Ceguera nocturna.

Un día común.

Estaba sumergido en él mundo de los sueños, a pesar de estar aterrado al saber si abría los ojos podía estar las oscuridad, aquella que no me permite ver nada, no me deja moverme, por mis pasos pendientes de chocar o caer, porque no veía nada mas allá de la oscuridad, siempre seria haci de día y de noche, ¿algún día las cosas cambiarían? Lo anhelaba de corazón, pero luego recordaba la realidad que se me cruzaba por los ojos, siempre soñe con ver las estrellas, soñé con saber que tan resplandecientes son, soñé con saber que era estar en aquella oscuridad viendo como brillan sin solo sentir él suave toque del viento en él rostro, pero pensaba son solo sueños, todos anhelan sueños pocos llegan a lograrlos, la inocencia de un niño era la mas hermosa porque siempre creería del corazón, tendría la esperanza y lo anhelria de corazón siempre que lo deseara así, porque siempre creería en él mismo, porque sabia que lograría con esfuerzo y dedicación, porque él de verdad lo deseaba, porque él corazón no podía engañar a nadie, te delataría tarde o temprano, aunque ya todo termino, él te lo diría.

Unos languetazos me ponen alerta, siento él jalón de mi cabello, frunzo él ceño tratando de ignorar los movientos brucos sobre mi cuerpo, pasaron los minutos las cosas continuaban de igual manera esta vez solo que yo me tape hasta la cabeza del frío que entraba por mi ventana, mientras que las cortinas eran empujadas suavemente como un niño pequeño en él columpio sonriendo hacia la dulce brisa y la sensación de estar allí, fueron devueltas cortando su linea de juego la tristeza era notable aunque estuviera revuelto entre aquellas sabanas incómodo por la calor que entraba me moví bruscamente cayendo de golpe hacia él suelo, le tome cero importancia mientras mantenía los ojos cerrados, hasta que un peso extra choca con mi vientre, solté un pequeño jadeo gracias a este mientras abría los ojos y sentí una respiración cercana, me levanto tocando a mi alredor para verificar y no chocar con nada, me levanto a duras penas sintiendola que esta cerca y no pasarla a chocar ni dañar, mi pantalón de pijama es agarrado y empujado hacia la salida de mi habitación mientras agarro lo que siento las sabanas que quedaron en cama, luchando para que no me tire lejos de ella, con una mano toco distintos sitios de mi habitación sin sentir nada de forma rectangular en él, toco mas arriba topandome con mis almohadas las empujo y sigo en mi búsqueda encuentro algo tocando su forma, siento sus botones manteniendo uno para encenderlo.

Bingo. -pienso-

lo sujeto en él aire cuando pierdo en equilibrio, un moviento me hizo caer de golpe al suelo soltando un estruendo, suelto un chillido mientras él celular cayo al descuido de mi mano.

Genial. -pienso de forma sarcástica-

Me reincorporo sintiendo una pequeña punzada de dolor en mi nariz, logicamente ya que me golpee allí principalmente, trato de no perder la paciencia mientras me sujeto del suelo para levantarme y allí vamos un golpe se apodera de gran parte de mi pecho siento un pequeño languetazo en mis labios, sonrió inconscientemente mientras recuerdo como de pequeña solía decirle que me de un besito, me recargo nuevamente hacia él suelo mientras ella juega con mi cabello, volteo mi cabeza hacia distintas dirección topandome con una pequeña luz hacia él final de la oscuridad vacía, aproximo mi mano hasta alcanzarla, mi movil comienza a vibrar en mi pequeña mano, su pequeña luz a un costado anuncia las notificaciones recientes, lo enciende haciendo que mis ojos ardan y comienzo a parpadear rápidamente consiguiendo que estos se pongan llorosos, colocó mi contraseña ignorando la hora correspondiente veo las notificaciones, eliminadolas de golpe todas a la vez, reviso mi único mensaje

Laisa🌙:
~¿vienes?

Me quedo quieto junto a mi pequeña descansando de jugar tan temprano, él suelo es cómodo ahora que lo pienso...

¡Mierda! -grito internamente al recordar él día y ver la hora dada-

Me levanto de golpe botando nuevamente él móvil y ganándome un choque gracias a la cama, me agarro la frente mientras chillo repetitivamente asustando a mi pequeña quien se acerca a lamerle, la muevo suavemente, tanteo a mi alredor chocando rápidamente con él luego de reiteradas caídas su pobre pantalla deberia estar media rota, lamentable no podre verificarlo hasta mas tarde, coloco la contraseña rápidamente seleccionando la linterna encendiendo la luz del móvil viendo a mi pequeña a mi costado con la lengua afuera.

Buenos días serendipity -digo acariciando su cabeza suavemente mientras recibí una sonrisa de su parte.

Me levanto con cuidado sin pasarla a llevar por la luz, observo las sabanas revueltas en él suelo y luego la cama hecha un desastre suelto un bufido frustrado camino con la luz hasta el interrupto, lo apretó encendiendo la luz de mi habitación gracias a la iluminación completa abro mi armario y saco mi uniforme mientras mi pequeña jaloneaba mi suéter y me uni en una lucha con ella, minutos mas tarde la soborne con otro suéter.

Ja! -le saco la lengua de manera infantil mientras ella me ignora rotundamente, me llevo la mano al corazón fingiendo estar ofendido- Ya me pedirás algo luego -volteo prestando atención a mi camisa.

Me quito la polera del pijama, mirando mi cuerpo al espejo, subi de peso... Me abrocho la camisa lentamente observándome detenidamente al espejo, me quito él pantalón dejándolo en él suelo, buscó él cinturón y me subo él pantalón del colegio, colocandome él cinturón lentamente, me subo la cremallera del pantalón y me coloco él suéter, me rocío algo de perfume veo mis cuadernos en él escritorio y veo mi mochila aparte de esta vacía.

¿es encerio? -miro con decepción mi mochila- ¿donde estas cabeza? -me digo.

Reviso rápidamente mi horario y ordeno mi mochila rápidamente guardo él bolso de ed. Física aparte de este, cuando pienso que tengo todo listo cojo mis audífonos y me los coloco alrededor del cuello, coloco la linterna de mi móvil, y camino por él pasillo apagando la luz de mi habitación y cerrando la escalera luego de que salga mi pequeña, ella me sigue al costado, apago la luz del pasillo y prendo la de las escaleras, mi Pequeña al parecer renconrosa trato de botarme varias veces "jugueteando" honestamente lo dudo, prendo la luz del living dejando mi mochila en él sillón esperando que doña reconrosa no le haga nada, busco su plato de comida encendiendo la luz de la cocina y su pote, le doy agua y comida dejándolo al lado de su camita, al sentir él aroma esta se acerca gustosa sin mirarme ¿que hize para merecer esto? Me dirijo al baño ignorándola, dos pueden jugar a este juego mientras me choco con la puerta y pude sentir como se volteo, teniendo mi orgullo y dignidad por los aires hize que acariciaba las paredes, abrí la puerta cuando la sentí beber agua y tantee a las paredes de la derecha presionando él interruptor, cierro la puerta detrás de mi, cojo mi cepillo de dientes y me los comienzo a cepillar, me tomo mi tiempo, al acabar lavo mi rostro y peino un poco mi cabello hací los costados para poder salir del baño topándome con la cara de doña interesada empujandome su plato hacia mis pies, la miro con una ceja levantada divertido

Vaya la señorita necesito algo -golpeó mi lengua al paladar-

Ella me observa como si no fuera la gran cosa y se tira al sofá.

Así nos llevamos -volteo mi cara en forma de dignidad intacta-

Le doy un poco mas de comida y relleno su pote con agua, agarro mi mochila apago un par de luces, tomo las llaves.

Nos vemos mas tarde pequeña -le digo de manera cariñosa-

Agarro mi móvil y conecto los audífonos, comenzando a amanecer la luz solar comienza a salir podre ir con tranquilidad bueno casi, coloco mi música y cierro la puerta con llaves mientras abro la reja del portón y salgo por allí, corro rápidamente hacia la parada agitandome a cada paso, redujo él paso y me Comienza a costar respirar, abriendo mi boca unos segundos y volviéndola a cerrar para tratar de pasar disimulado en calma, la veo a lo lejos y me quedó un rato quieto esperandando que se acerque la micro observo la hora, voy mas tarde que no se que, ni creativo estoy, genial.

Disculpa, jovencito -una señora mayor me toca él hombro delicadamente- hubo un paro.

Analizó sus palabras un momento y asiento lentamente, cuando la veo que se aleja a una distancia prudente me descargó.

¿¡Me están jodiendo!? -grito exasperado parandome de golpe y hechandome a correr.