Vida Cotidiana (Drabbles)

Feliz cumpleaños Sasuke

Un mes atrás. Más exactamente en una vídeo-llamada

-¡Hijo estoy muy emocionada porque ya se acerca tu cumpleaños! Mi pequeño esta creciendo tan rápido.

-No es para tanto mamá.

Ese comentario había hecho que Sasuke se sonrojara. Después de todo aunque pasaran los años ante los ojos de Mikoto, Sasuke seguía siendo su pequeño hijo menor.

-Te tengo una sorpresa. Logré pedir permiso en mi trabajo y podré estar en tu cumpleaños.

Los padres de Sasuke vivían en otra ciudad, por lo que no tenían muchas oportunidades de verse y en esta ocasión que mejor que visitarlo su cumpleaños.

-¿EN SERIO? -Naruto se metió en la videollamada y es que no pudo evitar escuchar-. ¡Eso es fantástico señora Mikoto!

-Yo también estoy emocionada de verte Naruto -Le sonreía amablemente a través de la cámara.

Y es que la relación de Naruto y Mikoto era bastante buena. Ella quería mucho a Naruto porque cuidaba de su hijito y lo hacia feliz. Cada vez que Mikoto iba a visitarlos Naruto la pasaba muy bien y podía conversar de muchas cosas con ella y sabia que esta vez no sería la excepción. Salvo porque...

-Yo también voy a ir.

Fugaku también se había unido a la vídeo-llamada y lo primero que hizo fue fijar su vista en Naruto, quien al instante se petrificó y solo atinó a sonreír nervioso.

-Las cosas en el trabajo están bastante estables así que tu madre y yo estaremos ahí para tu cumpleaños Sasuke.

-Me gustará tenerlos a los dos se los agradezco mucho.

-Nos veremos en un mes hijo, tu también Naruto.

-Claro señor aquí los esperamos -Naruto aun tenía su sonrisa nerviosa y podría decirse que hasta temblaba.

La vídeo-llamada terminó ahí. En cuanto cortaron Naruto empezó a caminar nervioso por su departamento.

-No puede ser viene tu padre. Todo tiene que estar perfecto. 

-Deja de caminar torpe, me estas mareado.

-¡No lo entiendes! ¡Dije que viene tu padre! ¡Tenemos que arreglar el departamento y que todo luzca decente y perfecto!

Decir que Naruto le tenía miedo al padre de Sasuke era poco. Incluso podría definirse como "pavor". Lo único que había en la mente de Naruto en esos momentos es que el cumpleaños de su novio fuese perfecto, no solo porque quería hacerlo feliz sino también para demostrarle a Fugaku que no había nadie mejor para Sasuke que él y esta era la oportunidad perfecta.

El mes pasó muy rápido y el 23 de julio había llegado. Esa mañana Naruto se había levantado extra temprano para asegurarse que su departamento estuviera impecable, hasta el más mínimo detalle debía ser perfecto. Unas horas después los padres de Sasuke llegaron y aun con el corazón en la boca Naruto los atendía como todo un buen anfitrión. Hasta el momento todo iba bastante bien a pesar de que muchas veces Naruto sentía la severa mirada de Fugaku sobre él, de esas miradas que dicen "me robaste a mi hijo y lo volviste gay" pero trataba de ignorarlo y seguir como si nada, si lo pensaba demasiado quizás terminaría desmayándose ahí mismo.

Ya iban todos a desayunar cuando el celular de Sasuke sonó.

-No puede ser. ¿Crees que puedas quedarte solo unos minutos? Es algo del trabajo, tengo que salir un momento.

-Pero ya íbamos a desayunar.

-Inicien sin mi, te juro que no me tardo.

Sasuke salió corriendo como alma que lleva el diablo, de no haber sido urgente ciertamente se quedaría. Naruto continuo con su trabajo de anfitrión después de todo ¿Qué podría salir mal?

-Naruto -Fugaku se había acercado a él tocando su hombro- ¿Crees que pueda hablar contigo un momento? En privado.

El rubio trago grueso. ¿Que podría querer su suegro? ¿Y en privado? Seguro iba a matarlo estaba casi seguro de eso. No tuvo mas opción que aceptar, los dos se encerraron en la cocina para hablar.

-Dígame señor, ¿qué necesita.? -Trataba de mostrar una de sus sonrisas mas relajadas o al menos tanto como la situación se lo permitía.

-La verdad...-Era la primera vez que veía a Fugaku tan nervioso, quizás estaba pensando el mejor lugar para ocultar su cadáver luego de matarlo o algo así. El propio Naruto se sentía peor de verlo así-. Quería decirte que he pensado mucho acerca de Sasuke y tu.

Oh no eso no le daba buena espina...

-Reconozco que me ha sido muy difícil todo esto. Pero quiero decirte que tras mucho pensarlo... -Guardó un momento de silencio-. Quiero decirles que tienen mi apoyo completamente.

¿Estaba escuchando bien? ¿Fugaku Uchiha acababa de decirle que lo aprobaba? Naruto no salía de su asombro.

-No ha sido fácil, créeme. Sasuke jamás habló nada de esto conmigo y he tenido mucho que pensar pero... lo que me importa es la tranquilidad de mi hijo-. Para mayor sorpresa del rubio Fugaku había empezado a derramar unas cuantas lágrimas, jamás en su vida pensó verlo así-. Quiero mucho a Sasuke y si su felicidad esta contigo entonces yo lo acepto.

Naruto tenía muchos sentimientos encontrados y es que no todos los días se ve a un hombre como Fugaku Uchiha tan vulnerable. Atinó a acercarse un poco y ofrecerle un abrazo a manera de consuelo y como las sorpresas no terminaban Fugaku correspondió a dicho gesto, permitiéndose llorar un poco más.

-Yo...no se que decir señor.

-Créeme yo tampoco sabía muy bien como hablar de todo esto pero como ya te dije, solo me importa que mi hijo sea feliz. He visto como lo cuidas y eso me demuestra que realmente te importa. -Se limpiaba las lagrimas y volvía a retomar una pose medianamente seria.

-Si hay algo de lo que puede estar seguro es que yo quiero muchísimo a Sasuke y que siempre lo estaré cuidando -Dijo con toda seguridad.

-Si hay algo que necesiten o en lo que yo pueda ayudarles bueno... no duden en llamarme -Le dio una palmada en el hombro mientras le sonreía ligeramente.

-Muchas gracias señor de verdad significa mucho para mi.

Luego de esto salieron de la cocina y siguieron como si nada hubiese pasado. Internamente Naruto estaba saltando y gritando de felicidad, al parecer por fin había sido aceptado por su suegro que era lo que más deseaba. No podía esperar para contarle todo aquello a Sasuke. 

Ese momento realmente había significado un cambio drástico y es que durante toda la visita Fugaku trataba a Naruto como si fuese un hijo más, era como quitarse un gran peso sobre los hombros y hasta el propio Sasuke lo notó. Su padre no parecía incomodo como anteriores ocasiones e incluso parecía estar mas del lado de Naruto que de su propio hijo.

-Sasuke ven un momento -Fugaku lo apartó un poco de los demás invitados- Quiero que controles ese carácter que tienes. Naruto es un buen chico y se que puedes llegar a ser muy agresivo cuando quieres y vaya que lo sé, después de todo eres mi hijo. Así que cuidado como actúas y con lo que dices.

-¿En serio me estas diciendo todo esto?

-Lo digo muy en serio.

Jamás creyó que viviría para ver el día en que su padre prefiriera a su novio en lugar de a él. Ciertamente tenía mucho que preguntarle a Naruto acerca de ese momento en que salió y se quedó a solas con sus padres.