Sin Remitente | VKook

Capítulo 14

¡Treinta de diciembre!

Jungkook movió el hombro de Taehyung apenas abrió los ojos, el castaño gruñía quería seguir durmiendo pero su novio capaz estaba mas emocionado que el. Con una batalla entre seguir durmiendo y Jungkook despertandolo abrió los ojos totalmente hinchado para ver los ojos pícaros y la nariz de Jungkook encima de el. Con tantas cosas en su cabeza Taehyung había olvidado siquiera el por qué su novio tenía esa actitud. Jungkook siempre le rogaba por seguir durmiendo, pero hoy, hoy estaba muy entusiasmado.

— No me digas, ¿Volví a decir cosas raras anoche?— Jungkook negó y río mucho por la aclaración extraña de el mayor.

— Nop, no estas ni cerquita— Dijo como un niño pequeño.

— ¿No es eso?, ¿Seguro?— el pelinegro negó.

— Mejor vamos a bajar, para ver si tu memoria despistada funciona— Taehyung asintió y se puso las pantuflas para bajar las escaleras igual de rápido que el menor.

¡Oh no, un pastel de cumpleaños!— Pensó el castaño poniendo sus manos en la cabeza.

— Amor discúlpame olvide por completo tu cumpleaños— dijo asustado mientras trataba de besar las manos de Jungkook, ¿Como Taehyung podía olvidar su propio cumpleaños? Pensó Jungkook.

— No tontito— río— Hoy es treinta de diciembre, el día en que naciste tu Taehyung— El castaño se quedo en un leve shock tratando de recordar.

— Oh no puede ser— Dijo estrujando su rostro. Jungkook se sintió extrañado por la expresión del mayor— Desaproveche el día de los inocentes.

— ¿Pensabas hacerme una broma?— pregunto curioso mientras abrazaba al castaño por la espalda.

— Tal vez— río— Ven aquí— besó los labios del menor de manera muy profunda como hace tiempo ya no lo hacía, apretando su cuello de manera leve y delineando sus labios con su lengua— Gracias por el pastel, está hermoso, ¡Me haces tan feliz!— dijo con una sonrisa

Jungkook se encontraba impactado por el beso, Taehyung no era de aquellas fieras salvajes que te devoraban con un beso, era mas una fiera pacífica, de aquellas que no hacían acciones contundentes pero siempre te dejaban deseando más— Woh— fue lo que pudo decir con una O en sus labios— Eso estuvo muy bueno— Río.

— Te amo tanto tanto— Susurro arriba de sus labios para volver a besarlos de la misma manera.

— Definitivamente creo que yo vine buscando cobre y conseguí oro, ¿Quien es el cumpleañero aquí?— Pregunto antes de ejercer fuerza en su cintura para traerlo mas a el— Te deseo— Susurro arriba de sus labios mientras recostaba el cuerpo del castaño en la mesa que estaba en la cocina.

Taehyung soltó un jadeo cuando sintió la mano del menor pasear por adentro de su pijama acariciando su torso y parte de su cintura. Jungkook por su parte mordía la piel del cuello de Taehyung sintiéndose adicto a su sabor y su aroma, "delicioso" así podía definirlo. Miró fijamente los ojos de Taehyung quien apenadamente seguía esperando mas por parte del menor, mejor dicho, definitivamente quería más.

Taehyung se deleitaba mientras sentía como Jungkook contorneaba su figura con sus manos antes de sacar la prenda que cubría su torso, para luego con delicadeza sin dejar de plasmar húmedos besos por todo su cuerpo sacar la prenda inferior dejando solo en ropa íntima al mayor. Taehyung hundía sus dedos con suavidad por toda esa melena brillante y sedosa que tenía el menor, apretándola de vez en cuando mientras Jungkook lo hacía tener sensaciones fantásticas.

Fue una mañana muy agitada.

Caminaban por las calles de la ciudad, todo de veía tan ajetreado y Taehyung no podía evitar pensar en sus padres. Era su cumpleaños y estaba solo, con Jungkook pero muy al fondo se sentía culpable. Tenían sus manos tomadas e iban viendo las tiendas con luces y propagandas muy coloridas a sus alrededores, Taehyung señalaba como un niño pequeño cada vez que veía algo que le gustaba mucho o le impresionaba.