XXXIV 🍁

215 22 3
                                    

— ¿No dirás nada?—inquirió mirándome. Pero yo estaba tan nerviosa que no era capaz de sostenerle la mirada. Aparté mi mano de la suya y la coloque junto a la otra sobre mis piernas; me dediqué a observarlas para no mirarlo—. ______—pronunció mi nombre suavemente y mi alma me abandonó por un instante.

Pero no podía mantener los labios sellados por siempre, así que tomé valor y comencé a hablar.

—El día que me dieron el resultado de la facultad, quise decírtelo, pero mi mensaje no llegó contigo, me pareció extraño y pensé cualquier cosa menos la verdad... Al día siguiente me di cuenta de que me habías bloqueado—dije mirándolo unos cortos segundos en algunos momentos—, ¿por qué lo hiciste?

Jong me miró un instante, luego desvío su mirada, soltó un suave suspiro y volviendo su mirada a mí inició a hablar.

—Al principio pensé que era lo mejor que podía hacer, y aún lo pienso de esa manera. No quería lastimarte. —Miró sus manos de forma distraída—. Pensé que si cortaba nuestra comunicación sería más fácil para ti... No me importó que llegarás a odiarme por ello.

—Nunca lo haría—contesté con voz débil.

—No digas eso—murmuró llevando su mano derecha a su cuello, lucía afligido—. _____, ¿te has dado cuenta de lo diferentes que somos? Me encantan las motocicletas, a ti te disgusta el ruido que causan; me gustan los tatuajes, y debo confesar que ya me he hecho uno, a ti no te agradan del todo y no quiero pensar en lo qué dirían tus padres... Tú eres un ángel y creo que yo sería más como un ángel caído—. Llevó su mirada a mí, con ella me decía todo lo contrario a lo que salía de sus labios (o al menos eso interpreté yo). Sólo me sentía confundida, necesitaba tiempo para pensar todo lo que me decía—. Sé que es un cliché, pero es la verdad: no eres tú, soy yo.

Fue como sentir que me vaciaban encima un balde de agua fría. Nunca creí que alguien fuera a decirme eso algún día, pero me esforcé por comprenderlo y no repliqué de ello; tragandóme el dolor que me causaban sus palabras.

—Pudiste habérmelo dicho en persona—respondí tratando de que mi voz no sonará temblorosa y evitando mencionar sus peros a lo nuestro.

—Lo sé, pero si te lastime haciéndolo así, imagina cómo habría resultado si te lo hubiera dicho en persona.

Asentí, pero no estaba satisfecha con esa respuesta.

—_____ di algo, ¿cómo te sentiste? Si tienes que gritarme o replicarme algo, sólo hazlo—hablo Jong luego de que yo guardara silencio por un largo momento.

Pensaba en lo qué diría y trataba de formular bien las palabras, sentía miedo y no estaba segura del por qué.

Al final hablé.

—Luego de enterarme de que me habías bloqueado me sentí fatal, me sentía usada, no sé... y eso junto a ver los rostros de decepción de mis papás por no pasar a la universidad... Simplemente fueron los peores días. No diré que pasé por una depresión, porque creo que no llegué a eso, pero sí fue algo que me pegó demasiado y aún lo hace. —Casi lloraba al recordar esos horribles días—Sólo podía pensar que tuviste tus razones para hacerlo e intenté comprenderte.

—Espera, ¿tus papás se decepcionaron de ti?—preguntó incrédulo.

—Claro, ¿por qué no lo harían?

—______ tú sabes que hay mucha "corrupción" para entrar a esa escuela y que cuando tú presentaste, presentaron muchas personas. Tus papás y tú no deberían de ser tan duros contigo. —Él me miró serio y yo apreté mis labios como un esfuerzo para no llorar—Y quiero que sepas que nunca te usé—agregó tomando mi mano. No sabría describir el cómo me sentí después de sentir su cálido tacto nuevamente—, creo que tuve miedo, pero sí me gustaste.

❀ Glass Bead ❀ JR y tú |1° Temporada|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora