INVASION -© [MARKHYUCK]

02: Entre el caos.

El caos en la entrada era desesperante. Una multitud de personas intentaba salir a la vez, empujándose y bloqueando las puertas en un intento por escapar. Los gritos y el sonido de personas cayendo se mezclaban con el eco de los pasos desesperados.

El padre , con el instinto protector al máximo, mantuvo a su familia cerca, rodeándolos con sus brazos mientras escaneaba el lugar en busca de una salida alternativa. Sin perder tiempo, los guió hacia la zona del supermercado, donde esperaba encontrar alguna puerta menos concurrida o algún rincón en el que pudieran protegerse de la multitud enloquecida.

Pero el supermercado no era muy diferente. La gente también corría, desesperada y sin dirección, chocando entre los pasillos y dejando caer productos al suelo. La familia se detuvo detrás de un exhibidor, usando las grandes cajas de cereales como un muro improvisado para protegerse. La madre, temblando y con lágrimas en los ojos, se aferraba a Renjun, quien la miraba sin comprender del todo el terror que los rodeaba.

De repente, una voz susurrante y urgente rompió el caos a su alrededor.

-Por aquí, entren, rápido.

Mark giró y vio a un hombre en uniforme de cajero, parado junto a una puerta lateral que parecía llevar a algún lugar fuera de la vista de todos. El hombre miraba a la familia con apremio, invitándolos a seguirlo sin hacer ruido.

-¡Vamos! -dijo el padre, sin pensarlo dos veces, tirando suavemente de Mark y de Renjun, mientras la madre se acercaba también.

Con precaución, se apresuraron hacia la puerta, pasando junto al cajero, quien rápidamente cerró tras ellos. Entraron a un pequeño pasillo de servicio, oscuro y silencioso, que contrastaba de forma inquietante con el bullicio del exterior.

-¿Están bien? -preguntó el cajero, mirándolos con preocupación mientras respiraba con dificultad. Era evidente que también estaba asustado, pero había decidido ayudar a los pocos que pudiera.

-Gracias... -susurró el padre de Mark, asintiendo-. ¿Sabes hacia dónde lleva este pasillo? ¿Hay alguna salida?

El cajero asintió, aunque sus ojos reflejaban la incertidumbre.

-Este pasillo conecta con la salida de empleados, pero no sé si estará despejado... Puedo guiarlos hasta allí, pero después estamos por nuestra cuenta.

Mark apretó la mano de Renjun, sintiendo la tensión en su propio cuerpo, pero también la calma que necesitaba proyectar para mantener a su hermano pequeño tranquilo.

-Está bien, guíanos, por favor -respondió el padre con determinación.

Y así, en silencio y con el temor a cuestas, siguieron al cajero por el oscuro pasillo, esperando que aquella salida los llevara a un lugar seguro, lejos del horror que los acechaba en el centro comercial.

El cajero los guió rápidamente a través del pasillo de servicio hasta una puerta que conectaba con la salida trasera del centro comercial. El aire frío de la noche entraba por la pequeña apertura, y por un momento, la familia sintió una mezcla de alivio y temor.

-Mucha suerte -dijo el hombre, con una mirada triste pero decidida, mientras empujaba suavemente a la familia hacia la salida.

Cuando estaban por salir, Lee Joon Gi, el padre de Mark, se detuvo y lo miró, notando la tensión en el rostro del cajero.

-¿No viene con nosotros? -preguntó, sintiendo la incomodidad de dejarlo atrás.

El cajero negó con la cabeza, con los ojos llenos de tristeza.

-No puedo. Mi hijo está aquí adentro... con esos monstruos. No puedo irme sin él.

Mark y su madre se miraron en silencio, sintiendo una tristeza profunda por aquel hombre, comprendiendo la fuerza de sus palabras y el dolor que implicaba. Renjun, aún abrazado a su madre, miraba al hombre con una mezcla de curiosidad e inocencia, aunque alcanzaba a entender que algo terrible pasaba en su vida.