10

4K 585 276
                                    

Jisung era precioso.

Mark les entregó los papeles días después, Chenle y Renjun firmaron emocionados y salieron del hospital con bebé en brazos y una pañalera en sus hombros.
Había valido la pena cada minuto.

- Jisung Huang Zhong... - murmuró Chenle en el asiento de atrás mientras miraba el rostro tranquilo del bebé. - Es muy lindo. -

- Lo es. - Renjun sonrió ampliamente. - Y muy tranquilo... parece que le gusta mucho dormir. -

- ¿Estás nervioso? - preguntó el menor y Renjun mordisqueo sus labios. - ¿Qué crees que dirán Jeno y Jaemin? -

- No sé... espero, espero que reciban bien a Jisung, él es un buen chico. - Renjun se desvió hacia el centro comercial, necesitaban una cuna y otras cosas más... comprarlas de una vez con Lele sería lo mejor. - El bebé no tiene la culpa de nada y merecía una familia... -

- ¿Podré verlo? - murmuró Chenle tocando con suavidad su mano. - ¿O también estaré oculto para él? -

El estómago de Renjun se removió de culpa, sus manos apretaron más fuerte el timón. - Puedes verlo, Chenle... podemos organizar bien nuestras visitas, no te quitaría a Jisung... gracias a ti es que está conmigo. -

Chenle sonrió ampliamente, sus mejillas se tiñeron de rojo y concentró su atención nuevamente en el bebé, hasta que bajaron del auto.

Encontraron la cuna perfecta, pañales, ropa, cargador, una mesedora que Lele juró que Jisung amaría y unos cuantos juguetes, una lámpara de dinosaurios que hacían sombras cuando giraba, biberones, leche de formula y pijamas a juego para los tres. Todo bien, todo perfecto.

- Chenle, no es necesario... - Renjun replicó nuevamente en la fila para la caja. - Yo lo pagaré. -

- Es demasiado. - negó el menor. - Estamos juntos en esto... lo dividiremos a la mitad, lo mejor para Bebé Jisung... -

- Lele. -

- No me harás cambiar de opinión, Jun. - Chenle rió. - Así que solo camina... - Renjun empezó a reír cuando la risa de Chenle apareció.

La risa del menor siempre lograba hacer reír a todos alrededor, era el efecto Zhong, como él solía decir.

- Su bebé es precioso. - Exclamó una joven que iba detrás de ellos, haciéndolos girar. - Ustedes son una bonita pareja también... -

El rostro de ambos se enrojecio, las palabras de Renjun se secaron en su garganta y como siempre, Chenle, la salvación llegó hasta él.

- Muchas gracias. - exclamó con una sonrisa. - Somos primerizos así que andamos algo nerviosos... -

- ¡Qué bello! - ella aplaudió animadamente. - Es bueno saber cuando alguien ha adoptado... el amor que eso demuestra es muy grande. -

- Gracias. - murmuraron ambos, mientras quedaban de espaldas de nuevo a ella, observando si tenían todo lo necesario o podían aún salir en su búsqueda, hasta el corazón de ambos murió al escuchar las palabras más innecesarias de la vida.

- ¡Jeno! - la chica que hacía unos momentos había alegrado su día, estaba arruinandolo de manera brutal. - ¡Aquí idiota! - exclamó levantando la mano y Lele giró a verla. - Oh, lo siento... -murmuró sonrojada y Lele sonrió ligeramente, sus nervios a flor de piel.

Ambos se giraron hacia la caja, sin verse, sin tocarse, sin hablar, Renjun cerró sus ojos fuertemente cuando escuchó la voz a su espalda y agradeció que se le ocurriera colocarse una mascarilla antes de bajar del auto.

- Irene, maldición... no me grites así, las personas no necesitan saber mi nombre. - gruñó Jeno empujando a la chica en el brazo.

- Te diría que tal vez te consigo pareja así... pero tu ya llegaste a tu límite de personas. - murmuró entre risas y Renjun sintió su cuello enrojecer.

THREE? | NoRenMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora