CAPÍTULO XIV: Al fin

3.2K 472 102
                                    

     POV's Beam.

          No pensé que convencer a Forth de traerme a esta expedición sería tan difícil, se negaba rotundamente, jodido alfa sobreprotector. Muchas veces le he repetido que omega no soy, no soy débil, puedo resistir más cosas y sé cuidarme bien, no se tiene que preocupar tanto. Y es que luego de 10 años de relación, y dos de casados, le han convertido casi mi guardaespaldas, agregando a eso, su profesión, es peor aún.

        Ahora bien ¿Cómo lo convencí? Hay dos opciones:

        Si su respuesta fue, hablando seriamente que si encontramos a Can, no nos temería, pues me conoce y podría darle cuidados médicos desde el primer momento.

        Si su respuesta fue: con mucho sexo y una buena felación.

         Los primeros son muy inocentes y los segundos tienen toda la razón del mundo. El sexo puede lograr cualquier cosa. Como dejarme casi inválido, por ejemplo. Pero con dolor y todo, aquí voy, junto a mi alfa, en esta furgoneta de seis puestos blindada. 

        Por otro lado, Kit sí se tuvo que quedar. Si Forth me sobreprotege a mí, siendo beta. Imagínense Kit que es omega. Tsundere, pero omega al fin y al cabo, Can me recuerda tanto a como era Kit de más joven.

—Ming está tanteando la zona, yo iré a por N'Pete a la comisaría, y ustedes se encontrarán con Ming para seguir buscando a Can – Korn reafirma el plan, asentimos, espero que lo podamos encontrar. –

        Paramos frente a la comisaría y bajamos, Korn se adentra en el lugar, mi Forth se sienta de conductor y yo de copiloto. Le marco a Ming, llegó el momento.

POV's Ae

         Nos miramos en un tenso silencio, el alfa vestido de traje golpetea el piso con su pie nervioso, había desatado un poco su corbata y abierto los primeros botones de su camisa, se asfixiaba, lo miro con el ceño fruncido, no ha dicho nada desde que llegó hace escasos segundos. Respira fuerte y finalmente habla.

—¿Qué significaba ese mensaje de P'Forth?

         Mamá llega con dos vasos de agua y nos los entrega. Agradecemos inclinando la cabeza y nos sentamos todos en la sala, P'Preya había convencido a Lay de ir a descansar un poco.

—Ya saben quien tiene a Pete, está en comisaría ahorita. Los P' van en camino. – Explico lo más calmo que puedo, sé que la noticia es más beneficiosa para mí que para él. —Todo este tiempo, Pete estuvo con Can.

—¡¿Qué?! – Casi grita y lo entiendo, tiene los nervios de punta, el vaso con agua en sus manos tiembla. –

POV's Tin

          Cuando salí casi volando de esa cena sentía que la pastilla no había hecho ningún efecto, me excuse torpemente diciendo que la madre de Pete me necesitaba y me escabullí entre la marea de gente, sé que luego debo dar explicaciones, pero ahora es lo de menos.

           Al volante manejaba como si me persiguiera el mismo demonio directo al infierno, aflojé la estúpida corbata y saqué los primeros botones, encendí el aire acondicionado. Tenía tanta adrenalina, que empezaba a sudar en exceso.

           Me salté semáforos en rojo y varios altos, esquivé peatones y perros callejeros, pero llegué rápido a esa casa y toqué tratando de no tumbar la puerta, me abrieron de inmediato.

           Y aquí estoy ahora, de pie, frente al Programa Thai, alias Ae y con ambas madres de los implicados, en rotundo silencio tenso. Miro la hora, pronto serán las 10pm y no tenemos ni una sola noticia más actualizada.

Necesito a mi (NO) omega - TinCanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora