gran emoción

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Hoy, justo hoy tenia que volverlo a encontrar, no lo había visto en mucho tiempo, pero es por que es mayor que yo, odio eso, como me gustaría estar con él; en sus misma clases, demonios.

-hija~ te tengo una sorpresa- dijo mientras me guiaba Hasta la azotea.

-mamá! No es necesario que me...

Antes de terminar de hablar quedé atónita al observar la remodelacion que habiendo hecho en la azotea, es un rincón habían puesto un gran sofá bajo la sombra de un techado del cual colgaban unas hermosas cortinas de tul en tono rosado, esta todo hermoso, a un costado había un estante con unos cuantos libros, es lo mejor...

-MAMÁ!  DIOS MIO! ESTÁ... Está  increíble todo esto.

-lo sé, hija, papá y yo planeamos darte esta sorpresa juntos pero hoy trabaja hasta un poco mas tarde- dijo dándome un gran abrazo y un beso en la frente.

-mu - Muchas gracias, Maa~.

-y adivina a quien me encontré en el nuevo super?

-bueno, no sé, maa~ dime

-me encontré con Karla! Con su hermana y su abuela, si te acuerdas de ella, verdad?

-como no hacerlo,madre, ella fue mi mejor amiga, pero perdimos contacto desde que su abuela decidió mudarse.

-bueno, bueno, pues te tengo una gran noticia, al parecer ellas se han mudado al barrio que está a dos cuadras de aquí, no te parece eso increíble?

No podía creer lo, eso me había puesto muy pero muy feliz por fin tendré a alguien en quien confiar todo, estos secretos ya no será necesario ocultarlo. Esta sin duda ha sido la mejor sorpresa en el día de mi cumpleaños.

-pero hija, por qué lloras?

Ni siquiera me había fijado que estaba  llorando, toque mi rostro y sentí las cálidas lágrimas cayendo de mis ojos, ya no podía aguantar más la emoción.

-tranquila, hija- dijo mi madre cuando me entregué a sus brazos, sin duda eso me reconforta.

Ya es de noche, mi madre me término de explicar todo lo sucedido, me contó que karla tiene una hermana mucho mayor, que se había casado recién y como ella no quería que su hermana estuviera viviendo tan lejos con su abuela, decidió que se mudarian a su casa y su esposo estuvo de acuerdo, ya que el sabe lo que es vivir tan lejos de sus familiares. Y eso no es todo ella volverá a estar en la misma prepa, y eso suena cool, ya no sólo seré Marcos mi mejor amigo y yo, sino que tendré de vuelta a mi mejor amiga, esto no podría ir mejor.

-mañana te veré otra vez~- susurre emocionada mientras me acomodaba para poder dormir.

                             
Con las justa y logré levantarme, pensé que ya estábamos sábado, pero no, recién es viernes, aunque bueno hoy volveré a ver la, estoy super contenta.

-ay~ esto es super cansado, no quiero caminar.- hice berrinche.

Antes me gustaba todo tipo de deporte pero ahora me he vuelto una floja, con las justas y quiero caminar, pueden creerlo.
Y para colmo voy sola, ay!, ya quiero que karla camine junto conmigo a la prepa.

-hey!, ten cuidado~

-Aush!

Lo siguiente que sentí fue el tremendo golpe que me di al caer de trasero contra el pavimento, por los mil demonios, tenia que pasar esto y en un día tan bonito, por algo ya se me hacia raro que todo este yendo bien.

-te encuentras bien?- dijeron tendiendo la mano para ayudarme.

-si claro- dije con sarcasmo.

-en serio Lo siento, no te vi llegar, y pues...

-OK, todo está bien, no me pasó nada.- dije limpiando mi uniforme.

-segura?

-si!- dije alzando la cabeza.

A este Lo he visto en alguna parte, si, es del colegio, si no veía su uniforme ni cuenta me daba, creo que si me afecto un poco la caída.

-Tú...

-si, lo siento...- dijo montando su bicicleta y alejándose.

-eeeeeh~ yo que quería que me lleve...

     
Bueno, al menos todo fue bien en la prepa. Ahora si, a visitar a karla. Apenas llegué a la cuadra donde me dijo mamá, me sentí  pérdida, hubiera preguntado la dirección exacta.

-ok,  todo va ir bien,  no te preocupes Alex- dije intentado calmarme.

-creo que tendré que regresar otro día- dije desanimada.

-Alex?... Alex! Eres tú,  dios mio pero si no has crecido...- escuche que alguien dijo detrás mío.

Dios, si no fuera por esa voz. Me di vuelta y si... Es ella.

-karla!- dije tan emocionada que corrí Hasta su encuentro. Ya parece Hasta episodio de telenovela.

-[RISAS]
- wow esto si es sorprendente, haz crecido un montón.-dije

-no exageres con las justas mido 1.65.

-yo sigo midiendo 1.60..., pero algo es algo- dije riendo.

-eso si- dijo entre risas.

-ya, pero cuéntame, ¿qué ha pasado en todo este tiempo?

-Está bien, está bien... vamos, te contaré- dijo guiandome hasta su casa.

Por poco y me quedo toda la noche, y ni le avise a mi madre, esta vez si que se va a enojar conmigo, tengo miedo, jamás he visto a mi madre enojarse, bueno es la primera vez que sucede esto, espero solo me regañe.

-ya... llegué.- dije entrando sigilosamente Hasta las escaleras.

-¿A dónde crees que vas?- escuché que dijeron.

Jesús, Maria y Jose, casi se me sale el corazón.

-Hola, mamá- dije, y en cuanto vi el cucharón, si que se me tensó todo el cuerpo.

-ven al comedor, papá ya llegó.

-Está bien, maa~ - creo que por ahora me libré

En cuanto me dirigí al comedor, me inundó un ambiente super dulce, mi mamá  estaba haciendo un queque, ya me había asustado demasiado cuando vi ese cucharón en sus manos.

-hija, ven... Sé que ayer no pude darte tu sorpresa junto con mamá, pero para compensarlo...

-Qué pasa, Pa~?

-ten, este es un libro de cuzigramas, y se que te encanta.

-gracias, papá- esto no es un libro es un librotote, es mas grande del resto que esta en mi estantería.

-ya, cuéntame, ¿porqué llegas hasta esta hora?- dijo mi mamá.

Apenas lo escuche me escabullí hasta mi cuarto, ya después le contaré con más calma.

Es Pura Casualidad Donde viven las historias. Descúbrelo ahora