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Capítulo 37. El Snake Staff.

Crowns: El Snake Staff.

Las tres princesas y las dos villanas, llegaron a la habitación donde estas últimas dormirían.

—Bienvenidas a su alcoba.— Dijo la hija del Hada Madrina abriendo la puerta para que Brooke y Hazel entraran.

Las dos villanas observaron el lugar con el ceño fruncido y una mueca de asco, definitivamente los dormitorios de Auradon no eran nada del gusto de las chicas de la Isla, pues con los hombres era totalmente diferente. Cuando Harry y Carther llegaron a la suya, se quedaron asombrados por la cantidad de chuches y videojuegos que había en esta, tal y como Jay y Carlos lo estuvieron en su primer día.

—Agh, completamente asqueroso.— Murmuró la castaña/azul al ver las sábanas, cojines, cortinas y demás cosas rosas que habían en el lugar.

Roxy, Emma y Jane se miraron entre sí ante eso.

—Sin duda tienen pésimos gustos aquí,— Siguió la hija de Jafar murmurando igual antes de volverse a las princesas.—¿Podemos cambiar algunas cosas para que se vea menos... de niña fresa?

—Claro, si eso les hace sentirse más cómodas.— Contestó la hija de Belle con una sonrisa nerviosa.

—Genial.— Dijo Hazel acercándose a la puerta.—Si eso es todo nos vemos el lunes.

Empujó la puerta para cerrarla al tiempo en que Jane notaba sus intenciones y hablaba.

—Pero aún tengo que...— La mini hada no pudo terminar la frase pues el portazo se oyó por el pasillo.

Jane se volvió a la princesa del reino mirándola sorprendida y a la vez confundida.

—Dales tiempo, cariño.— Dijo Roxy poniendo una mano en el hombro de Jane.—Así iniciaron los chicos, y míralos ahora. Como dice tu madre: «el bien está dentro de todos».

La hija del Hada Madrina se encogió de hombros.—Supongo que tienes razón. Como sea, debo irme; Ally me ayudará con mi ensayo sobre Wonderland en la biblioteca.

—Nosotras también, sesión de fotos para la nueva edición de "Auradon Times".— Dijo Emma.

—¿Nos reuníamos para comer en el jardín?— Preguntó la castaña-rubia, a lo cual sus dos amigas asintieron.

[...]

La noche había caído en el reino de Auradon, una villana de cabello castaño-anaranjado se removía en su cama mientras se mordía el labio nerviosamente. Eran alrededor de las 11:33 de la noche, y desde que las tres chicas de Auradon la habían dejado a ella y a Hazel en el dormitorio, solo había tenido una cosa en la cabeza.

Encontrar el cetro de su padre.

El resto de la tarde se había dedicado a investigar en la computadora que la escuela les había regalado donde se hallaban los artefactos mágicos actualmente, descubriendo así el Museo de Historia Cultural de Auradon, ubicado a unos 3,7 kilómetros de la preparatoria.

Se sentó en su cama para colocarse sus botas tratando de no hacer ruido y no despertar a su compañera. Se levantó completamente y tomó su chaleco de la silla del escritorio. Dio una última mirada a Hazel para comprobar que dormía y se acercó a la puerta a pasos algo lentos y silenciosos; pero antes de que pudiera tomar la manija, una voz la hizo sobresaltarse.

—¿A donde vas?

Se giró precipitadamente encontrándose con su amiga semidiosa.

Ella quedó perpleja.—¿Cómo es que...?

—Te hice una pregunta Brooke.— Interrumpió la hija de Hades cruzandose de brazos.—¿A donde vas?

Brooke abrió un poco su boca sin aún decir nada, no tendría por qué ocultarle algo Hazel ¿verdad? Después de todo, ambas eran compañeras de robo además de mejores amigas.