14- La última noche. -

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14:
-La última noche. -

Esta era la última noche del carnaval, este era el día en el que mis amigos habían sido enterrados, este era el día en el que mi furia había sido disparada al aire.

Unos estúpido, los cuales ya conocía estaban tratando de tocar a mi hermana a mi hermanita que en unas horas estaba por cumplir sus 15 años, inmediatamente sentí un cosquille sumamente agradable recorrer mi espina dorsal, sentía la energía que había tomado del agua correr por mis manos y brazos.

Antes de que pudieran seguir atocigandola me acerqué y le quite al tipo que estaba frente a ella, este la tenía acorralada su mano estaba al lado de su cabeza y ella mantenía la mirada baja, mientras el tipo que conocía como Eros se trataba de acercar a su rostro a ella le hablaba con susurros, aunque yo por alguna razón podía escucharlo y a Lia sollozar, los demás solo se reían y miraban la escena.

Tomé a Eros del cuello e hice que su cuerpo volara y se estampara contra la pared, me puse de espaldas para hacer un intento, no mejor dicho para proteger definitivamente a Lia de estos tipos. Sentía un frio agradable recorrer mi cuerpo, llenarme de energía.

-Quiero que vayas directo a casa. -hablé neutro refiriéndome a Lia.

-No quiero dejarte aquí -susurro entre lágrimas.

-No te lo pregunté, te lo estoy ordenando.

Al terminar de decir eso vi como los demás empezaban a venir contra mi, yo sabía pelear, tenía experiencia en eso, cuando me juntaba con Raúl y los demás nos metíamos en muchos líos, pensábamos y terminabamos detenidos. No fue gran problema para mi, los acabe a cada uno, podía ver que ellos tenían más fuerza de la que aparentaban, pero yo no me quedé atrás, saque fuerza que no sabía que tenía hasta ahora, podía sentir más poder del que creía tener, la fuerza era tan potente que era similar a la de ellos, pero, como era eso posible? Acaso ellos eran como yo? Los deje a todos en el piso golpeados y  chillando. Pero sentí una puntada en la cabeza, y un pitido, pero cuando recobre la razón sentí un muy fuerte golpe en la cabeza que me causó mucho dolor que por poco hizo que perdiera la conciencia, caí al suelo al perder la estabilidad, luego volví a sentir un nuevo golpe en la cabeza que hizo que mi cabeza diera vueltas, traté de pararme, sintiendo que aunque lo hiciera no podía ponerme de pié, sentí un nuevo golpe y dolor invadirme, habían golpeado mi boca de una patada, eso hizo que volviera a a caer al suelo pero esta vez boca abajo.

-Ya no te crees tan rudo, verdad? -respiraba agitado, hablaba entre dientes y con rabia.

Sin embargo yo esta sumido en mi oscuridad, repentinas imagenes venian a mi cabeza como balas a perforarme, traté de proteger mi cabeza con los brazos y mis costillas con las piernas, habían venido a golpearme y trataba de que no me dañaran los más posible, pero varios golpes fueron en mi cabeza, eso provocó que un pitido ensordecedor entrara por mis oídos y mas imagenes volvieran a mi cabeza, una chica, la chica, la de mis sueños, eran como recuerdos olvidados, recuerdos que nunca viví, recordaba cuando tomaron la foto que encontré en el cuaderno, recuerdo cuando hicieron los dibujos, también recuerdo cuando ella misma me regaló el collar con la medalla para después ir tras un hombre, después veía al mismo hombre enfrentar a una mujer, pero que luego ella misma se volvía salvaje y la cola de su vestido se transformaba en una cola que luego se dividía en nueve, ahí es cuando veía la caja de plata, la habían encerrado dentro de ella, o mejor dicho no a ella sino a su espíritu, recordaba la noche del baile de máscara, y cuando éramos niños, en todos los recuerdos estaba ella, desde pequeño, hasta adulto, aunque en una parte de los recuerdos ella desaparece, pero los reencontramos después de mucho, y luego algo que me molesta y parte mi corazón, o al menos eso parece ahí mismo, ella y alguien más, al cual no puedo verle el rostro, pero ambos se estaban besando... el recuerdo inmediatamente se esfumó, dejé de pensar, dejé de escuchar, dejé de sentir, por un momento dejé mi cuerpo a su suerte.

Pero luego, escuché una voz.

-Espero que resistas.. -susurraron cerca de mí.

Sentí una especie de cosquilleo eléctrico  invadir cada parte de mi cuerpo, desde mi cabeza hasta mis pies, desde la punta de mis dedos hasta mi pecho, como si algo que estaba esperando hace mucho tiempo hiciera contacto con mi cuerpo, luego senti algo tibio en mi mejilla, estaba seguro que se trataba de una mano. Su mano.
Luego escuché más voces pero sonaban distorcionadas, sólo podía escuchar la voz que estaba cerca de mi, la voz de una chica.

-De todos modos iba a morir, le dieron una paliza hasta dejarlo agonizar... -parecía decepcionada.

Pero volví a respirar, sentí un fuerte dolor en las costillas, el líquido tibio dejo de caer detrás de mi cabeza, sentí todo malestar fuera de mi cuerpo, me sentía bien. Sentí retirar su mano de mi mejilla.

Podía escuchar voces a lo lejos, pero las escuchaba.
No lo comprendía, que había ocurrido? Traté de abrir los ojos, hice un gran esfuerzo por ello y cuando apenas lo pude hacer vi unos ojos completamente diferentes a los míos. Mis labios se entre-abrieron, ya que estos brillaban con intensidad, uno era de un color amarillo y el otro era de color azul, pero luego su brilló se fue poco a poco hasta volver a un color normal, el cual no llegaba a ver, pero estaba segura de que uno era azul y el otro marrón. Pude sentir sus dedos rozar con mi pecho, sentí un fuerte tirón, me había quitado el collar.

-Si nos volvemos a ver, lo tomaré como que tú eres mi destino y te devolveré esto -levanto la cadena entre sus dedos aunque yo no podía dejar de mirar sus ojos. -Hasta el momento, mantente con vida. -un quejido salió de mis labios y ya no pude mantenerme despierto, mis ojos se cerraron solos y me fundi en mi propia oscuridad.

Dragón Blanco.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora