Mimi

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El silencio apenas dura un segundo, porque Yolei recuerda cómo usar sus cuerdas vocales y desgarra tímpanos con un chillido cerca de entrar en el ultrasonido, llegando a despertar a un confuso Ken, que se encuentra de pronto con su amada al borde de un ataque de ansiedad, mira a Yolei y la abraza en el momento en el que ella entra en estado de pánico, hiperventilando como si alguien le estuviera estrujando los pulmones. Desde ese abrazo mira al resto del grupo, sus caras lo dicen todo, otro de ellos ha muerto, así que intenta hacer recuento; buscando averiguar por descarte cuál de sus amigos se ha convertido en alimento de gusanos. Justo a su lado, TK da un paso hacia Davis extendiendo una mano para recogerla en seguida y quedarse completamente quieto. Al lado de las escaleras, Cody hace ademán de correr hacia el cuerpo, pero la férrea mano de Sora le impide ningún movimiento, la chica está pálida como un fantasma, mira hacia la habitación en la que está el cuerpo de Kari y respira, obligándose a no entrar en pánico. Izzy ha apartado la mirada, girándose hacia el grupo paralizado al pie de la escalera, mira a Tai a los ojos, esperando que él reaccione. Pero Tai no aparta la mirada de la habitación del primer piso, a través de la barandilla ha visto algo, así que cierra los puños y empieza a correr escaleras arriba.

-¡Matt!

Su nombre parece despertar al rubio, que mira a su hermano, a sus amigos y a su novia, esperando que algo le diga qué debe hacer, pero, por suerte para él, Sora ha recuperado la compostura, suelta el hombro de Cody, que no para de mirarla mientras se aleja para ayudar a su amigo a calmar a Yolei.

-Ve con Tai. No dejes que haga una tontería, por favor.

Apenas un segundo después de la orden de Sora, Matt desaparece en las escaleras y Tai aparece corriendo en la pasarela camino a la habitación en la que Kari descansa. Su cara es un poema que habla de desesperación y rabia. Joe lo mira, incrédulo. "¿Qué he hecho?" es lo único que acierta a susurrar antes de echar a correr por las escaleras. Mimi, que había tenido la cabeza enterrada en su espalda, llorando, lo mira irse, boquiabierta y confusa por sus palabras, echa un vistazo al cuerpo de Davis y, acto seguido, corre tras Joe.

Para entonces Tai ya se ha internado en la habitación y Matt llega justo a la puerta. El joven líder está acuclillado al lado del cuerpo de su hermana, acariciándole una mejilla salpicada de sangre reseca, la rabia ha desaparecido y solo queda la desesperación que deja la pérdida, el dolor de ver a una persona que ama de esta manera, no solo fría, sino, también, mutilada.

-Aquí no hay nadie, ha debido escapar -su voz suena lejana, como si hablara con él desde otro plano de existencia.

-¿Y en el despacho de al lado? Están todos comunicados, tal vez se ha escondido en uno cerca -con el fuego fatuo azulado de nuevo en sus ojos y sin pararse a ver qué ocurre realmente en su amigo, Matt entra en la habitación sin detener la carrera que inició en las escaleras.

-No, Matt, déjalo. Tenemos que reunirnos todos, hay que salir de aquí.

Las palabras de Tai detienen los pies de Matt a pocos pasos de la puerta que comunica con el despacho de al lado; con ese resplandor ocular se gira hacia su amigo con una réplica que seguro es de lo más hiriente, pero, entonces, lo ve. Se para a mirarle, pero Tai no levanta los ojos del cuerpo de Kari, así que, con un asentimiento de cabeza lento, Matt entiende todo, relaja el cuerpo y el alma para dejar un segundo a solas a Tai.

Al salir a la pasarela, ve algo que no esperaba en el piso de abajo. Yolei, por fin se ha calmado del sofoco que le causaba la visión del cadáver de Davis, así que suelta un poco el abrazo sobre Ken, lo suficiente para que este pueda girarse y ver el cadáver de su amigo. En un segundo, el chico parece sufrir una epifanía: sus ojos se nublan con una visión del pasado y su mirada solo transmite terror. Antes de que nadie pueda reaccionar, su cuerpo convulsiona y sus amigos se giran para mirarle. Al segundo siguiente Yolei, Cody, TK e Izzy le sujetan cabeza y las extremidades mientras sufre un ataque de ansiedad que convulsiona su cuerpo con violencia infinita. Por lo que parece nuestro joven amable y gentil sabe muy bien lo que es ver un cadáver destrozado en el suelo, ya ha visto algo así y no le trae felicidad; incluso diría que veo culpa en su rostro a través de la pesadilla que su cerebro le obliga a presenciar. Es en ese momento que Joe aparece en la planta baja por las escaleras, corriendo solo y se dirige a su joven amigo para tratarlo.

Digimon Adventure: Última Noche [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora