i.l.y.t

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  — Tae... —Jungkook le observaba con los ojos desorbitados. Sus mejillas se habían sonrojado, inclusive la punta de sus orejas. Kim supuso que era por el golpe adrenalínico en su sistema— No bromees con eso. —rogó con la voz levemente temblorosa, delatando cuánto le afectaba la declaración del mayor.

  El moreno sonrió casi como si le resultara graciosa la petición de su dongsaeng, una parte de él deseando que fuese una simple broma, y la otra se sentía irremediablemente alegre de por fin poder decirlo; se sentía como quitarse un gran peso de encima y, aunque sus manos le temblaban sobre el vaso vacío entre ellas, se sentía feliz. Asustado. Felizmente asustado. ¿No le decía lo mismo su acelerado corazón, sus manos temblorosas y el enjambre de emociones y pensamientos que se arremolinaban en su cabeza de manera vertiginosa? Se iba a malditamente desmayar porque su cuerpo no sabía cómo demonios reaccionar a la situación a la que él mismo se había llevado.

  — No... No es una broma. —el moreno buscó los ojos oscuros del menor, viendo asombro en ellos. Incredulidad— Yo no bromearía con algo así.

  Jungkook abrió su boca levemente, de manera casi imperceptible. Casi, porque Taehyung reconoció el gesto de manera inmediata, y, ¿cómo no hacerlo, si en esos últimos meses parecía ser una atracción irresistible para el moreno el observarle? No quería sonar como un acosador, pero parecía ser que sus ojos se atraían de manera inmediata por él.

  — Hyung... —murmuró el azabache, sus ojos estaban levemente brillosos y su labio temblaba solo un poco. El mayor quiso hacer algo, tomar su mano o levantarse y pedirle perdón, pero solo pudo quedarse allí, avergonzado, nervioso y sintiendo que el corazón se le salía por la garganta.

  — C-Creo que lo mejor es que me vaya... —murmuró de manera temblorosa al ver que el menor sólo se mantenía en silencio, aparentemente impasible. Mientras se levantaba torpemente de la mesa, pasando a llevar el vaso debido a que chocó con ésta. Trató, en vano, de agarrarlo, pero solo logró empujarlo directo hacia el borde de la mesa, precipitándolo irremediablemente.

  El choque del vaso contra la cerámica pareció ser el culmine de su torpeza máxima. Sintió como los colores se le subían al rostro, el calor asentándose en la punta de sus orejas. El sonido del cristal rompiéndose pareció permanecer incluso durante el silencio posterior al estruendo, y deseó poder desvanecerse de allí de una buena vez y no tener que mostrar su rostro nunca más.

  ¿Cuánto tardaba cambiarse el nombre y salir del país?

  — ¡Lo siento! ¿Era muy caro? ¡Te prometo que lo reemplazaré! —exclamó de manera atropellada. Mierda, iba a ponerse a llorar de la frustración y la vergüenza. ¿Cómo podía ser tan idiota? Imbécil, imbécil... Había quedado como un idiota torpe y patético frente a Jungkook, se sentía como un perro con la cola entre las patas.

  Jungkook negó al instante, viendo el rostro acongojado y sonrojado de su amigo— No te preocupes, son los vasos de diario, da igual. —le tranquilizó, levantándose dispuesto a buscar algo para barrer el pequeño desastre que había provocado Kim, mas se detuvo al recordar que estaba descalzo— Mierda, estoy sin calcetines. ¿Puedes...?

  — ¡Sí! —el moreno, el cual tenía calcetines (no era mucho más seguro que estar descalzo, pero con tal de enmendar su torpeza estaba más que dispuesto de arriesgarse)— ¿Dónde está la escoba?

  Jungkook señaló una puerta algo pequeña en una esquina, y el moreno rápidamente se dirigió allí. El azabache le observó mientras barría con ahínco el pequeño desastre que había creado, y sintió como una dulce ternura nacía, mezclándose con alegría eufórica y cariño. Le gustaba a Taehyung. ¡Le gustaba! ¡Él! No podía creerlo. No podía. Literalmente era todo lo contrario a lo que esperaba del mayor, considerando todas las dificultades y roces que se habían desarrollado entre ellos ese último tiempo. Si hubiese estado en su cama seguramente se hubiese retorcido sobre ella de maneras casi imposibles mientras daba grititos de emoción. Una sonrisita nació en sus labios, delatando lo feliz que se sentía. ¿Y cómo no estarlo?

change of mind ;; kth + jjkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora