Vida Cotidiana (Drabbles)

Casa nueva

Recién habían adquirido un nuevo apartamento, con una recámara más amplia, sala comedor, cocina equipada y todo lo que necesitaban.
Los padres de Naruto ayudaron con la mudanza e incluso les regalaron un refrigerador nuevo. Todo marchaba bien, la primera semana en la nueva casa hasta que era la hora de hacer la limpieza.
Naruto sabía que al estar fuera de su casa tenía que hacer los deberes, justo como su madre le enseñó cuando era pequeño. Sabía perfectamente que hacer, aspirar, lavar la cocina, lavar el baño; tiene una ligera obsesión por los pelos y odia verlos en el piso del baño (le dan asco), trapear, etc... simplemente aprendió a ser el perfecto "Amo de casa" 
Siendo viernes tenía tiempo, salía a las 3:00 pm y podía hacer la limpieza para tener una tarde tranquila después.
Comenzó con el baño, siendo lo que más odia que este sucio. Para ese momento Sasuke no había llegado y esperaría por él para que trapeara el piso, una tarea sencilla.

-Ya llegue... -Su olfato hizo que prestara atención, olia a jabón y sabía perfectamente que era día de la limpieza. -Perfecto, encontraste quien nos aseara la casa...

-¿Quien? -Naruto salió del baño con rastros de jabón. Sasuke lo miro extrañado. -Que bueno que llegas, ¿puedes llenar las cubetas con agua? Acabo de terminar de lavar el baño, aspiro y trapeas.

-¿Trapear? -Sasuke dejó sus cosas y obedeció, aunque no entendía por qué Naruto estaba limpiando. -¿Entonces lo tengo que hacer yo?

-Si... ¿Quien más?

-Una señora del aseo...

Hubo un silencio incómodo por un momento, sus miradas chocaban pero por primera vez en mucho tiempo no sabían que decir. Por la mente de Naruto se cruzaba la idea de que Sasuke, jamás en su vida, había tocado un trapeador. Y por la mente de Sasuke se cruzaba la idea de qué tal vez no había sido muy buena idea dejarse mimar tanto.

-¿No sabes trapear?  -Al fin hablo Naruto

-¿Tu si?

-Por supuesto, mi mamá me enseñó lo básico de la limpieza. Me lo inculco, a pesar de yo odiarlo, finalmente entiendo el por qué... es para mi bienestar, el de mi casa y el de mi pareja. ¿Nunca te enseñaron?

-No tenía por que... siempre había alguien en mi casa lavando, así que yo solo me preocupaba por estudiar.

-Bien, pues hoy aprenderás Niño mimado. Esta es nuestra casa, no tenemos criada y tendrás que hacerlo tú. -Le aventó el trapeador. -Y apresúrate que quiero ir al cine.

Esa tarde, Sasuke batalló como nunca en su vida con un trapeador y como exprimirlo para que no se manchara el piso. Por su parte, a Naruto le parecía divertida la situación, aunque frustrante porque lo hacía mal, sin embargo intentaba ayudar a su querido esposo.

-Ya pronto aprenderás de mami Naruto.

-No te autodenomines "Mami Naruto" Suena estúpido, estúpido.