⬜16⬛

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White suspiraba completamente aburrido.

No tenía algo con que divertirse, y el de negro no había enviado nada, lo que significaba que seguía en su viaje.

Miraba por la ventana sin interés alguno, debía admitir que, extrañamente, si extrañaba a Black Hat

Clemencia se asomó en aquella oficina, y al verlo distraído, entró sentándose frente al escritorio.

-Ey.

El de blanco la miró y sonrió.

-¿Si?

-¿Extrañas al señor Black Hat?

White se ruborizó levemente.

-¿Se nota?

-Claramente, creí que lo odiabas.

-Y segun yo, eso hago.

-White, ¿Y si ya te enamoraste?

-¿Que? No, imposible

-¿Que le regalaste el catorce?

White se puso nervioso y desvió la mirada hacia otro lado.

-N-nada interesante.

-White...

-S-solo lo besé.

-Oh geez, dime, ¿Te gustó?

-Extrañamente, si, no lo sé, solo no quería separarme, ¿Sabes?

La unicornio guardó silencio para luego chillar.

-Oh, oh, ¿Y si ya tendré mamá? o no, tal vez, papá.

-¿Que te hace creer que sería el pasivo?

La chica soltó una suave risa.

-¿Y si ya te estás enamorando?

-¿Bromeas? No, es un villano, además lo odio, otra cosa, ya habias preguntado eso.

-Pero bien que lo besaste y te gustó, además, quería confirmar la información.

-E-eso...

Y no podía estar mas ruborizado, por que, la chica llevaba razón.

-T-tal vez Black Hat solo me gusta.

-¡Wuuu!

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