10. Monstruo de Cristal.

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Al ver aquel monstruo Sharloth y Michael comenzaron a prepararse para batallarse contra él.

Era demasiado grande, apenas y podían llegar a los gemelos del monstruo. Era demasiado grande como para acercarse y luchar contra él. Pero ellos debían recuperar el amuleto, para  que Sharloth cumpliera su misión.

Ella hace lo mismo que hizo Michael la primera vez que utilizó el amuleto. Lo pone en frente de su pecho y este comienza a absorber el amuleto, y ella comienza a absorber los poderes del amuleto. Ella estaba decidida a no utilizar el anterior amuleto, ya que solo se pueden absorber 1 o 6 amuletos.

Aparece una espada magnifica de hierro y cristal, que brillaba, era del mismo material de la montaña y el monstruo, que podía derrotarlo. En cambio Michael tenía una espada antigua, que se veía vieja, pero también poderosa con solo estar cerca de ella. Esta vez, de nuevo guardaría el ítem, ya que no lo iba a utilizar.

Michael impulsa a Sharloth para que llegue lo más algo a atacar al monstruo; su objetivo era llegar a la cabeza de aquél, pero sólo pudo llegar a lo que era su vientre, era ENORME, debía de dar todas sus fuerzas, y ella de paso utiliza los poderes del amuleto para llegar lo más rápido posible y atacarlo.

El impacto de Sharloth a el monstruo no fue certero, le hizo un pequeño rasguño al monstruo, pero no funcionaba, en cambio con la espada Michael lastimó mucho a ese ser, corriendolo un poco para atrás, para ignorar sus ataques.

Al próximo ataque de Sharloth, se rompe la espada de hierro y cristal. Estaba en un momento decisivo, ya que estaba justo, en frente del corazón del monstruo, y se le había roto la espada. Solo quedaba que Michael hiciera algo con el monstruo, mientras Sharloth caí sin detención alguna.

Michael atacó con su espada, pero no daba para más, aun que no se había roto, ya estaba muy gastada, y podía pasar eso. Michael se alejó lo más posible del monstruo, cuando un poco aturdido, de nuevo se corrió para atrás.

Para los dos no quedaba más opción de invocar al ítem de búho.

Lo invoca. Aparecen de nuevo aquel arco y flecha que ya la había salvado de una vez la vida. Esta vez de nuevo se la iba a salvar.

A el momento en que el monstruo se concentra, se va hacia ellos y les lanza una ráfaga helada; ninguno de los dos pudo abrir los ojos en aquél momento, y el monstruo aprovechó el momento y los tiró desde donde estaban a casi una acantilado. Era un momento extremo, casi mueren por un milímetro.

Se paran de nuevo, y Michael tiene a Sharloth para que ella pueda tirarle la flecha decisiva. Se tenía que concentrar demasiado. Michael estaba desesperado ya que el monstruo se acercaba por última vez a matarlos.

Hasta que al fin se dió el momento en donde ella le manda la flecha. Tal era la concentración de ese momento que el arco y flecha brillaban, al igual que los ojos de Sharloth, que estaban completamente abierto para percibir cualquier ataque.

Sharloth manda la flecha, que apunta directamente al corazón. El monstruo antes de poder pensar lo que había pasado, si pensaba, comenzó a romperse poco a poco, parecía como un vidrio roto. Calló parte por parte, que se convertía, esta vez, en pequeñas escarchas, y un pequeño diamante cayó y dio en las manos de Sharloth, era una hermosa lágrima de diamante.

--Eres un buen acompañante, gracias Michael.

--De nada.

--Ya tengo el amuleto, vamos a encontrar el agujero para ir a la siguiente dimensión.

--Ok, vamos.

Sharloth y Michael se alejan de la escena heridos, a la espera de encontrar la carta del deseo y poderse ir a la dimensión número 4. Una fantasiosa aventura los esperaba.

Sharloth.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora