún comentario ofensivo, es por eso que apreciaba mucho a las pocas personas que veían en ella algo parecido a una amiga. Entre esas personas estaban  Tae, el cual no veía desde hacía mucho tiempo, Yoongi, sus dos amigas de la escuela Hwasa y Lisa, el anciano del parque que siempre se cruzaba alimentando a palomas, la dependienta del supermercado de debajo de su casa y por ultimo Jungkook.

Que pena que el ultimo de todos no se estuviera acercando por ella, sin embargo ese hecho era algo que Dai no sabía. Hasta cierto punto.

—Deberías ser mas critica Dai. Que no tengas muchos amigos no quiere decir que el primero que se presente voluntario sea conveniente.

Dai se volvió, apoyándose sobre uno de sus lados mientras que ponía sus brazos a modo de almohada para así mirar al chico.

—Pero parece que le atraigo.

Esas palabras sonaron tan estúpidas, como una chica que creyera totalmente en Papanoel y no quisiera pensar en lo contrario. Yoongi no entendía que quería decir la chica, sin embargo no interrumpió, ya que la extraña conexión que tenían le hacía entender que ese silencio prologado era solo para que la chica se pensase mejor las palabras.

—Es verdad que han sido pocas las personas que han querido ser mis amigas, pero por lo menos ha habido unas cuantas. Pero nunca nadie ha intentado acercarse a mi para algo mas. Nunca nadie me ha visto como una pareja.— el chico se sorprendió por el comentario de la chica, no la veía como ese tipo de jovenes que buscaban el amor de su vida.— en todas la historias que leo, en todas las peliculas, siempre hay una pareja. Siempre el protagonista se siente querido por alguien de una manera mas especial. Yo también quiero sentirme así y si Jungkook quiere intentarlo ¿Por que yo no? Nunca antes nadie me ha querido de esa manera, y me gustaria poder comprender como se siente. 

LA DIFERENCIA (JJK and KTH)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora