"Los olvidados"

Parte 13: Quincy

13-Quincy

**Byakuya**

Como si no tuviéramos bastante con los conflictos que suelen surgir a menudo en la Sociedad de Almas, ahora tenemos una amenaza activa que ningún shinigami nos hubiéramos pensado jamás. Nuestras propias zanpakuto se han revelado gracias al poder de otra espada sin dueño llamada Muramasa. Desde que vivo en el Seiretei, soy consciente de los errores del pasado que mi abuelo y otros capitanes no pudieron enmendar, por lo que me toca a mí estar al frente de esta situación.

Frunzo el ceño al igual que mis camaradas cuando vemos aparecer a las zanpakuto materializadas ante nosotros con ganas de pelear. Siento la presencia de Tensa a mi lado y como el muchacho tiembla al ver salir de mi espada a mi querido hermano.

-Madre....- retengo a Tensa para evitar que vaya a por Sen y justo cuando Muramasa resquebraja el suelo donde estamos apoyados, me elevo en el aire seguido por Renji y Rukia.

-¡¡Capitán, cuidado!!!- desenvaino mi katana para chocarla contra la de Sen sin poder ver la expresión de su rostro tras la máscara. Empiezo a pelear con él buscando una alternativa para no tener que derrotarle y abro los ojos justo cuando Tensa se pone en medio de ambos.

-¡Madre detente!! ¿No me reconoces?-

-¡Espárcete!!- Sen libera el shikai y agarro a Tensa justo a tiempo para usar mi shunpo y apartarle de la batalla. Mi hijo Haruka aparece a mi lado y le dejo a Tensa con él para que no se separen.

-Padre...-

-Quedaros aquí, yo me encargaré de Senbonzakura-

-¿Cómo ha podido materializarse? Encima...no sabe quien soy....-

-Está bajo el influjo de Muramasa. Tensa, retírate con Haruka ¡rápido!-

En que mal momento me toca pelear. Por suerte mi padre sigue velando por el cuerpo de Starrk y Ukitake sigue manteniendo a otros arrancars heridos tras la batalla final contra Aizen.

-¡Taicho!!!- oigo la voz de Renji en la lejanía advirtiéndome de que una ola de pétalos está viniendo hacia mí. Termino cayendo dentro de las alcantarillas del Seiretei y empiezo a luchar contra Sen hasta que le lanzo un kido y eso parece despertarle.

-Ugh!....amo....-

-¡Sen! ¿Me reconoces?- corro hacia mi hermano arrodillándome frente a él y veo como la máscara se hace añicos revelándome ese rostro idéntico al mío. Sen me sonríe al abrir los ojos y ambos nos abrazamos.

-Lo siento nii-san....no sé que me ha pasado...-

-No te preocupes, ya has recobrado el juicio-

-He atacado a mi hijo....oh hermano, Tensa ha crecido tanto...-

-Sí y ¿sabes que es lo mejor de todo este asunto? Que gracias a Muramasa has conseguido materializar tu cuerpo de nuevo. Ahora Urahara podrá buscar un remedio para que puedas mantener tu cuerpo siempre-

-Eso sería increíble.... ¿pero perderías tu poder?-

-Me da igual. Por desgracia ahora tenemos que ocuparnos de esto, después le daremos la noticia a padre sobre tu regreso-

-Byakuya. Si todas las espadas nos hemos materializado, quiere decir que...-

-Seguramente Zangetsu también-

-Tengo que encontrarle.... ¡buscaré a Kurosaki Ichigo!-

-Sé cauteloso Sen. Sigue aparentando que estás bajo la magia de Muramasa, yo averiguaré como resolver esta crisis sin levantar sospechas- mi hermano asiente emocionado por su reencuentro con su antiguo amor y usa su shunpo para desaparecer mientras yo sigo caminando por las alcantarillas. Veamos qué puedo hacer...