Capítulo 20: Amor juvenil

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20-Amor juvenil

**Haruka**

Apenas puedo creer que pese haber recibido una lección de parte de mi padre contándome su historia, yo esté a punto de repetir el mismo error. Pero...si el error de mi madre fue enamorarse de mi padre y tenerme ¿¿sigue siendo algo malo? Yo creo que no....

Vuelvo a pasear sobre mis pasos por el pasillo del instituto para ver si le veo. Nada, ni rastro de ese mastodonte inútil que siempre se mete conmigo cuando me ve. ¿Por qué tengo tanta necesidad de verle aunque solo sea para cabrearme con sus insultos? No lo entiendo... ¿me habré fijado en un torpe e ignorante como él?

-¿Haru? ¿Qué haces?- me sobresalto al sentir a mi primo Tensa a mi espalda y veo como frunce el ceño al verme tan nervioso.

-¿no deberías estar en clase?-

-Aún no ha sonado la campana. ¿Esperas a alguien?-

-A... ¡A Rei! Se olvido un libro en mi casa y tengo que dárselo-

-Mmm....- mi primo no es nada tonto y desconfía al verme tan apurado. Yo no suelo atacarme por nada pero cuando me miran tan fijamente no me gusta.

-Vaya, dos sabandijas sueltas por mi territorio- me estremezco al oír la voz de Zaraki Kenpachi, nuestro conserje, que viene con varios útiles de limpieza en las manos y con su uniforme azul para trabajar. En cuanto noto como fija sus ojos pequeños sobre los míos, me ruborizo furioso y le doy la espalda.

-Vámonos Tensa, a ver si va a contagiarnos su estupidez-

-Juraría que estabas esperándome, Kuchiki Haruka. Ha sido divertido verte dando vueltas por el despacho de conserjería- eso me hace suspirar sorprendido y me doy la vuelta para ir hacia él cruzándome de brazos.

-¿Qué te has creído eh?? Eres totalmente insignificante ¡todos lo saben!-

-Es imposible que pase desapercibido con mi estatura y careto, chaval-

-Por eso te rehúyen ¡eres horrible!- veo como eso le hace gracia aunque a mí me duele haberme pasado. Joder, no es nada atractivo, pero tanto para decirle eso no, si fuera un monstruo yo no me habría fijado en él....

-Haru, la campana- mi primero me saca de mi ensimismamiento momentáneo y voy con él a clases ignorando a Kenpachi el cual se va a su sitio de trabajo sin decirme nada más. Seguramente en el fondo le he ofendido y con razón, necesito disculparme.

A la salida me despido de Tensa que parece tener prisa por cómo mira el reloj y entro directamente en el pequeño cuarto de conserjería donde no hay nadie. ¿Se habrá ido ya a casa?

-Lo sabía. Los ratones siempre vuelven a molestarme- aprieto los puños cuando vuelve a sorprenderme y me extraña que con ese cuerpo tan grande pueda ser tan sigiloso.

-Solo venía a disculparme, me he pasado-

-¿por llamarme feo? Todos lo piensan, es normal-

-Porque no te conocen. Seguro que no eres tan capullo como aparentas-

-Oh?? ¿Me estás halagando enano?-

-Quiero saber porqué sabes mi nombre completo. ¿De qué me conoces?-

-Es el único nombre que me sé. En cuanto vi tu fotografía en el libro de alumnos, fuiste el único que llamó mi atención-

-Yo...llamé tu atención....-

-Sí. Pese a lo repelente pijo que eres, estás buenísimo. Me gustan los niños rebeldes como tú-

No sé ni de donde saco el impulso que me hace tirar de su chaqueta para obligarle a inclinarse y chocar mis labios contra los suyos. Siento mi nariz dolorida al haberme chocado con la suya y me retiro viendo por primera vez una expresión de sorpresa en su rostro.

"Cuando conocí a tu padre"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora