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Se aproximaban las 8 de la mañana, las hojas caían de los árboles, correspondientes al otoño que estaba por llegar, acompañadas por algunos charcos de agua que se habían formado por la lluvia de la mañana en el patio de el edificio en el que un castaño Huening-Kai estaba tomando pacíficamente un café, no podía negar que definitivamente el otoño era una de sus estaciones favoritas, perfecto para quedarse en casa durmiendo, o en todo caso, ir a la biblioteca por un libro, de esos que a el y a su madre le encantaban, en los que solamente hace falta ver la portada que ya sabes que te va a encantar sin duda alguna....si tan solo su madre estuviera allí.

*llamada entrante de: Taehyunie*

~Diga?~

~Kai estoy aburrido~

~Y acaso yo soy tu payaso personal?~

~Pues tienes cara, pero ese no es el punto, quieres ir al centro con Yeonjunie y conmigo?~

~Quiero ir a la biblioteca, pregúntale a Woozi, tal vez quiera~

~Vamos niño tonto sé que quieres ir~

~Tengo cosas más importantes que hacer que aguantarte a tí corriendo por todo el centro~

~Eres un amargado Huening Kai Kamal, ojala te diviertas sin mi, adiós~

*fin de la llamada*

En realidad sí quería ir, y deseaba ir ya que la mayoría de sus días domingos se basaban en nada más ni nada menos que ver por la ventana de su apartamento, esperando que por la calle llegase de vuelta de las compras, en su bicicleta roja, esa bella mujer la cual el siempre amó más que a nadie, con su bello cabello negro y una larga bufanda azul, ambos contrastando con su blanca piel y unos hermosos y profundos ojos color café.
Lastimosamente esa rutina había acabado hace apenas tres años, el podía lidiar tranquilamente con todo, pero obviamente tratando de disminuír el dolor que aquello le causaba, esa sería su última opción antes de caer en la profundidad de sus pensamientos, y lo últimos de Kai quería, era volver a recordar los bellos momentos que aquella mujer le había regalado con tanto amor, después del abandono que sufrió por parte de su padre ella fue quien luchó en todo momento con tal de que tuviera todo lo necesario para ser feliz, le brindo todo lo que una madre hubiera dado por un hijo, hasta incluso su última boconada de aire...

....Y ahora los reportes del clima, los dejo con mi compañera Kiang Me....

Había olvidado el televisor prendido, así que fue a apagarlo, pronto debía irse, en realidad no debía, pero de vez en cuando solía salir a caminar en busca de algo para pasar sus fines de semana, a veces era una cafetería cerca de allí, otras veces era el supermercado, debía hacer las compras para la semana, otras era un parque de juegos en el cual simplemente le gustaba ir allí para dibujar bajo los árboles los calurosos días de verano, aunque el frío no ayudaba con eso, así que descartó la idea, finalmente decidió caminar, simplemente caminar, sin rumbo alguno ni idea de lo que podría hacer el resto del día,simplemente agarró algo de dinero, una manzana, el teléfono y sus llaves, con esto y algo de pereza salió de allí con la esperanza de encontrar algo interesante en aquél pequeño pueblo de Anyang.

Realmente que allí no había nada interesante por hacer, prácticamente a los 5 minutos de salir de casa había deborado su verde manzana, ya agotado y sin nada que hacer decidió tomar un bus e ir al centro, tal vez por esas casualidades se encontraría a Taehyun y a Yeonjun paseando por ahí; Ya en parada de autobuses se sentó a esperar, junto a el se encontraban dos hombres charlando, un joven más alto que el usando su celular y una ancianita sentada junto a el, el próximo autobús se supone que pasaría a las 09:30 de la mañana, su reloj apuntaba quue apenas eran las 08:45, pero no quería gastar su dinero, así que no le quedó otra solución que esperar espectante a que llegue el autubús.

˚₊· ͟͟͞͞➳❥My Flower*ೃ𝕊𝕠𝕠𝕜𝕒𝕚Donde viven las historias. Descúbrelo ahora