La rubia Astrid

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- Iremos con mi amiga Astrid, ella fue de las primeras personas que conocimos los 4 para alcanzar fama. La última vez que la vimos fue el año pasado; la he extrañado.

- ¿Y es de fiar?.

- Claro, ven; te hará bien tener una amiga, ya sabes para hablar de mujer a mujer ¿no crees, Eva?.

- Pero John...yo solo quiero hablar contigo...

- Ven, vamos ya.

Tomamos un autobús y en el camino iba escribiendo en mi diario. Sentía que habían pasado años de no usarlo. John se entretenía viendo el paisaje, sonreía y a veces fruncía el ceño. Hasta haciendo algo tan común como ver por la ventana parecía arte.

Querido diario
Ahora vamos con esta chica Astrid, amiga de John; dice que los 4 la conocen y que fue la prometida de Stuart cuando él vivía.

John perdió a su madre, y a su gran amigo; una vez mi mamá me dijo "si superas la muerte de una madre o un padre podrás superar todo en la vida" no podía estar más en lo correcto, perder a mi mamá me cambió la vida, fue difícil al principio pero al menos así conocí a John; compartíamos el mismo dolor.

El paisaje es moderno y rústico a la vez. Sobresalen bares y gente viendo de acá para allá ansiosa de escuchar a los clubes y presenciar a alguna banda.

Las prostitutas no se separaban de sus esquinas esperando clientes, comencé a preocuparme ¿y si John me engañaba con alguna de aquellas? No podría soportarlo...

En un país distinto, sola, con el corazón roto, no por favor.

Mamá dame fuerza y ayúdame a poder con esto: Vivir sola con el gran John Lennon.

- ¡Hemos llegado!.- Exclamó feliz el castaño.

Bajamos del camión y caminamos una media calle, la gente tenía un aspecto muy exótico y moderno para ser 1965.

- Aquí es.- Anunció mirando una casa blanca con toques café de puerta de madera. Se veía un hogar conservador ¿Quién diría que allí habitaba una mujer joven, fotógrafa, artista, y condenada a vivir el restos de sus días sin el hombre que ama?.

John dio tres toques a la puerta y una chica de facciones alemanas y bonita, de cabellos rubio casi platinado y hasta los hombros abrió.

- ¡Astrid! Hola.- La saludó Lennon.

- Hola, John ¿a qué se debe tu visita?.

- Dejanos pasar y te explicaré.

Entramos y era una casa digna de un artista, pinturas, fotografías, lienzo para pintar, cámaras y demás cosas de arte.

Vi fotos de un chico guapo con lentes obscuros y otras de él mismo sin los anteojos pero en un fondo blanco, supuse que él era Stuart.

Me acerqué a una de las fotografías y lo miré detenidamente. Ojos pequeños y de mirada dormilona, boca delicada, era como un James Dean por las prendas de cuero; un típico chico de los 50s y muy pero muy guapo, Stuart Stucliffe, avanzando por la casa se veían fotos de él con sus obras de arte.
Era muy talentoso ¿cómo puedes tener un futuro por delante y que en un segundo la vida se acabe?.

- Oh, el es Stu..- Dijo Astrid detrás de mi.

- Lo siento mucho.- Dije abrazándola.

- En sus cumpleaños prendo una vela...- confesó con tristeza.

- Yo soy Tn Fuller, novia y esposa falsa de John.- Dije sonriendo.

- ¿Novia y esposa falsa, John?.

- no, no, solo esposa falsa; novia si es.- Aclaró.

- Encantada.- Sonrío la rubia.

- Gracias por recibirnos.- Agradeció el castaño.

- ¿Y los demás? - Preocupó ella.- Saben que están aquí?

-  Solo saben que nos fuimos, más no a dónde.

- ¿Y por qué escaparon?.

- Porque me enamoré de Tn.

- Vaya.- Se sorprendió.- Eso es amor

Groupie (Beatles y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora