16- La chica de ojos brillantes. -

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-La chica de ojos brillantes. -

Escuchaba muchas voces a lo lejos, y un pitido ensordecedor que se hacía cada vez más fuerte, hasta que pude abrir los ojos poco a poco, hasta que pude ver mejor, el pitido se fue y las voces se fueron aclarando, mi cuerpo se sentía cansado, pesado, sin ganas de reaccionar, pero eso fue por unos minutos. Cerré los ojos al sentir las voces más cerca, entraron a la habitación y sentí algo húmedo y frío en la frente y mejillas.

-Debo ir a contactar a Minho, la señal se perdió, y Lucas esta despertando en su cuerpo, creo que el ya paso a la fase dos, y además, Aysel ya está aquí, vino desprevenida, se coló entre en el grupo.

-Bien, deberías ir. Yo lo pondré al tanto de todo, debe estar muy confundido.

-Ya lo creo. Espero que Aysel le muestre un mundo mejor, ya ha sufrido mucho, y él no tiene la culpa de nada...

-Ella no es como Aysel, ella es diferente, ella se llama Madeleine... Vamos, mañana estará mejor, debe ir a clases. -Sentí un peso levantarse de la cama, y luego la puerta ser cerrada, ahí fue el momento en el que volví a abrir los ojos, los recuerdos de la noche pasada vinieron a mi mente como flechas al igual que los recuerdos que había tenido durante esos golpes, traté de levantarme pero el pitido en mis oídos volvió y se hizo más fuerte hasta que volví a recostarme, esperé a que cesara hasta que me quedé dormido.

(...)

Al día siguiente me levanté un poco temprano para poder darme una ducha, me quedé al menos media hora, el agua recorría mi cuerpo y sentía como la energía venía y el cansancio poco a poco se iba desvaneciendo.

Mientras me bañaba trataba de recordar quien me ayudó esa noche, no recordaba ningún rostro en especial, sólo una voz, "Si nos volvemos a ver, lo tomaré como que tú eres mi destino y te devolveré esto. Hasta el momento, mantente con vida." Era la voz de una chica, pero no recuerdo su rostro, no tenía puesto mi collar y no creo que me lo hayan robado, ella tenía mi collar? Quizás a eso se refería con devolver algo.

Salí de la ducha, mi espalda se veía un poco roja por el agua caliente, algunos mechones caían en mi frente por el peso del agua, aún así me seque y me vestí, trate de secar lo más que pude mi cabello hasta que apenas lo tuve húmedo, en el camino se secaria por completo o al menos un poco más, tomé mi celular para guardarlo en el bolsillo de mi pantalón y la mochila la cual deje caer en mi hombro, salí para desayunar y también para saber si me contarían algo sobre la charla que hubo en mi cuarto anoche.

-Buen día. -saludé sin darle mucha importancia a las miradas que me dieron.

-Bueno, de bueno no tiene nada este día... Que pasó anoche, Paxton?

-No pasó nada -lo pensé por un momento, arreglaría las cosas con mi hermana yo mismo, hasta que ambos contaran sus ideas -Me quisieron robar, me defendí y...

-Antes de eso a donde fuiste? -me quedé cayado recordando el funeral de Simonn y Timoteo. -Te fuiste sin avisar y saliste como un loco, estábamos preocupados y no volvías hasta muy tarde, tu hermana corrió desquiciada hasta aquí diciendo que te habían golpeado y estabas en problemas. Después de que esa chica vino, vuelves a meterte en problemas Paxton!

-No me metí en ningún problema! -me levanté de la silla sin tener ganas de desayunar -Sólo fui al funeral de dos chicos que alguna vez fueron mis amigos y los tuve que dejar de lado para conseguir un futuro estable. Eso pasó. Luego salvé a una chica de que la acosaran más de lo que ya lo estaban haciendo!, que tiene eso de malo?! Dije que volvería y eso hice! Feliz?! -tomé mi mochila y la deje caer en mi hombro, tomé una tostada con mermelada y me fui, cerrando la puerta tras de mi en un golpe fuerte... me van a regañar por eso... pero después escuche nuevamente la puerta ser cerrada solo que en un golpe más suave.

-Estas bien? -preguntó Lía cuando estuvo a mi lado.

-Yo si y tú? -pregunte molesto -Por qué no me dijiste que ese imbécil te molestaba Lía?! Sabes que podría haber acabado con él! -voltee a enfrentarla.

-Como podría decírtelo?, viste como terminaste!, aunque no tengas ni un sólo golpe, se que te golpearon!

-Sólo me desmaye! No me hicieron nada! Sólo tenías que decirme y ya Lía! -sin esperar respuesta alguna seguí con mi camino hasta llegar al Instituto. Llegaba un poco tarde, en menos de 15 minutos iba a tocar el timbre y me faltaban unas 5 cuadras para llegar.

5 minutos antes de que el timbre sonara, me quedé quieto en un sólo lugar, me sostuve de la pared y apoyé mi hombro en ella para mantenerme de pie. Sentí el pitido en mis oídos otra vez, y sentí mi cabeza dar vueltas, sentí la miradas de todos, pero en realidad, no era que me miraban a mi, sino detrás, al llevar mi mirada hacia la misma dirección mi vista se torno borrosa y el pitido se intensificó hasta que se calmó de pronto, mi vista se iba mejorando pero una imagen, un recuerdo, se interponia entre la realidad y el recuerdo, como si tuviera un déjà vu hasta que poco a poco la imagen de la realidad se fue aclarando, cuando al fin la imagen fue clara, pude concentrarme en sus ojos, no podía dejar de verlos, uno era de color azul y el otro de color marrón extrañamente encantador.
Por alguna extraña razón muy en el fondo, me sentía triste y feliz de verla, como si la hubiese esperado todo este tiempo, cuando en realidad es la primera vez que la veo, a excepción de mis sueños que era diferente, sus ojos, su cabello, toda ella era diferente pero al mismo tiempo igual, contradictorio lo se, pero asi lo veía y lo sentía.

Ella me sostuvo la mirada sin problemas, parecía como si me conociera y a la vez no, paso por mi lado, y luego quito la mirada para seguir con su camino junto a 3 chicos más. Ella había sido la chica de anoche? Quien, me salvó?..

Dragón Blanco.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora