Trato

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Aprovechando ese momento de felicidad por la captura de Scorpius. Teddy no perdió tiempo y salió a toda velocidad de la carpa.

Muchos al darse cuenta, intentaron detenerlo, entre ellos Sirius Black, el animago se había colgado de su pie.

-¡Se escapa!-gritaron los gemelos desde lejos-. ¡Que alguien haga algo!

Harry dejo caer de golpe a Scorpius y corrió detrás del peli azul. Sacó su varita e intento desmayarlo.
Pero para su cruel destino el director se dejó ver, tenía una expresión muy calmada.

Teddy se puso detrás de él con miedo y le rogó que lo protegiera.

-Jovenes...-suspiro Albus-... ¿No creen que esto se esta pasando de los límites? Debemos...-miro a Scorpius tirado en el suelo-. Pero... ¿Que le pasó?

-No le hicimos nada-le dijo Harry y miro a todos-. ¿Verdad amigos?

Muchos asintieron con una sonrisa muy falsa.

-Solo estamos conversando y divirtiendonos, profesor-hablo Ron-. Además teddy...-miro al peli azul con una sonrisa maliciosa-... El nos estaba contando sobre el futuro ¿cierto?

-No-dijo nervioso-. Eso es mentira-miro al director-. Nos quieren torturar, son vengativos y crueles.

-¡Cruel eres tú!-grito Blaise con fuerza-. ¡Me hiciste creer que mi esposo sería Draco! ¡Me ilusione!

Malfoy miro con horror a su amigo.

-¡Solo queremos lo justo!-pidió Sirius con dolor.

-¿Y cuál es lo justo?-pregunto el director

-¡Sangre!

-Señores y jóvenes-dijo Dumbledore con tranquilidad-. Teddy y sus amigos solo hicieron una pequeña broma muy inocente. Estoy seguro que en ningún momento pensaron en herirlos a todos ustedes.

-Exacto, exacto, eso mismo-dijo el peli azul con rapidez.

-Yo considero... Que debemos terminar este conflicto con una competencia. Los de la tercera generación contra... Ustedes. ¿Que opinan?

-Mm...-Todos se miraron, se agruparon en un círculo para opinar, lo que proponía el director parecía lo más sensato, si ellos seguían así, se convertirían en salvajes.

-De acuerdo-dijo Harry al final, como líder del grupo-. Pero si nosotros ganamos ellos tendrán que hacer algo. Un castigo.

-Me parece lo justo-acepto el director y miro a Teddy-. Llama a tus amigos, conversales sobre esto. Los estaremos esperando en el campo de quidditch.

-¿La competencia será quidditch?-pregunto asustado pues no le daba muy bien ese deporte.

-No-le dijo con una sonrisa.

Teddy con temor asintió y camino hacia Scorpius, tuvo que pasar cerca de los gemelos, Bill, sus padres, Sirius y Malfoy. Todos lo miraban con una mueca de disgusto.

-Vamos, levantate-le susurró, pero el rubio no se movía-. Date prisa-gruño y lo cogió del brazo, con cuidado lo fue arrastrando unos metros.

*Sala de los menesteres*

Una discusión se había armado, Rose no olvidaba lo que le había hecho Albus a Scorpius, mientras que James solo gruñía con cada palabra que salía de la boca de la pelirroja.

-¡Solo somos amigos!-dijo Rose enojada-. Además eso no te debe interesar, si me gusta Scorpius es solo problema mío.

-Mi hermana está con ese hurón-le dijo Albus-. Y no permitiré que te acerques a el de esa manera.

-¿De qué manera hablas?

-¡Le coqueteas de lo peor!-grito James interrumpiendo a ese par-. Y déjame decirte que para Scorpius no significas nada.

Rose se sonrojo, frunció el ceño y dando media vuelta se retiró hacia un rincón.
Las palabras de James eran verdad, pero ella solo prefería ignorar.

-¡Todos fuera!

Voltearon y vieron a Teddy. El peli azul se acercó rápido a James.

-Nos dejarán ir con una condición-le dijo. El azabache lo miro confundido-. Debemos participar de una loca competencia que creerá Dumbledore.

-no-se cruzó de brazos-. Lo menos que quiero en estos momento es ser parte del loco plan de Dumbledore. Solo Merlín sabe lo que pasa en su cabeza.

-No tenemos de otra, es eso o quedarnos a aquí por el resto de nuestras vidas.

-¿Porque no regresamos a nuestro tiempo?

-James... Sabes que solo podemos regresar si ellos nos ayudan-saco de su bolsillo un aparato pequeño-. Si quieres puedes intentarlo tu-le entregó-. Verás que no funciona.

James Sirius suspiró derrotado y miró a su hermano.
-¿Tú qué opinas?-le pregunto-. ¿Debemos salir y luchar?

-No lo sé... Somos pocos, ellos son muchos. Tienen ventaja.

-Pero dudo que el director permita que jueguen todos.

Albus se encogió de hombros, cogió su varita y salió de la sala.
James con algo de pereza lo siguió.

-¿Y tú Rose?-le pregunto Teddy con una pequeña sonrisa-. ¿Vas a venir?

La pelirroja asintió despacio.
-Si es la única manera de irnos, lo haré-le dijo-. Pero...-miro a Scorpius que aún no había despertado-... ¿Podrá jugar?

-Si... Él está bien, no te preocupes, solo está dormido-le tranquilizó el peli azul. Se acercó al rubio-. Lo vez... -verifico que tuviera pulso-... Solo duerme.

El viaje de mal gusto al pasado Donde viven las historias. Descúbrelo ahora