Kuroshitsuji: Diabolic Doll

¡Ayúdame!

-¡¿Que demonios fue eso?!-

-¡¿Que pasó ahi!?-

-¡Es la casa de los Smith! -

-¡Hay un incendio!! -

Los gritos de los vecinos se escuchaban por todo el barrio, las calles se llenaban de una multitud preocupada y curiosa quienes rodeaban aquella casa que en la planta baja había cogido fuego. La joven Lilly llegaba del insti. y asustada se acercaba corriendo siendo detenida por los policias y bomberos que apagaban dicho fuego.

-¡¡¿Que paso?!!.. ¡¡Mi tia!..¡Mi tía deve estar dentro! - la pelirroja gritaba desesperada forcejeando el agarre de los policías.

-¡Calmate pequeña, todo estará bien!- intentaba calmarla uno de los bomberos. Las lágrimas no tardaron en salir de sus grandes ojos azules al ver como el cuerpo tapado de su tia era subido a la ambulancia en una camilla. La chica subió con la ayuda de los bomberos y con prisa tomaban rumbo al hospital.

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-¡Vine lo más rápido posible! - decía la rubia mientras se acercaba a su entristecida ahijada que acompañada de una enfermera no dejaba de llorar.

-Llamaré al doctor - se alejaba la enfermera dejandolas a solas en el vacío pasillo.

-Todo estará bien cariño. ¡Mira, te traje tu muñeco!- la chica abrazó aquel muñeco y se acurrucó en el pecho de su madrina. Poco después, el doctor salió junto con la enfermera.

-La señora Alice se pondrá bien-. Ambas dieron un suspiro de alivio. -Aquél incidente fue provocado por un microodas que dejó encendido por un descuido. Partes de su cuerpo al igual que su cara fueron quemados pero un especialista se ocupará de eso - ..

Lilly pov.

Después de aquella explicación dada por el médico, ambas entramos a la habitación y ahí estaba mi tía, con la cara vendada por completo en donde solo se podían apreciar sus castaños ojos y los labios.

Evelin: -¡Eres una descuidada! ¿Cómo puedes dejarte el microondas encendido? - la regañaba en un audible susurro.

-No fue un descuido, yo ... solo lo encendi y ... -titubeaba mientras miraba de reojo al muñeco.
-Empezó a echar chispas y explotó-.

-Te dije que lo botaras. Ese microodas tenía el cable pelado! - seguía mi madrina con los regaños.

Después de casi dos horas acompañando a mi tía, fui a casa en busca de mis cosas para mudarme con mi madrina mientras que la tia Alice tendrá que permanecer en el hospital por un tiempo.

-¿Como es posible que el muñeco no se quemó si lo dejé en la cocina? -. Lancé a Ciel en la mecedora que se encontraba en la habitación donde me hospedaria y me tiré en la cama.

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-¿¡Ciel!?-.

-¡Abuelo!- gritaba asustado un niño de pelaje azulado con lágrimas en los ojos.

-¡Sal de aquí!. ¡No te acerques!- gritaba la voz de un señor mayor.

En los pasillos de una enorme casa bañados con charcos de sangre, yacía en el suelo cadáveres de personas acesinadas quienes parecían sirvientes por sus vestimentas. Entre ellos un hombre trajeado abrazado a una mujer rubia.

-¡Padre! ... ¡Madre!- gritaba la voz de un niño.

Una mansión bastante grande ardía en llamas por todas partes.

-¡Tienes que ayudarme Lilly!- era la voz de un adolescente.

Continuará ...
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