Capitulo 23

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La mañana era tranquila, Elizabeth apenas despertaba de tal vez la noche en que mejor había dormido. Aun en su pijama y descalza, se puso tan solo una bata gris de una tela que parecía ser seda y bajo para preparar el desayuno como manera de agradecimiento a Happy por haber pasado la noche ahí, sin embargo cuando entro a la cocina se sorprendió al encontrar a Jackson sentado tomando una taza de café, en la pequeña mesa que había ahí; era como si el color de su piel se hubiese ido, estaba completamente pálida, giro la cabeza buscando al Son que ella había dejado en su sala.

"Si buscas a Happy, ya no está" la voz de Jackson sonaba grave, no apartaba la mirada de la chica que hasta ahora parecía una estatua.

"¿Cuánto tiempo llevas aquí?" Elizabeth se cruzo de brazos, sosteniéndole la mirada, aunque en el fondo las dudas sobre si sabía sobre su situación la invadían.

"¿Es eso realmente importante?" Le dio un sorbo a la taza de café que mantenía en su mano derecha "He intentado comunicarme contigo, y tu solo ignoras mis llamadas".

"¿Necesito recordarte lo que paso la última vez que nos vimos?" La castaña tenía toda la intención de desviar la atención de la conversación a lo que fuese menos a la razón de por qué Happy había pasado la noche en su casa.

"¿Vas a seguir contestándome con preguntas o te sentaras y tendremos esta conversación?" Le señalo la silla frente a él, esperando que ella se sentara.

"Ilumíname por favor, ¿ya sabes sobre que tenemos que hablar?" caminó hasta la silla que Jax le señalo tomando ahí su lugar. Ella lo miraba seria aún lastimada por lo que había pasado en la cena en casa de Gemma y decidida a no decir nada sobre su situación.

"Elizabeth" el nombre salió de los labios de Jax de manera lenta y casi como un suspiro "Lo que dije la otra noche sobre Wendy y Abel fue totalmente verdad, y lo he dicho con todo el amor y preocupación que tengo por mi hijo..."

"Tú sabes que ese no fue el problema" Elizabeth negaba moviendo la cabeza describiendo lo obvio.

"Lo sé" hizo una pausa, intentando asegurarse de no arruinarlo esta vez "Es solo que tengo tantas cosas en la cabeza que a veces me cuesta pensar correctamente que decir, como actuar".

"Esas son excusas Jax" ella le sonrió de lado, pero era más bien una sonrisa triste "Tu y yo sabemos quién es la única persona se mantiene en tu mente, que no importa que pase siempre estará ahí".

Sin decir el nombre Jax sabía a quién se refería Elizabeth, desvió la mirada al techo intentando que ninguna lagrima se escapara "Estoy tratando de arreglar todo, su muerte, el club, pero..." regreso su mirada a la chica sentada frente a él "La verdad, es que no se si podre hacerlo".

"Yo sé que si" extendió su mano hasta encontrar la de él en la mesa, la apretó tan solo un poco cuando vio que lagrimas comenzaban a caer por las mejillas de Jax "Pero no puedes hacer todo a la vez, no puedes intentar mejorar el club, ni intentar descifrar la muerte de Tara y mucho menos intentar tener una relación" la voz de Elizabeth era firme pero a la vez llena de comprensión y cierta dulzura, su mirada ahora era más suave con los ojos llenos de lagrimas que luchaba por mantener.

"No quiero intentar tener una relación contigo, quiero hacerlo desde el día en que apareciste frente al Club" se inclino hacia adelante, apoyando los codos sobre la mesa y sosteniendo ahora la mano de Elizabeth entre las suyas

"No es cierto" replico rápidamente ante la confesión del rubio.

"¿De qué hablas? Claro que si, cuando estoy contigo siento que algo dentro de mi comienza a estar bien" Admitió el rubio sin apartar la vista de Elizabeth, era la primera vez que le confesaba lo que ya había pasado antes por su cabeza, era la primera vez que lo decía en voz alta.

"¿Te has dado cuenta que llevas tu anillo de casado?" preguntó Elizabeth alejando su mano del agarre en la que Jax la tenia, el chico por su parte dirigió su mirada a su dedo anular donde se encontraba el anillo, "Ha estado ahí siempre, desde que regrese, cuando nos besamos e incluso la mañana después de haber pasado la noche juntos estaba ahí. Yo no quiero competir con ella, no quiero tomar su lugar, nunca ha sido mi intención" se levanto de la silla en la que había permanecido sentada acercándose a él "Quiero ser importante para ti, no solo porque te hago sentir algo que ella hacía también, sino porque quieres estar conmigo por mí" se inclino tan solo un poco dando un beso en la mejilla dejándole un sabor salado en sus labios por las lagrimas ya habían pasado por ahí, se enderezo para subir a su habitación no quería que él la viera llorar porque entonces se arrepentiría de cada palabra que acababa de decir.

Por más que intentara negarlo era verdad, Tara ocupada su mente la mayoría del día, la injustica de su muerte, la falta que le hacía, lo mucho que la extrañaba, sabía que no podía estar a medias con Elizabeth "No te alejes, por favor" le tomo la mano evitando que se fuera en ese momento, él se levanto quedando a pocos centímetros de ella. Elizabeth era tan solo unos centímetros más pequeña que él, llevo sus manos hasta el cuello de ella haciendo que lo mirara "Mantente cerca, no quiero perderte de vista"

"Lo haré" le sonrió con los ojos cristalizados llenos de lagrimas. Jax cortó el espacio restante entre ellos besando sus labios de la manera más suave y delicada que pudo, se separo y salió de la casa dejando a Elizabeth de la misma manera en que él se había ido, con lágrimas resbalando por sus mejillas y un vacio enorme en el pecho.

COMO SALVAR UNA VIDA [ Jax Teller ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora