30 días de OTP; Garycato.

✘ mimar / acariciar.

No era raro que en los días fríos y lluviosos de invierno ambos buscaran de cualquier forma darse calidez entre sí, ¿y qué mejor forma que ver la televisión mientras que en la casa que compartían no había nada más que un cómodo silencio? Lo único que importaba era que ambos estuviesen lo más juntos posible.

Justo ahora Gary se encontraba sentado entre las piernas de su pareja, recargando su cabeza en el pecho del mayor mientras que los brazos ajenos rodeaban su cintura; ambos mirando el televisor mientras no se dirigían la palabra. Podía escucharse de fondo el sonido de la lluvia haciendo contacto con los cristales de las ventanas, mientras que algunos truenos retumbaban muy a la lejanía.

Gary soltó un suspiro, algo aburrido. Dejó de prestarle atención a la televisión desde hace ya un tiempo, prefirió concentrarse en el calor que le proporcionaba el ventrexiano al estar tan cerca de él. Sonrió ligeramente al ver el relajado gesto que Avocato tenía en su rostro al mirar al frente, y cómo la luz artificial hacía igualmente que sus ojos brillaran.

De repente tuvo una idea que pronto le quitaría por completo el aburrimiento. La mano robótica de Gary comenzó a escurrirse por las piernas y cola de Avocato, siendo acariciados con serenidad, el pelaje que tenía su piel era bastante suave.

—Gary... —musitó con su voz grave y tranquila tras sentir el tacto de su acompañante, sonriendo de forma juguetona sin mirar al mencionado—. ¿Qué estás haciendo?

—¿Qué parece que hago? —rió por lo bajo, subiendo su mano con suma lentitud por su cuerpo, acariciando con delicadeza desde su abdomen hasta su pecho. Se apartó un poco de su amado para poder verlo y así usar sus dos manos para seguir con su labor de otorgarle amorosas caricias—. Trato de llamar tu atención.

—Pobre niño necesitado de atención —Una risa se escapó de sus labios mientras al fin le dedicaba una mirada a su novio, sonriéndole con gracia.

—Pero qué desgraciado...

El rubio se dispuso a pasar sus manos por los anchos hombros de Avocato, podía sentir su pelaje erizarse ante sus roces, igualmente pronto comenzó a escuchar muy ligeramente algunos ronroneos de su parte, mientras que una sonrisa enamorada se formaba en sus labios. Gary lo miró con suma ternura, acercándose a su rostro mientras que sus manos subían lentamente a sus felpudas mejillas.

—Eres lindo incluso cuando me maldices —El mayor mantenía su agarre en las caderas del rubio, sin agrandar la distancia entre sus rostros hasta el punto de que sus narices rozaban.

—¿Entonces... Te gusta que lo haga, gatito? —entre cerró sus ojos, apegándose más a su cuerpo mientras acariciaba detrás de las orejas de Avocato.

—D-Dime "gato" otra vez y... —Debilitado al ser acariciado en una zona tan sensible, lo último que dijo fueron más balbuceos que palabras entendibles, seguido de un maullido mientras que sus ronroneos comenzaban a escucharse con más claridad.

Gary sonrió con satisfacción, plantado un dulce beso sobre los labios de Avocato, el cual apenas pudo reaccionar.

—Eres tierno cuando intentas amenazarme...~