(Me levante algo entusiasmado, los miércoles ya eran mis días preferidos pero ahora ya tenían un nuevo motivo por el cual eran hermosos. Fui al colegio y no me resistí, si bien tenía ganas de gritarle al mundo que ese miércoles la veía fui mas reservado, se lo conté a pocos y Martin era el que mas me escuchaba, era costumbre nuestra dar vueltas por el colegio y hablar, ese día frene para contarle a mi profesora que la veía, esta lo tomo algo confundida ya que no le había terminado de contar como iba mi historia con Iara, pero me deseo suerte. De nuevo calculamos los minutos, tenia que estar a las dos y cuarto en su colegio, y el día se me hacia eterno)
Cuando estas horas pasaron mi felicidad no se medía ya, no tenia límites, llegue a mi casa y me bañe lo mas rápido que pude. Y ahí estaba, esperando el tren, me había cepillado los dientes dos veces y hecho dos enjuagues bucal. Yo fumaba y ese día después de los enjuagues no fume, no podía ir a verla con olor a cigarrillo. Y así estaba, con dos litros de perfume y peinado. Tenia el mismo jean claro con el que había ido a la fiesta, una remera gris y un buzo celeste con rayas. (El buzo estaba manchado en las mangas porque con él había terminado en mi fiesta de disfraces, todo pintado) Cuando llego el tren me invadía el miedo y miles de emociones que no tenían nombre. Por un lado estaba la posibilidad de que me vea y no le guste, en mi cabeza era la mas segura, mi autoestima siempre era pésimo. Tenia miedo de ir por el hecho de que me vea y no le guste, se arrepienta de haberme dado la oportunidad y me bloquee de todos lados. Sin embargo, estaba la otra posibilidad de que si le guste y me vea con los ojos del amor, cosa que veía imposible. Pero quería verla, sin importar el momento o lo que pase, necesitaba verla como nunca había necesitado nada en mi vida. En mi mente pasaba un dicho de que la belleza era subjetiva, estaba en los ojos del que la veía, si bien no me servía de mucho, quizás para ella era su tipo de chico.
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'Entre poesías, un amor y una niña'
RomanceLas historias de amor son de lo mas raro, casi todas las personas le tienen miedo a las verdaderas historias de amor, otras solo sueñan con ellas. Estoy dispuesto a contar la mejor adaptación de mi verdadera historia de amor, espero que les guste.