Metí el celular en el bolsillo y vi llegar a Kelly y samantha, que venían muy alegremente caminando y riendo.
Cuándo llegaron Kelly y samantha me tomaron del brazo y salimos, hasta llegar a un paradero, nos subimos a la micro C17, y hablamos de a adonde íbamos a ir
-bueno....¿a donde vamos?-
-no se....¿que tal el mall?-
-mmm no, es que el dinero no me alcanza para comprarme algo-
-a mi tampoco, ¿y sí vamos al cine? a mi sí me alcanza para la entrada-
-¡sii! y a mi igual me alcanza-
-entonces vamos-
Nos bajamos en tres paradas más, y llegamos al cine, vimos lo único que aún no había comenzado. Era una película llamada la casa en las tinieblas, la cual era de terror, sin importarnos compramos las entradas, aún que Kelly se veía un poco preocupada, nos sentamos en la fila del medio y comenzó la película, partió como la clásica película terror alguien mudandose a una casa.
Empecé a centir Alguien me pateaba el asiento me tenía hasta el colmo, sólo necesitaba un golpe más para gritarle que parara, supuse que era un niño porque estoy 100% segura de que ningún adulto lo haría salvo por venganza.
El golpe que necesitaba se produjo y me paré para desirle al niño que parara, abrí mi boca para alegarle, pero cuándo vi, no había nada en los tres hacientos de detrás de nosotras, extrañada me senté nuevamente en el aciento y apenas me senté samantha me pregunto sí es que tenía pañuelos, revisé en mis bolsillos, y no tenía nada, le dije que no a samantha y seguí viendo la película.
Por fin el golpeteo en mi haciento había parado y vino una parte muy buena en la película, el personaje, principal escucha una de esas clásicas canciones de niños, sólo que cantada tetricamente, se dirije al pasillo de donde viene tal música y de la habitación, de alfrente ve salír un pequeño cochesito de muñecas, sigue mirando y escucha pequeños qolpeteos, cuándo derrepente ve a un niño vestido con ropa antigua, sentado en la habitación jugando con canicas, se acerca para preguntarle la información de adonde había venido, el niño se da vuelta lo mira con una cara tetrica, y desaparece, se empieza a cortar y preander la luz, y a escuchar la risa del niño, las canicas también desaperecen, y el personaje principal sale corriendo hasta el pasillo, sigue viendo la habitación, la luz se apaga y de la oscuridad ve salir una canica de las con que estaba jugando el niño. La verdad es que me gusto mucho esa parte, es el tipo de esena que te deja rebolviendo la guata y hasta esa parte, era la mejor esena.Cuando término la película, kelly se veía muy asustada, me paré de mi asiento para decirle que no se preocupara, que solo había sido una película, aun que la verdad es que la había encontrado muy buena, en fin a eso no va el caso, apenas me paré pude sentir algo pesado en el bolsillo, metí la mano para ver que era y sentí algo redondo, lo saqué y le pedí a Samantha que lo iluminara con su celular, era una pequeña canica exactamente igual a la de la película, yo y Samantha nos miramos extrañadas y nos preguntamos como era posible que eso allá ocurrido, desidimos no desirle a kelly para que no se asustara más, la guardé nuevamente en mi bolsillo y ayude a kelly a pararse.
Salimos del cine y Samantha y yo desidimos ir a dejar a kelly a su casa ya que no estaba muy lejos, desidimos ir caminando, así yo también iría a dejar a Samantha y luego me iría a mi casa que estaba muy cerca a la de ella.
Empezamos el recorrido, kelly parecía cada vez menos asustada pero no hablaba, habían momentos en que se producían silencios incómodos, y yo y samantha tratábamos de animar el día, hasta que alfin llegamos, y kelly alfin dijo algo, un "adiós", entró a su casa apresuradamente, y nosotras nos fuimos. El recorrido hasta la casa de samantha fue un poco más entretenido, hablamos de la preocupación de kelly, y de viejos momentos, hasta que llegamos, samantha me pregunto sí es que me quería quedar a dormir en su casa, ya que como era de noche y estaba oscuro era peligroso, le dije que no se preocupara, y seguí mi caminó, empeze a tener un sentimiento de inseguridad de que debí haber tomado la oferta de samantha o irme en micro, la calle era tan oscura con un poco de niebla, y un silencio penetrante, lo único que iluminaba eran los faroles y no iluminaban mucho, el viento corría encontra mía, cuando derrepente una nota chocó contra mi, la comenze a leer desia:
Querida Emma sabías que en la noche lo único que divide el mundo de los muertos con el de los vivos es como una fina tela;
Atentamente tus pesadillas.
Comenze a mirar alrededor pensando quién podría haber hecho esa broma tan pesada, pero no había nadie lo ignore y seguí caminando hasta llegar a una plaza
-Emma- podía escuchar cómo alguien susurraba mi nombre, tenía una voz potente, ronca y escalofriante.
Los vellos de mi cuerpo no pudieron evitar erizarse. Trate de tranquilizarme, probablemente solo era mi imaginación dándome una mala pasada pero volvió a repetirse.-Emma...- no era chistoso, definitivamente no lo era. Esta vez estaba segura de que lo había escuchado. Me giré a ver si es que había alguien pero la oscuridad era mi única compañía.
Acelere mi paso de nuevo no estaba absolutamente seguramente de que ocurriera, no era posible.-Emma...- volví a escuchar, esta vez el sonido parecía provenir de una plaza, a sí que me armé de valor y camine hasta el centro de ella para ver quién me hablaba, y quién era el culpable de esa broma.
Los sube y baja empezaron a subir y bajar, otro juego empezó a girar, además las luces empezaron a fallar, tintineaban, se prendían y se apagaban, empeze a ver sombras moviéndose rápido entre los edificios les grite asustada que pararan y se dejaran ver y deprontro pararon de moverse, habían cerca de 5 sombras quietas y que lentamente se acercaban mas a mi, altas sin rostro, el viento paro, y se lleno aún más de niebla, y las sombras seguían acercándose, asustada salí corriendo de ahí lo más rápido que pude, corrí y corrí con todas mis fuerzas, hasta que choque con alguien que iba en mi misma dirección, el o ella empezó a correr tras de mi
-¡tranquila!-
Extrañada, no se que me hizo parar, pero su voz me transmitia confianza y preocupación hacia mi, el se me acerco, claro que esa voz no era de un ella era de un el
-¿te sientes bien?-
-no, tengo miedo-
-¿de que?
-no se, solo ocurrió
-¿que te pasó?
-larga historia, pero resumiendo, venía caminando sola, después de haber dejado a mi amiga en su casa, cuando el viento me trajo una nota-
Se la mostré y seguí contando la historia
-bueno no le dí importancia hasta que llegué a una plaza, escuche que alguien dijo mi nombre y me aceque para ver, empezaron a fallar las luces y me vi rodeada por cerca de 5 sombras que se iban acercando cada vez más a mi y luego salí corriendo-
-¡wow! sí me ubiese pasado eso ubiese salido corriendo antes de entrar a la plaza, por cierto me llamo Jeremy-
Extendí la mano
-Emma-
-por cierto ¿cuántos años tienes?-
-17 ¿y tú?-
-18, ¿quieres que te acompañe hasta tú casa?
-sí claro, por que no, ¿en que lugar estudias? nunca te había visto por aquí-
-bueno ¿conoces la escuela George college?-
-¡si claro! yo estudio ahí-
-bueno, a un par de cuadras, está mi escuela, Mountains school-
-genial, he escuchado que es muy buena escuela-
Seguimos hablando, hasta llegar a mi casa la verdad, el era muy agradable, yo le di mi número y el el suyo
-ya está bastante oscuro ¿no quieres que te valla a dejar en el auto de mis papas?-
-no, no te preocupes, mi casa esta en la calle de al lado, ¿nos vemos otro día?-
-sí claro-
-bueno, ahora me tengo que ir, adiós-
Le dí un abrazo, me despedí y entre a mi casa.
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Con las sombras
ParanormalEmma Beale es una chica de 17 años de edad que asiste a la escuela George school. Cuando llega su primer día de clases algo cambia y empiezan a ocurrir cosas extrañas en su vida diaria.