Mi Girasol [MarkHyuck/HaeMark]

Cálido

Ya eran las 7:23PM y la ventana de su habitación comenzaba a tomar un color naranjo intenso, típico al atardecer.

Donghyuck notó lo tarde que era y volvió a envolverse en sus mantas cerrando los ojos con fuerza, quería dejar de pensar.

En ese momento escuchó un alboroto, algo estaba pasando fuera, sin embargo ni ganas de curiosear tenía.

—¡¡¡Donghyuck!!! ¡¡Hay un psicópata aquí afuera!!!

¡Era la voz de su hermana!

Como pudo se levantó de su cama y tomó las muletas, su hermana estaba en peligro y no había nadie más en casa que él y ella. En camino a auxiliarla podía escuchar golpes y ya podía sentir su cuerpo listo para combatir si era necesario, incluso con la pierna lesionada.

—¡¡Donghyuck!! 

—¡¡Gowon!!

Cuando por fin llegó a la escena su hermana estaba blindando una escoba y golpeando con fuerza a un chico que yacía protegiéndose con sus brazos. Era Mark.

—Gowon deja de pegarle —suspiró.—Es mi amigo...

En lo que su hermana dejaba de pegarle al chico lentamente y sus gritos tenían cada vez menos volumen. Mark le miró y Donghyuck no pudo mantener el contacto visual.

—P-pero él tiene un girasol y mamá dijo que...girasol malo y...

—Gowon él es Mark, Mark Lee de NCT mi compañero...

La chica avergonzada tiró la escoba , entró en la casa para encerrarse en su cuarto y dio un portazo que se llegó a escuchar en toda la calle.

—Eso podría ser gracioso si no me doliera tanto la cara.

Por la mejilla del canadiense comenzaban a divisarse una linea roja y Donghyuck de inmediato reaccionó ignorando completamente todo lo anterior.

—Ven —le dijo el castaño serio adentrándose en la casa, dirigiéndose a la cocina, seguido por un cohibido canadiense que nunca había visto al castaño actuar así.—Siéntate.

Hizo caso, se sentó en la silla de la cocina, los rayos del sol reflejados en la loza y en cada azulejo del piso le cegaban a ratos.

Era extraño que el sol no fuera tapado por las gruesas nubes del invierno, pero ese detalle le daba un toque cálido a la cocina.

Donghyuck buscó la caja de primeros auxilios de su casa y sin tardar se dispuso a curar la herida que se situaba en la mejilla del canadiense.

Recordó en ese momento, el como Mark se había preocupado de que le hicieran daño revisando su rostro, recordó también cuando el pelinegro le había besado y en un segundo sus manos comenzaron a comportarse torpes.

—Hey yo puedo explica-

—¡Calla, Mark Lee! —le cortó rápido y siguió limpiando la herida.

No quería escucharle, todo en su mente giraba alrededor de ese girasol casi deshecho en las manos del canadiense.

El silencio prosiguió a llenar la cocina, mientras los rayos del sol bajaban por las paredes, allí fue cuando las luces iluminaron el rostro del mayor y este por inercia cerró los ojos.

Donghyuck entonces le miró bien, se notaba nervioso y aún con la herida en su mejilla parecía estar más preocupado de la flor en su mano. Era él, definitivamente era él, se notaba por la tinta en sus dedos, por el girasol que portaba y aún más por el hecho de que, de alguna forma, todas las letras que había leído, cada mensaje de afecto que había recibido, calzaba muy bien con la forma de expresarse que tiene su amigo.

Donghyuck deslizó su mano desde la herida del chico hasta los labios de este y muy suavemente apoyó los suyos sobre estos.

Solo era un beso, pero para el canadiense era mucho más, porque de alguna forma este significaba que Donghyuck... Le aceptaba de esa forma.

No dudo en soltar el girasol que portaba y posar su mano en la mejilla suave del contrario, acercándole.

Ambos corazones no dejaban de latir rápido en esa silenciosa cocina en donde cada objeto brillaba con las últimas fuerzas del atardecer.

Cuando en la habitación había desaparecido todo pequeño trazo del sol, fue en ese momento que se separaron sin dejar de mirarse los labios.

La situación no era muy clara pero de todas formas se hallaban uno frente al otro con las manos tomadas tímidamente.

—Eres muy muy muy cursi...tonto.—por suerte no había ninguna luz prendida, pues las mejillas del menor yacían teñidas de un carmesí notable. No podía creer que el escritor de todos esos mensajes tan tiernos y llenos de cariño venían de su mejor amigo.—¿Cómo lo haré para mirarte a los ojos ahora?...

El canadiense rió bajo y tomó con sus manos las del castaño, las estrechó suavemente, luego elevó una de ellas y la besó.

—Lo siento, por ser tan cursi.

—Tienes problemas —rió el castaño y por alguna razón la habitación pareció iluminarse otra vez.

〰️

Esta vez se hallaban en la puerta de su casa.

Donghyuck se balanceaba levemente sin poder mirar aún al mayor.

—¿Qué tenías para decirme?

—¿En serio no vas a mirarme? —dijo Mark con gracia, estaba por irse y el castaño aún no le miraba a los ojos.

—Tu tienes la culpa, ya habla rápido, aún no me acostumbro a esto...

—Okey okey mira, yo venía aquí a invitarte al festival del Girasol, pero luego tu hermana me golpéo y ya sabes —suspiró riendo.

—¡Espera! ¿Dices que iremos a un Festival de Girasoles?

El canadiense de inmediato notó que por fin Donghyuck le había mirado y sin gastar un segundo le dio un piquito en los labios.

El más bajo por supuesto se quedó inmóvil luego, aunque antes ya se habían besado, ahora era diferente,  se sentía tímido y el podía ser muchas cosas pero nunca tímido.

—Te vengo a buscar mañana —le sonrió y justo en ese momento la van lo vino a buscar.

—Claro, te esperaré...

«...No soporto estar lejos de ti... Aún cuando se que pronto de volveré a ver, solo me salva de la agonía esa linda mueca que haces al despedirte. Eres adorable.»

Recordando ese párrafo Donghyuck se despidió del canadiense. Moviendo sus manos como siempre lo hacía y dedicándole una sonrisa totalmente real.

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Tengo un fetiche por la palabra "Cálido" djdkdjdk lo shiento~

Entre a la u y no tengo amikos ;-; siempre fracasando nunca infracasando🥳

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