17. Quinta Dimensión.

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Después de que Michael nota que  alguien los mira, hace un gesto de protección a Sharloth con su cuerpo, le coge el hombro. No era nada romántico, pero él no quería que le pasara nada.

Esperan más para que aparezca que agujero que los envíe a la Quinta dimensión, y Michael sigue observando aquél lugar fijamente. Miraba hacia los árboles, la zona más alta, ahí había alguien, pero él no lo podía diferenciar bien.

Aparece y se sitúan a pasar por aquél portal. Michael agarra a Sharloth, abrazándola, para poder pasar, ya que no sabían a donde iban a ir.

Si recordaban bien, la Quinta dimensión era la Matriachcool, los demonios que habían cuidado a Sharloth en su infancia y parte de su adolescencia... los que apoyaron a matar a sus padres, los Engel.

Sharloth cierra sus ojos, mientras Michael seguía protegiéndola, abrazándola, para que no le pasara nada.

Comenzaron a caer y a caer. Era como si se hubieran tirado de un precipicio.

No sabe Sharloth a dónde se dirigen, pues, cómo iba a saber, si era la primera vez que iban a estar en un lugar así.

Sienten caerse en el piso fuertemente, probablemente le quedarían morados en sus cuerpos. Sharloth abre al fin sus ojos y... estaban cara a cara... muy cerca, imposible ruborizarse.

No podía despegar los brazos de Michael de ella, era fuerte, y era predecible. Se queda embobada mirando la cara de Michael, tanto así que ni sabía como era el lugar, solo lo miraba, cada expresión que él hacía con los ojos cerrados, hasta que los abre. Michael la mira fijamente, sus ojos grises eléctricos retumbaban en su mente, era hipnotizantes. Era la oportunidad de que alguno de lo dos se acercara y se besaran el uno al otro... pero lo único que hicieron fue sonreír, eso no era posible, pero...

-Tus ojos son amarillos -dice Michael, sonriendo.

-Exactamente, y los tuyos grises.

-Sip -hace una pausa- ¿puedo darte un beso?

-Eh... eh... -se ruboriza- si... pero en la mejilla...

-Jajajaja, como quieras.

Se acerca un poco más, y exactamente hace eso, le da un beso en la mejilla. Para ellos dos fue lo más romántico, para Sharloth la primera experiencia de que alguien le gustara, Michael. Su destino es estar con él, fue, sin saberlo, la persona que la rescató de morir, debía agradecerle.

Sharloth se acerca a él y le besa la frente, ella terminó hecha un tomate... y él, aunque era una persona fría, tenía una expresión cabizbaja, la situación hacía que se sonrojaran los dos, no se podían mirar a los ojos...

Ya era hora de levantarse, por más romántico que fuera la situación, no podían quedarse ahí tirados en el suelo y esperar a que algún ser llegara y los matara, no eran las circunstancias para morir, pero ellos querían un  poco más de tiempo ahí... se querían, y eso nadie lo podía cambiar, pero algo se interponía entre los dos, y no era alguien... era...

Se levantan. Michael se levanta del suelo primero y ayuda a Sharloth a levantarse, estaban despelucados, con hojas y ramitas encima por el suelo. Observaron bien el lugar y era un bosque, un bosque de árboles gigaaaantes, pero que eran hermosos al mismo tiempo.

El tiempo, el ambiente, la situación, la hacía súper romántica, ya que el lugar, por un lago que tenía también, hacía que el brillo verde que emanaba el lugar hiciera que todo  se viera fantasioso, era lo más extraordinario visto por los dos...

-¡Ay qué hermosos se ven! -dice Hudson, sin saber ellos dos, en dónde se encuentra. Toda la escena estuvo dañada por eso, se quedaron mirándose sorprendidos, sin saber qué hacer. Debían saber de dónde había salido Hudson, o mejor, por qué estaba allí.

-¿¡Qué haces acá!? -dice Sharloth, ya divisándola, estaba en parada en el suelo, diagonal a ellos.

-Sólo vengo a espiar, y puedo notar que están acaramelados...

Sharloth se sonroja, sin saber qué decir al respecto.

-¿Cómo llegaste acá? -dice Michael.

-Los seguí en el portal, creo que tú notaste que yo estaba ahí, pero no sabías qué era exactamente.

Se quedaron sorprendidos, no sabían qué decir y por qué estaba allí de verdad. No creían que estaba ahí para espiar, estaban seguros.

Mientras se miraban los unos a los otros, escuchan como si algo estuviera en los arbustos del lugar, era como un animal, todos dirigen la mirada hacia allí.

Mirando los arbustos. Un animal sale como de la nada, se posiciona encima de Sharloth, haciéndola caer al suelo y la comienza a morder. Lo curioso es que no era un animalito, era como un siervo, parecido a un perro, con garras y dientes feroces que comenzaron a morder sin piedad el cuerpo de Sharloth, haciendo que se comenzara a desangrar, desgarrándola, pedazo por pedazo. De nuevo, lenta y dolorosamente.

Los gritos que Shalorh hacía, provocaron que los pájaros que estaban en sus nidos de los árboles gigantescos, salieran como si se aproximara invierno. Los gritos de Sharloth eran ensordecedores, y Michael y Hudson no hacían nada, se quedaron momificados.

Sharloth lloraba, y en esas, voltió su cabeza y miró a Michael y Hudson, parecía como si sus cuerpos los estuvieran controlando, mientras que la sangre se comenzaba a notar abajo de ella... ahora se preguntan, ¿dónde tiene ella tanta sangre?.

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Este capítulo es dedicado a Daniela Ballesteros, ya que me dió las idea. Gracias a ella y a todas las personas que lean esta novela, la compartan, voten por ella, recomiéndenla y espero que les guste mucho.

-Aishiteru :3 -dice Hiyori.

Sharloth.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora